Capitulo 22

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Maratón 1/4

El día tan esperado había llegado, Emilio en días anteriores había notado a Joaquín un tanto extraño sin saber que planeaba detalladamente la sorpresa.
Los padres de Emilio ya se habían ido a trabajar, Kiko salió para ver unos asuntos de un trabajo y Romina había salido con sus amigas, por lo que el rizado se encontraba solo en casa. Después de desayunar salió un momento al jardín para tomar aire fresco, a pesar de lo extraño que se mostraba Joaquín esos días Emilio se sentía feliz ya que celebrarían su primer mes de novios. Joaquín ya había llegado a la casa y al ver a su novio corrió para saludarlo.
-Hola amor- le dijo.
-Hola precioso- dijo Emilio sin mirarlo ya que aun pensaba en lo que podía estar tramando Joaquín.
-¿Qué pasa Emilio? ¿Por qué no me miras? ¿Acaso estás molesto conmigo?
-Claro que no Joaquín, yo no podría estar molesto contigo, solo me quedé pensando en algo.
-¿En qué?
-Que hace exactamente un mes me hiciste el chico más feliz aceptando ser mi novio.
-Yo soy más feliz porque sé que aunque tengo mucho trabajo me encanta verte todos los días y salir a cualquier lugar en mis días de descanso. Te amo demasiado Emilio.
-Yo te amo más bonito.
Emilio se levantó de aquella silla para acercarse a Joaquín, se miraron por unos momentos para después darse un beso lleno de amor. Joaquín se separó del beso mientras soltaba una pequeña risa.
-Espera Emilio- dijo aun riendo.
-¿Qué pasa mi niño?- preguntó riéndose de la misma manera.
-No podemos besarnos aquí, Manuela o tu familia nos pueden ver.
-Por eso no te preocupes, Manuela fue a comprar el mandado y mi familia no está. Además, no tienes que preocuparte, mi hermano ya sabe de nuestra relación.
-¿Y qué piensa?
-Él nos acepta porque le encanta verme feliz contigo.
-Ay amor, eso es algo lindo. Bueno, entonces sigue besándome.
Así los dos duraron por un momento besándose para demostrar su amor. Al separarse juntaron sus frentes para mirarse un momento y acariciar sus rostros.
-Amor, voy a llevarte a un lugar después de trabajar- dijo Joaquín.
-Ya quiero saber a dónde, pero confió en ti que será un lugar especial como en nuestro campo de girasoles- dijo Emilio.
-Ya descubriste una parte de la sorpresa, pero aun faltan otras dos.
-Está bien, sea lo que sea te aseguro que me encantará. Solo que hay un problema.
-¿Cuál?
-Mis padres van a llegar temprano y va a ser algo difícil porque pueden descubrirnos.
-Por eso no hay problema, puedes inventarle la excusa de que saldrás con los demás, tú te puedes ir antes que yo y cuando salga te mando un mensaje para vernos en algún lugar para poder irnos a nuestro lugar.
-No cabe duda de que tengo al novio más inteligente y hermoso del mundo.
Emilio cargó a Joaquín para darle unas pocas vueltas y después plantarle un beso.
-Bueno amor, tengo que ir a trabajar porque si no tendré problemas con tu padre si no hago lo que me pidió y no podré salir temprano para tener nuestra hermosa tarde.
-Está bien bonito, ve a trabajar porque no quiero que eso suceda- dijo Emilio dándole un último beso.
Esa iba a ser una tarde mágica e inolvidable.

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