3.- Noche

215 26 0
                                    

Sabía que él estaría allí, SeungHyun llevaba solo tres días siguiendo la pista de aquel muchachito de olor dulce

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sabía que él estaría allí, SeungHyun llevaba solo tres días siguiendo la pista de aquel muchachito de olor dulce. Y habían sido ya muchas veces las que se había decidido a dejar de seguirlo, a olvidar aquella pequeña obsesión que le ocasionaba, lo pensaba siempre que lo veía perder el conocimiento a causa del alcohol o de alguna pelea, cuando lo veía coquetear con mujeres en tal mal estado como él mismo.

Pero, además de su extraño y tentador aroma, había algo más que le llamaba la atención: los rasgos tan finos del chico, esa apariencia andrógina tan distintiva y que al parecer también atraía la atención de los otros humanos.

Había recibido la invitación para el estreno de un nuevo bar en la ciudad,

«¡Cómo si no hubiera ya suficientes lugares así!» había pensado molesto mientras leía la dorada invitación, pero luego lo analizó mejor, era muy probable que su chico peliblanco aparecería por ahí, tan asiduo como era a las grandes fiestas.

Intentando no pensar en qué punto había comenzado a pensar en él como "su" humano peliblanco, salió de su hogar para dirigirse a la dirección indicada. Una vez llegar al bullicioso lugar entregó la invitación y se apresuró a la zona V.I.P., esperando no ser molestado en exceso mientras sus ojos agudos buscaban el mismo destello blanco de siempre.

La música era igual de bulliciosa que siempre, los humanos igual de libertinos y hasta obscenos, afortunadamente la zona en la que estaba era bien protegida, así que no tuvo que preocuparse más allá de los coqueteos descarados de la mesera que fácilmente podía ignorar.

Desde su posición alta podía observar la pista de baile, sus ojos divisaron el característico cabello de su presa al mismo tiempo que su olfato captaba el dulce aroma. Justo se adentraba en la masa de gente con un vaso en una mano y una chica tirando de la otra.

Ya se podía imaginar lo que ocurriría aun antes de que pasara, el humano golpearía a alguien "sin querer", quizá derramará su bebida sobre esa otra persona, comenzara la pelea y entonces los de seguridad del lugar lo sacarían seguido por aquel rebaño de otros humanos que no parecía despegársele, luego de lo cual se irían a otro bar igual.

La escena comenzó casi como había pensado, pero fue con una chica con la que chocó en primera instancia, manchando su blusa con el licor. La humana en lugar de molestarse se abrazó al peliblanco y le susurró algo al oído. De nuevo una imagen predecible, pronto el chico con el que ella había estado bailando antes armaría un alboroto.

Fue aquí donde todo se torció y las alarmas dentro de SeungHyun sonaron. El hombre con el que había estado bailando la chica se alejó de ellos para ir a buscar a otro que parecía ser de seguridad. Gracias a sus habilidades superiores SeungHyun pudo darse cuenta del dinero que pasaba de una mano a otra antes de que se separaran, aquello no presagiaba nada bueno.

Se puso de pie, dejando algunos billetes al lado de la copa casi llena, luego se dirigió hacia la salida. Justo cuando bajaba las escaleras de la alta zona V.I.P. se percató de los hombres que jalaban a su peliblanco y lo arrastraban hacia una de las salidas de emergencia.

Se contuvo de soltar una maldición sólo porque no era algo típico en él, así que en su lugar se dirigió con paso relativamente rápido hacia la misma puerta por la que había visto que salían. Aún debía aparentar ser un humano más, no podía utilizar su verdadera velocidad y eso era una molestia, pero debía apechugar con ello.

Le costó el doble de trabajo contenerse cuando ya se había acercado a la pequeña puerta de emergencia, pues el aroma dulce de la sangre de su chico volvió a asaltarlo. En cuanto logro salir la escena que vio no le gustó en lo más mínimo:

Al menos cinco hombres estaban golpeando a su joven peliblanco. Los muy cobardes, todos ellos eran más altos y musculosos que su víctima, no conforme con eso se aprovechaban de su superioridad numérica, mientras uno sujetaba al joven los otros le golpeaban.

Decidió intervenir cuando el filo de una navaja brilló en la mano de aquel que había aceptado el dinero y al parecer lideraba el ataque.

No pudo contenerse más, se movió sin limitación hasta sujetar la mano de aquel sujeto, estaba furibundo por la falta de honor de aquellos sujetos y quizá un poco también porque fuera justo a su dulce peliblanco al que atacaran. Sólo él debería poder permitir que aquella sangre prometedoramente dulce saliera de su bello cuerpo.

—¿Qué diablos...? ¿Quién eres tú?

Toda su bravura inicial desapareció al verse atrapado por aquellos ojos violeta que parecían traspasarle el alma, el terror invadió todo su ser y paralizó su cuerpo por completo.

—Ahora, se van a largar de aquí y van a olvidar lo que ha ocurrido. Donde digan una sola palabra los buscaré hasta matarlos a todos. —Su voz sonaba una octava más grave que la de un humano normal, ordenaba directamente en el alma de sus víctimas, los otros hombres que también se habían acercado a ayudar a su líder también se vieron atrapados por su poder—. Ah, y ese dinero sucio se lo darás a alguien más necesitado.

El hombretón asintió aun temeroso, su mano incluso había soltado la navaja plateada. En cuanto se vio libre de aquel demoníaco agarre salió corriendo del callejón seguido por sus compañeros.

Una vez solos, volteó de nuevo hacia su chico peliblanco. Este intentó envararse y ocultar su miedo, pero no pudo evitar retroceder cuando SeungHyun comenzó a acercarse a él como un cazador ante su presa. No lo culpaba, había pasado más de cuatro días desde que debía alimentarse, ahora era el momento, era el momento de que su peliblanco fuera realmente suyo.

*****

Nota de la autora: Son capítulos cortos así que subiré varios de una sola vez, aprovechando que la historia va avanzando con fluidez.

Espero que lo estén disfrutando

Adicción feérica (Gtop)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora