Nate POV
Vi la confusión en el rostro de Yeih, entonces expliqué:
—Cariño, no son policías. —suspiré, no sé como llegue al punto de tener que contarle esto a alguien—. Son investigadores, una organización secreta que está ayudándome a dar con ese hombre, llevan tiempo intentando encontrarlo ya que él cometió demasiados delitos, incontables.
»Se comunicaron conmigo al saber la relación que tenía mi padrastro, saben todo lo que yo sé y estamos en busca de más datos.
—Tenía razón entonces. —susurró, creo que pensó en voz alta ya que enseguida se llevó sus manos a su boca como "Oh lo dije" me miró de reojo y volvió a darse la vuelta.
—Uhm ¿Qué? —interrogué.
—Digamos que, sabía que eras un chico con mucho misterio por detrás y confirmarlo es, bueno; no sé ¿Es tonto decir que aun así quiero conocerte? —me miró frunciendo el ceño.
—No es tonto, es peligroso. —respondí con sinceridad.
—Lo tomo igual. —se encogió los hombros, me sorprende.
Sigue sorprendiéndome lo genial que es ella ¿La merezco? Luego de todo el pequeño inconveniente subimos los cuatro al auto, sí, conseguimos lo importante: las galletitas.
Amy estaba igual o más loca que Yeih, creo que el destino por primera vez jugó a favor de Ethan y de mi, pero fue en una mala ocasión.
¿Cuando sería buen momento? No lo sé ¿Habría alguno? Tampoco lo sé, pero soy conciente que estoy disfrutando del presente, bastante. Solo quisiera darle una cita normal, algo normal que no terminé conmigo o Ethan en el hospital, o una asociación secreta de investigadores en el super.
O con un chico pelirrojo intentando robarmela.
Si, tiendo a ser un poco rencoroso, lo sé.
—¿En qué estará pensando este caballero? —pregunta Yeih a Amy en voz alta, Ethan les siguió la corriente.
—Quizás en una muchacha, ¿No lo crees? —respondió su amiga, el mío asintió con la cabeza, voltee los ojos ante eso.
—Espero que sea en una es escritora, me daría celos si fuera otra. —puso sus brazos por la espalda del asiento de Ethan, como niña pequeña recostó su cabeza también.
—Pues este caballero vio a un vil duende rojo intentar llevar a su doncella, es injusto ¿No lo crees Ethan?
—Touché hermano, doncella ¿Algunas palabras para su defensa? —Amy le golpeó el hombro.
Yeih mostró sus manos moviendo sus dedos:
—Cuatro palabras en mi defensa.— pasó la mano frente a la cara de Ethan. —Aquí.no.hay.anillo —hizo énfasis en cada palabra, pretendía estar enojada pero sonreía al decirlo.
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La chica del café y el chico del cóctel. © #1
RomanceLa historia de Nate Brown un empresario millonario, solitario e introvertido con un pasado lleno de dolor y esfuerzo; Yeih Coffie una escritora dueña de una editorial valiente, extrovertida con un pasado lleno de perseverancia y optimismo. Él un am...