FLASHBACK: Promesas

20 3 4
                                    

*NARRA ____*

Me despierto al mediodía, completamente sola.
Me incorporo de golpe y echo un vistazo a la habitación. Está vacía.

-¡Carlos! -llamo.

Silencio.

-¡Tri!

Nada.

-¿Lo habré soñado? -me siento en la cama y siento que me da vueltas la cabeza.

Tomo mi teléfono de la mesita y veo que tengo llamadas perdidas y mensajes de un número desconocido; debe ser el imbecil de mi ex. Y además, veo la hora.

¡Maldita sea, la hora! Tengo que estar en el aeropuerto en un rato y todavía no terminé de armar mi valija.

-¡¡¡MIERRRDAAAA!!!

Rovoleo un par de cosas dentro de mi maleta y ordeno la habitación lo más rápido, pero calmadamente posible.

-Bien, tranquila -llevo mis cosas a la sala, en donde sigo ordenando un poco más.

Luego, voy a la cocina, a buscar algo para comer. Cuando entro, veo dos vasos en el fregadero.

-Ok, no fue un sueño -digo en voz alta y sonrío.

Sin embargo mi sonrisa no dura mucho.
Me desperté sola. No sé su apellido, no sé en dónde vive, no tengo su dirección, ni su número. No se nada de él. De todas formas, ¿qué me importa? En unas horas voy a estar a miles de kilómetros de distancia.
Pero, mierda, ¡de verdad me gustaba!

Voy al baño a buscar mis cosas y encuentro colgados y ya secos los bóxers de mi amante fallido.

-Ok, por lo menos me queda un recuerdo -río con un dejo de tristeza.

Luego de ordenar un poco más, y de guardar los bóxers con mis cosas, voy al sofá a comer lo que me había preparado y me dispongo a leer los mensajes del pelotudo. Pero me llevé una grata sorpresa al ver que no era el idiota, si no...

-¡Carlos! -exclamo sonriendo.

"Buen día, princesa. No quería irme así, pero mi hermano me llamó borracho temprano en la mañana y tuve que ir a buscarlo, y para eso, pasar por mi coche que dejé abandonado en el bar".

"No quise despertarte, aunque ahora que lo pienso, me arrepiento muchísimo de no haberlo hecho. No quería irme y no verte nunca más, así que me tomé el atrevimiento de usar tu teléfono para llamar al mío y quedarme con tu número. No voy a disculparme, no lo lamento".

Suelto una risa de alegría y de alivio.

"Realmente siento haberme ido así. Me gustas mucho".

"¿Nos vemos un ratito más tarde?"

Sumadas a los mensajes, un par de llamadas perdidas.

Suspiro con una mezcla de alivio y nervios. ¿Lo llamo? ¿Le escribo? La hora no juega a mi favor.

Luego de meditarlo dos segundos y de vencer los nervios, decido llamarlo, aunque sé que no va a servir de mucho; tengo que irme en media hora.

-Creí que no ibas a llamarme nunca -oigo su vos del otro lado.

-No vas a deshacerte de mí así de fácil -río.

-Así me gusta -ríe

-Además, me debés un par de cosas -agrego con voz algo provocativa.

-Lo sé. Y tú tienes que devolverme mis calzoncillos...

-En otro momento será. Ya los guardé y lo pienso deshacer mi valija por eso.

US Donde viven las historias. Descúbrelo ahora