HOLAAA, amigos antes que nada, quiero avisar que el bonus luce como que es un bueeeeen, realmente es del largo de un capitulo normal, solo que esta vez me explaye en mi nota de autor y les deje un mensaje motivacional porque #barbaraderegil. Espero disfruten el bonus.
Alguna vez alguien en la vida me había preguntado como creía que se iba a acabar el mundo, es una pregunta que todos nos hemos cuestionado, yo respondí algo como "seguro todo va a explotar", creía que cuando decían que el mundo se iba a acabar era eso, simple silencio y una muerte silenciosa.
Nunca me dijeron el fin del mundo traería tanto ruido que las cosas jamás parecían volver a estar en paz.
Llevábamos semanas con noticias que parecían falsas, con muchas que eran verídicas, los gobiernos no se daban abasto y llegamos al punto donde todo estallo, donde hubo intervención del ejército, en menos de treinta segundos ya sabíamos lo que pasaba al otro lado del país, ya se veían por todos lados noticias y vídeos de "muertos" regresando a la vida, andando por ahí atacando a cualquier persona viva.
Y como era de esperarse los hospitales eran los que parecían estar en llamas, la situación se había salido de control, muchos cuerpos, casi apilados, permanecían en las afueras tapados en sabanas, al principio se buscaba que este virus estuviera retenido, pero llega un punto, el día de hoy, donde toda la presión se escapa y el pánico se siente por todos lados.
—Si papá, aún estoy en el hospital. — le respondí a mi padre mientras corría por uno de los pasillos del hospital, llevaba tres bolígrafos de epinefrina, los únicos que había encontrado en la estantería de la farmacia, todo lo que era medicamentos estaba agotado.
—¡Sal de ahí ahora mismo Lucy! — me grito mi padre de pronto.
Era lo que más anhelaba, quería salir corriendo del hospital, este lugar ya no era seguro y dentro de poco, todo iba a caer aún más.
—¡Aun no! — respondí gritando de igual forma, los helicópteros sobrevolando la zona no me dejaban escuchar mucho —Papá, seguro regresare a casa hoy, el ejército está llegando y no se ven amigables, probablemente nos saquen a patadas de aquí.— trastabille un poco al chocar contra Tanisha, la mujer de la cocina que recién había visto ayudar a diferentes doctores, últimamente cualquier persona que tuviera o no conocimientos en medicina era de mucha ayuda en el hospital, gire a ver a Tanisha, ella solo corrió hasta perderse por la puerta de las escalera. —Solo no te preocupes, regresare a casa, aún tengo que poner unas cosas en orden.
—Todos se han ido ya de ese hospital, van a empezar a evacuar las zonas más cercanas a la ciudad, por favor, Lucy, te lo ruego, sal de ahí ahora mismo.— escuche el temblor en la voz de mi papá, su preocupación, seguro estaba a punto de quebrarse ahí mismo, suspire mientras relajaba un poco el paso, correr por el hospital en busca de epinefrina mientras hablaba con mi papá añadiéndole mi mala condición física no era lo mejor que me había pasado.
—¿Has hablado con Evan? — interrogue cambiando de tema, ya no quería seguir discutiendo sobre en qué momento iba a salir del hospital.
—Si, pero no por mucho, dijo que lo estaban evacuando a un lugar más seguro.
—Diablos.... — murmure, eso significaba que las cosas en Alabama estaban peor que aquí, por fin llegue a la sala donde estaba Chris, era de los únicos doctores que a pesar de la situación, no habían tomado la primera oportunidad que tuvieron para irse —Papa me tengo que ir, regresare pronto a casa, las cosas se están poniendo peor de lo que dicen las noticias, pero si algo pasa no dudes en irte a un lugar seguro, tu tranquilo, te amo. — le dije y colgué, no deje que me contestara porque solo iba a provocar que me interrogara a mi misma si ya era el momento de irme —aunque yo sabía que si era el momento— guarde el celular en mi bolsillo y me volví a poner la mascarilla, traía guantes de látex nuevos y todo un traje de plástico azul que nos habían dado a todos los doctores, enfermeros y residentes del hospital.
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What we lost |Daryl Dixon|
FanficA Lucy le gustan los libros, los cuentos y poemas, tanto así que decidió escribir su propio final. ¿Todos tenemos lo que merecemos? A aquella chica de ojos verdes la esperanza le fue pisoteada, la piedad arrebatada y la libertad arrancada, por un ho...