Las células de Hashirama

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Shikamaru iba de camino a su trabajo, disimulando la flojera que le daba levantarse temprano, saludó a todo el mundo al llegar y siguió rumbo a su oficina.

--Shikamaru-san.-- Llamó Kuri, la recepcionista.

--Ha llegado esta carta para usted.-- Extendió el sobre hacia él.

El pelinegro tomó la carta. --Gracias.-- Después de una reverencia siguió con su camino.

Cerró la puerta de la oficina con seguro y aún de pie se dispuso a leer la carta.

Shikamaru.

Tu carta ha sido lo mejor de mi día hoy, decidí empezar con todo el trabajo atrasado que hay aquí, pero parece infinito, no quiero imaginarme lo atareado que debes estar tú con el trabajo y el clan al mismo tiempo, ¿Por cierto cómo va eso? ¿Los viejos de tu clan han cedido? Y dime ¿qué es eso de que tu madre sospecha de nosotros? ¡Qué pena! Al menos tenemos la carta de tu holgazanería a nuestro favor.

También te extraño, Shika, imagino cómo es para ti expresarte por escrito, pero a mi me pasa al revés, para mi es más sencillo confesarte cuanto extraño esa iniciativa tuya, cada movimiento que hacías para estar más juntos y los besos que me robaste, creo que no me sería fácil admitirlo frente a ti, todo lo que me provocas, pero aquí estoy, contándolo en un pedazo de papel a 3 días de distancia de ti, me causa gracia lo diferentes que somos, pero no imagino a alguien mejor para compartir este secreto.

Otra cosa, cambia el destinatario de las cartas, las próximas envíalas a la dirección que añadiré al final de la carta, ya que este correo muchas veces pasa directo por las manos de mis hermanos y definitivamente no estoy lista para esa conversación. Te quiero.

--Temari. x

"Con qué te confiesas a kilómetros de distancia, Tema" Pensó él. "Tengo que admitir que es una decisión inteligente, si te tuviera aquí en este momento..." Sintió cómo su cuerpo reaccionaba a sus pensamientos y definitivamente el trabajo no era un buen lugar para esos problemas fisiológicos, así que respiró profundo. "Piensa en Choji comiendo BQQ" Se dijo. "O en Naruto escurriendo ramen por la nariz, lo que sea pero no en Temari."

Le costó trabajo pero al final pudo retomar sus deberes sin esos pensamientos.

Y estaba agradecido por ello, ya que había demasiado por hacer, se recargó en el respaldo de su silla y notó la hora en el reloj de la pared.

--¡Demonios!-- Empezó a recoger unos papeles del escritorio y se dirigió a la salida, no había notado cuántas horas pasó trabajando y ya iba tarde a una reunión en el laboratorio.

--Disculpen la demora, ya estoy aquí.-- Entró apresurado colocándose una bata blanca, como marcaba el reglamento.

--¡Shikamaru-kun!-- La rubia de inmediato se ruborizó.-- No te preocupes, llegas justo a tiempo, además el Doctor salió, solo estoy yo.-- Hizo un ademán con las manos indicándole que se sentara en una de las sillas frente al microscopio.

Él obedeció.-- ¿Han encontrado algo?-- Preguntó interesado.

--Aquí.-- Ella tomó una de las muestras y la colocó en el microscopio invitandolo a mirar.

Mientras Shikamaru veía la muestra ella se miraba en el reflejo de la ventana tratando de peinar su descuidado cabello.

--Increíble.-- Susurró él. Luego giró para ver a la chica.-- ¡Las encontraste, Shiho! Esto será maravilloso para Konoha.-- Nara sonreía encantado por lo que había visto. --Esto merece un festejo.-- Sugirió.

--¿Tú crees?-- Los ojos de ella se iluminaron y su corazón se aceleró.

--Claro, yo le aviso a Lady Tsunade y tú al Doctor Kumuri, nos vemos a las 8:30 en ese lugar que le gusta al Doctor, ¿Sabes cual?--

La emoción de la chica se desvaneció al descubrir que no sería un plan de dos.-- Sí, sé cuál es.-- Cruzó los brazos con un tono más indiferente.

--Perfecto.-- Nara tomó los documentos que había dejado al lado del microscopio. -- Ahora justo tengo que ir a ver a Lady Tsunade para entregarle esto, nos vemos al rato.-- Sin mirar atrás alzó su mano en señal de despedida y desapareció por la puerta. Shiho se sentó en el lugar que antes había ocupado Shikamaru y suspiró derrotada.

El festejo de esa noche estaba transcurriendo bajo lo esperado y eso incluía lo desinhibida que estaba Tsunade por todo lo que había tomado, para suerte de todos Shizune estaba ahí para controlarla.

--Definitivamente estamos haciendo historia, brindo por eso.-- Alzó su bebida el Doctor Kamuri.--

--¡Brindemos!-- Gritó Tsunade y el brindis se concretó.

--Pero Doctor, ¿Cree que podamos controlar la evolución de las células de Hashirama?--

--No será fácil, Shikamaru, pero teniendo la ayuda de todos los presentes desde luego que lograremos el objetivo.--

--Además ya encontramos todos los archivos que Danzo recolectó por tanto tiempo, eso nos dará ventaja.-- Añadió Shiho colocando su mano en el hombro de Shikamaru y este solo le dedicó una sonrisa incómoda.

--¿Todavía dudas del proyecto, pequeño Nara?-- Retó Tsunade.-- Te doy mi palabra de que las células de mi abuelo sanarán a todos los heridos de la guerra, ¿Quieres apostar?--

Shikamaru se cohibió por la agresividad con la que hablaba la Quinta Hokage, mientras Shizune intentaba convencerla de no gritar.

"Mendokuse, ¿por qué siempre me toca convivir con mujeres agresivas? Lo peor es que me recuerdan a la problemática y me hace más difícil no extrañarla."

El evento terminó pronto para el pelinegro y en general para todos, aunque Tsunade y Shiho querían continuar la velada en un bar cercano, el joven rechazó la invitación para regresar temprano a casa.

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