🌻La Despeinada🌻
Miro hacia el fondo de la tienda; libros, discos, todo tipo de cosas características de esta tienda.
Mi vida vuelve a tomar ritmo en este silencioso pueblo; tranquilo y relajante, libre de tormentos.
Llevo ya varios meses trabajando para mi abuela, y sí, me mudé, olvidando el corto mes que le había prometido a Alianna. Es bueno para mí, y también para Nai que estuvo muy sola durante todo este tiempo que nuestra familia se separó.
Quisiera saber por qué nuestra familia peleó y se dispersaron antes, pero lo había olvidado, no preguntaba ya que todos se preocuparían por mí. Y era mejor para todos que nadie mas supiera todo por lo que había pasado, y también era mejor que acompañara a Nai, además tenía y debía estar alejado un tiempo de mi antiguo... hogar.
Suspiro y miro a través de los ventanales.
No es tan aburrido estar en la tienda como parece, mi abuela Nai viene cuando puede y charlamos a veces ahora que soy el gerente, me encargo completamente de su tienda y es mi deber, porque es lo que hacen los gerentes ¿no?
Unas sonrientes personas pasean en sus bicicletas y otros chicos andan en patinetas cerca del lejano parque frente a mí.
Me gustaría algún día patinar o simplemente sonreír como ellos, divertirme... Pero no podía, no quería llamar la atención y mostrar lo vulnerable que estaba aquí.
Lo sé, estoy seguro de que Chuck no saldrá en años, pero suponiendo que sí, él haría lo posible por encontrarme...
Niego por lo paranoico y tonto que me he vuelto.
El reloj en la pared del fondo suelta un pitido que me da la hora automáticamente; son las 5:00 pm.
Me levanto, estiro, tomó mis audífonos introduciéndolos de una sola vez en mis oídos ya de memoria, salgo de atrás del mostrador y el piso de madera rechina bajo mis pasos cansados, empujo la puerta y el sonido de la campanilla tan parecida a la de donde antes solía trabajar me hace estremecer...
Cierro mis ojos. Trato de bloquear los sentimientos pasados y dolorosos que trataban de irrumpir.
Camino.
La brisa salada de la playa es refrescante. Cruzo la calle hasta que me siento en uno de los banquillos que decoraban la última calle antes de la playa.
Quedo mirando la tienda y las otras más que llenaban la calle. Giro la vista y dejo salir aire pesadamente al no ver nada interesante.
Y estaba bien, el pueblo tampoco está tan mal después de todo, salgo de trabajar, me voy a la orilla de la playa a fumar un cigarrillo y sigo con mi vida apretando mis pensamientos y dudas.
Meto la mano en mi bolsillo buscando el cilindro nicotinico, o cigarrillo, lo llevo hasta mi boca y lo enciendo, le doy una calada, el sabor un tanto amargo me calma de alguna forma.
No sé cómo decirle, pero creo que es ansiedad, así como cuando siempre debía mantener una parte de mi cuerpo en movimiento constante para sentirme relajado, ahora era reemplazado con los cigarrillos, y se sentía tan bien después del desastre...
Niego para no recordar más.
La atención la pongo sobre el humo del cigarrillo que se escapa de mi boca. Y sonrío recordando aquella vez que Nai me sacó a patadas de la tienda la primera vez que me vio fumando...
Obviando esa pasada acción, ella era una buena abuela y a pesar que tiene 56 años de edad, no lo parecía, se ve tan joven para su edad, y tiene un gran parentesco con mamá.
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LIFE NOTE -∆-
Romance🌻∆Life Note∆🌻 Un pueblo alejado de los ruidos y ajetreos de la cuidad, ahí es donde descansa Andrew. Ahora debe afrontar actos y falsas promesas de almas que formaron parte de su vida. Quiere encontrar la calma después de la tormenta en aquel viej...