Conquista imposible [TodoBaku] [ShinKami]

Capítulo 6

No le gustaba esto en lo absoluto.

— ¡Denki!

Y se odiaba aún más por sentirse caliente al verlo.

—Hola...

Eijirou tenía una resplandeciente sonrisa, su uniforme de policía color negro se ajustaba perfectamente a su musculoso cuerpo y usaba una gorra pero aún así algunos mechones teñidos de rojo parecían escapar.

Se sentía asqueado de sí mismo, aún debía oler a sudor y al desinfectante de Chisaki. Incluso podía sentir la saliva en su cuello cuando el mayor paso su lengua y puso su mano en esa zona, como si ese simple acto la borrará.

Para cuando el pelirrojo llego hasta donde estaba él, Kaminari tenía una sonrisa incómoda reflejada en el rostro y apretaba casi de forma violenta su jean con su mano izquierda.

Si Kirishima lo noto, no lo dijo y le dio un abrazo que hizo que el corazón del rubio se retorciera por la añoranza de algo que jamás sería suyo y el temor que oliera el sexo en él. Que le causará repulsión.

— ¡Estoy tan feliz de verte! —exclamo alegre el pelirrojo — Tamaki-sempai tiene a su pareja y una amiga aquí así que pasamos a visitar, ¡aunque no creí que te encontraría tan rápido Den! ¿vas de salida? ¿quieres que te lleve a casa?

—Yo...no, pensaba quedarme en la biblioteca a estudiar —mintió el de ojos dorados —Ya sabes, mis exámenes tienen que salir bien sino Bakugou me matará.

Kirishima rió divertido por su comentario y paso un brazo por sobre sus hombros haciendo que el corazón se le acelerara.

Deseaba haberse dado un maldito baño. Aunque hubiera tenido que amenazar a Chisaki para que le dejara usar las duchas de los profesores.

—Pero supongo que tendrás tiempo para un almuerzo, ¿no? —pregunto ilusionado Eijirou — ¡No te robaré mucho tiempo! Solo hasta que sempai vuelva y nos tengamos que ir.

Denki se mordió los labios con ansiedad, sentir el cuerpo del pelirrojo tan cerca suyo no era... agradable como en su tiempo de ignorancia lo fue. Y además le dolía la cadera por estar con Kei hacia pocos minutos.

Pero no podía negarse a los ojos rojos suplicantes. No cuando los tenía frente suyo después de tanto haberlos evitado.

—De acuerdo Kiri, ¡pero tú pagas!

— ¡¿Eh?! ¡Eso no es justo!

Anta la cara de indignación de Eijirou, Denki se rió y de forma disimulada se separó de él yendo hacia la cafetería de la universidad.

No obstante, cuando el pelirrojo le estaba por seguir el paso noto que en su mano —con la cual había tocado al rubio— había un pequeño mechón rizado de cabello castaño oscuro.

¿Es de Sero?

Kirishima miro la espalda de su amigo que se alejaba cada vez más y más, decidió que no preguntaría por eso. Era solo un mechón de pelo en la ropa, era posible que en un roce con otro estudiante o amigo a Kaminari se le hubiera quedado pegado. En un lugar muy pero muy cercano como era la cobertura entre su cuello y hombro. Sobre su piel expuesta.

Pero algún motivo esa auto explicación que se dio le resultó sumamente vaga e idiota.