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—¿Esta listos?—nos pregunta la madre de Alik a los tres

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—¿Esta listos?—nos pregunta la madre de Alik a los tres. Karenina, Yerik y yo.

—Sí, lo estamos.—responde Haddei.

—Perfecto, entonces vámonos.—dice sin más Catalina.

Para muchos solo es un 30 de mayo más, mientras que para otros es el día más triste aquí en Moscú, Rusia.
Permítame explicarles que no solo a nosotros, los que éramos de origen ruso nos
quitaron a uno de nuestros familiares, sino que también a personas de otros países que decidieron vivir aquí, el gobierno dijo que "era el pago de su hospedaje" Algo realmente injusto, o al menos así lo veo yo.
A parte de injusto, cruel. Todo era cruel. Y cruel ni en la ficción, ni en la realidad es bueno. Que repugnante.

—Karenina.—la llamo al verla tan pensativa.

—¿Hum? Mande.—responde con una sonrisa saliendo de su trance.

—¿Qué te pasa?—decido preguntar.

—Nada, ¿Sabes quién vendrá?—me pregunta con su típica sonrisita pícara.

—¿No? ¿quién?—pregunto rodando los ojos porque sé lo que está apunto de decir.

—Tu novia esa, Tiana cara de rana.—dice riendo.

—Oh, cierto. No le digas así. No tiene cara de rana y no es mi novia.

—Lo sé, pero rima así que buehh... En realidad es bastante atractiva. La otra vez los miré hablando. ¿Acaso renacerá ese viejo amorío?—dice alzando las cejas.

—Fool. Solo hablábamos de.... cosas.—digo sin importancia.

—Tonto tú.

Una vez que todos hemos entrado, la conferencia da inicio, la mayoría de las personas sentían tristeza, otras enojo y mucho resentimiento, lo que fuese  que sintiéran su mirada lo reflejaba. Pero bueno, realmente todos sentíamos algo. Trato de encontrar a Tiana por algún lugar pero sigo sin poder verla, me gustaría hablar  con ella un momento. No sé que me da por ver detrás de mi y justo ahí la encuentro.


—Hola, Tiana.

—Hola, Alik.

Realmente se veía linda con ese vestido blanco, hacía resaltar muy bien cada facción de ella. Parecía un ángel pero para que lo tengan bien claro, ella de un ángel no tenía nadita. En serio, nada.


—¿Cómo te va?—pregunto interesado.

—Bien, supongo ¿y a ti?

EN GUERRA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora