On fire

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*NARRA _____*

Qué rico huele el maldito! Me quedaría abrazándolo toda la noche".

El solo ríe y me empuja suavemente hasta que mi espalda choca con la pared.

-Dime -le da un trago a su cerveza.

-Nada -lo miro a los ojos y los dos comenzamos a reír.

-Boba -roza su nariz con la mía.

Vuelve a tomar de su cerveza y deja la botella en el piso, contra la pared; luego pone las manos en mi cintura otra vez.
Yo hago lo mismo y dejo mi botella al lado de la de él; luego, rodeo su cuello con los brazos nuevamente.

Me besa la frente, la nariz, y queda a centímetros de mis labios. Ambos volvemos a reír. Me muerdo los labios mientras nuestras miradas van desde nuestros ojos hasta nuestros labios. Siento sus manos acariciar mi espalda mientras me presiona con más fuerza contra su cuerpo.

-Tri -río-, ¡me vas a espantar a los chicos!

-¡Ya deja de joder con eso! -ríe él, y me da un beso en el cuello.

-¡Ay, no, no empieces! -río resfregándome contra él, mientras el vuelve a besarme.

Volvemos a reír mientras disimuladamente lleva su mano a mi culo y yo le acaricio la espalda.

-Idiota -le susurro en el oído.

Lo muerdo y él se estremece un poco. Vuelve a besarme en el cuello mientras ambos rozamos nuestros cuerpos para poder sentir más al otro.

-¡Tri, me espantas a los chicos! -le beso el cuello yo a él.

"Mierda, esto me recuerda a la noche en que nos conocimos".

-¿Tantas ganas tienes? -ríe con su boca muy cerca de la mía

-Idiota. ¡Vos lo decís porque lo haces seguido! Yo hace bastante que no...-lo aparto un poco, riendo.

Él ríe y vuelve a acercar su rostro al mío.

-¡Te lo digo en serio! ¡Lejos, Carlos! -río.

-Ya no me jodas con eso -me mira a los ojos, serio, con su cuerpo todavía pegado al mío-. Yo puedo ayudarte -me susurra al oído.

-¿Ah, sí? -me muerdo el labio mientras mis manos se pierden en su pelo.

-Sí -jadea- Vamos a casa... me están entrando unas ganas locas -respira agitado.

Disimuladamente, rozo su entrepierna con mi rodilla mientras respiro en su cuello. Y sí, puedo notar en sus pantalones esas "ganas locas".

-¿Vamos? -pregunta mordiéndose el labio, con la mirada puesta en mi boca.

-Tri... -murmuro mordiéndome el labio, con la mirada puesta en su boca.

-Solo tienes que pedírmelo, y lo sabes -agrega.

Baja su mano por mi pierna lentamente y toma su botella del piso.

"Mierda", dejo escapar un suspiro.

Sonríe con algo de maldad por haber hecho eso y luego le da un trago a su cerveza.

-¿Quieres? -pregunta y roza el pico de la botella suavemente contra mis labios.

Inclina un poco la botella para que yo beba, y luego de que termino, la retira y pasa su pulgar lentamente por mi labio inferior para secarlo. Después de hacer eso, se lleva el dedo a su boca y lo chupa. Vuelve a tomarme fuerte de la cintura y a presionarme contra él.

-Tri... -me muerdo el labio mientras disimuladamente, vuelvo a rozar su entrepierna con la rodilla.

-Pídemelo -murmura mirándome a los ojos fijamente, jadeando.

-Tri... -me tiembla la voz.

-Me estás matando -me susurra en oído.

-Tri... -me tiembla todo el cuerpo.

-¿Notas lo que me provocas? -vuelve a susurrarme, presionándome contra su cuerpo, haciendo que lo sienta todo.

-Tri... -llevo mi mano a la cintura de sus pantalones.

-Vamos, dilo...

-Tri...

-Vamos, mi amor -acerca más su boca a la mía.

-Tri... -siento que me hierve la sangre.

-Pídemelo -sus labios están a un par centímetros de los míos.

-Vam...

-¡TRILINE! -me interrumpen unos gritos de un grupito de cuatro chicas.

Inmediatamente nos separamos.
Tri se gira y sonríe con pocas ganas, y se acerca a saludar.

"Maldición".

Suspiro y me agacho a tomar mi botella del suelo. Le doy un trago, apoyo la espalda contra la pared y cierro los ojos un instante.

"Mierda, no puede ser...", suspiro.

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