33.-Dolor, orgullo y desazón.

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La ventisca de la mañana era bastante fría, los colores del amanecer iluminaban el cielo, los árboles lucían tan vivos que bailaban al son del viento, los portones rústicos de Hilltop estaban en frente, a unos varios metros.

Kevin y Neil caminaban al frente, Maggie iba atrás, Lucy en medio, caminaba a duras penas y medio arrastraba los pies, las manos le temblaban y no quería dejar de caminar solo quería seguir moviéndose hasta desfallecer, tenía los ojos secos e hinchados, la nariz rasposa y las mejillas sonrojadas.

A lo lejos, Jesús quien no había dormido en toda la noche observó al grupo, eran diminutas siluetas que al principio, por su andar, confundió con caminantes, pero conforme más se acercaban visualizo a su grupo, alarmó a los vigías y bajo las escalerillas de madera casi en un salto, Evan apareció trotando al escuchar que el grupo estaba afuera, entre ambos ayudaron a abrir los portones, Jesús troto un poco para reunirse con sus compañeros, Kevin Y Neil iban al frente, fueron los primeros en entrar, se veían cansados y apesumbrados, observó a Lucy quien parecía querer morir, Maggie venía atrás, observó a la castaña, ella solo negó con la cabeza, no vio por ningún lado a Evelyn, comenzó a alarmarse internamente, aun así mantuvo su compostura, Evan ayudaba a su hermana a andar.

—¿Todos están bien? — preguntó Jesús mientras entraban a Hilltop, algunos residentes, incluyendo a Enid se acercaron, Liz y Connor llegaron corriendo, miraron frenéticos a su alrededor, Gregory se encontraba al fondo con las manos en los bolsillos del pantalón, extrañamente, parecía preocupado.

—¿Qué pasó ayer? No regresaron, estábamos preocupados, todos. — hablo Enid mirando a Maggie.

—Lucy ¿Qué pasó, estas bien? — preguntó Evan pasando un brazo por los hombros de su hermana.

—¿Dónde está Evelyn? — preguntó Connor, Lucy no dijo nada, en cambio, miró a Maggie, la pecosa intentó hablar pero la voz no le salió, comenzó a toser en cambio, Liz la ayudó sobándole la espalda, Evan la sostuvo de la mano.

—Anoche... —comenzó diciendo Maggie —Evelyn y Lucy lograron distraer al puñado de caminantes en el auto, pero este se estanco entre el lodo, la tierra y algunos caminantes que por error habíamos atropellado... Evelyn ayudó a mover el coche, pero ella... A ella... Un caminante la logró morder.

Siguió hablando, dando un poco de detalles sobre cómo pidió que ellos se fueran a la cabaña a resguardarse pues al estar su destino sellado, tomó la iniciativa y dura decisión de partir sola, conducir la horda a un lugar donde no peligrara para las comunidades y no estuviera al alcance de personas como los Salvadores.

Evan al escuchar esto entendió la situación, pareció que su hermana iba a caer por lo cual la envolvió con sus brazos, casi impidiendo que escuchara las palabras de Maggie que parecían ser cuchillas directo a su corazón.

Jesús entre abrió los labios al escuchar la noticia, cerró los ojos deseando que, al volver a abrirlos, su amiga pelinegra estuviera ahí, diciendo que todo estaba bien, que, a pesar de todo, saldrían de esta, pero no sucedió, se sintió ofuscado y el corazón le latió con rapidez. Connor tuvo que colocar una mano en el brazo de Liz, pareció que le costaba respirar, su amiga rubia lo tomó del brazo y se abrazó a él, empapándole la camisa de lágrimas a Connor, este apenas y lloraba, parecía en shock, coloco su barbilla sobre la cabeza de Liz, el grupo de amigos estaba ahí, llorando y desconsolados, imaginando lo que pudo haber sido, pero el futuro se reía muy fluido.

***

A mediados de día los portones de Hilltop se habían vuelto a abrir, esta vez para recibir a un grupo de gente más alto, alrededor de dos docenas de personas residentes de Alexandria habían llegado pidiendo asilo, pues por lo que contaron, Negan apareció ahí mismo, la noche anterior afuera de sus puertas con cero ganas de negociar algo, simplemente llegó a destruir el lugar con su gente. Daryl había entrado primero con Judith en sus manos, Rick y Michonne ayudando a un moribundo Carl a caminar pues durante el ataque, había sufrido una herida de bala que, a palabras de ellos, de no ser por Siddiq el muchacho ahora mismo estaría muerto.

What we lost |Daryl Dixon|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora