Sorrows and Deceptions

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Con apatía y casi a regañadientes se obligó a si mismo de dejar su calientita cama y seguir un camino doloroso y cruel hacia la ducha, con miles de preguntas y pensamientos en mente se bañó, al menos el creía que el baño era el mejor lugar para pensar.

Como lo pidió se cumplió, el ayudante de su jefe le mando su plan de viaje, en realidad no lo necesitaba solo lo hizo para molestar al pobre joven; Manejó alrededor de tres horas hasta llegar a la residencia de la familia Park y como le había anticipado el viejo, la señora Park estaba en la entrada de la casa con expresión angustiada y haciendo ademanes con las manos mostrando claramente signos de preocupación mientras su pobre esposo la tomaba en brazos, estaciono el auto al lado del jardín y entre la fuente de querubín, ¿era dramático? Si, sonrió al imaginar que él era el diablo en persona e iba a resolver los problemas que el hijo había causado.

-"¿Tenia novia o amigos?"-. Pregunto con un porte autoritario mientras los padres lloriqueaban sumamente preocupados.

-"No, nuestro Jimin no tenía amigos tampoco novia"-. Dijo la madre con un tono cortado y limpiando sus lágrimas con un paño de papel que se veía sumamente mojado. El pelinegro aun no podía creerles.

-"¿Me dejarían entrar a su habitación?"-. Pregunto mientras se erguía.

-"Claro, por supuesto, pase por aquí agente..."-. Dijo el señor Park mientras le tenía la mano y la direccionaba hacia el segundo piso percatándose de que en realidad no sabía el nombre de la persona frente suyo.

-"Min, pero dejemos las formalidad fuera, puede decirme Yoongi"-. Dijo el pelinegro con tono serio mientras avanzaba hacia la habitación.

-"Agente Min –dijo la madre desviando su atención- encuentre a mi niño por favor"-. Suplicó mientras limpiaba su nariz.

-"Lo hare señora, siempre y cuando ustedes aporten la información que requiero"-. Exclamo Min mientras dirigía su atención a su acción anterior dejando a la señora Park atónita ante su comentario.

El pelinegro antes de entrar a la habitación reviso la puerta con un vistazo discreto hacia el marco y el pomo notando leves rasguños en la parte inferior y sin más entro a la recamara encontrándola sumamente limpia, muy muy limpia y con un aroma a pinos sumamente agradable, miro alrededor de la habitación antes de dar el siguiente paso y se percató de que en lugar había pequeño balcón y fuera de este había un arenal.

-"Señora Min –dijo encontrando su mirada y al momento miro hacia otro lado evitándosela- su hijo ¿Tiene gato?"-.

-"S-sí, mi niño tenía un gato blanco, "el señor Mostaza""-. Dijo la señora tranquilizando su llanto debido a la mirada del pálido que comenzaba a exasperarse.

-"¿Tenia?"-.

-"Tiene, lo tiene desde que tiene dieciséis"-. Afirmó el padre.

-"Bien entonces ¿En dónde está?"-. Pregunto el pálido quien se le hacía gracioso que los padres no se percatasen de la ausencia del minino. El señor y la señora Park se miraron confundidos, buscaban el gato con la mirada y al mismo tiempo se veían con duda.

-"¿Qué tiene de relevante el gato?"-. Pregunto ofendido el señor Park quien empezó a creer que el joven agente era sarcástico, irónico y poco profesional.

-"Si el gato huyo al mismo tiempo que su hijo desapareciera significa que la huida la tenía planeada al llevarse a su único amigo –comentó mientras los padres se sorprendían- y si el gato desapareció en los últimos días es porque necesitaba alimento"-.

-"No nos habíamos percato de la ausencia del gato, ni tampoco la policía local"-. Dijo la madre mientras empezaba a pensar sobre el tema.

-"Claro, nadie que haya encontrado ya a su hijo se habría dado cuenta de los pequeños detalles"-. Exclamó mientras revisaba la habitación en busca de alguna pista.

-"¿Su hijo tenía teléfono celular, tableta o laptop?"-. Pregunto mientras buscaba debajo de la cama.

-"Si, si agente tome"-. Exclamo la señora dándole un IPad.

-"¿Nada más tenia esto?"-.

-"No, tenía también laptop y teléfono pero ahora no sé en dónde está"-. Su respuesta le hizo soltar más preguntas que empezaba a ordenar en su mente. Tomo el IPad y la observo con cuidado.

-"Bien, disculpe ¿Su hijo siempre fue así de ordenado y limpio?"-.

-"Si, eso creo, no lo sé"-. Dijo confundida y Yoongi se pudo dar cuenta que no tenían ni la remota idea de quien era su hijo y si no sabían de su comportamiento cotidiano menos sabrían sobre sus amistades.

-"Esta bien, señores Park les voy a pedir que me dejen unos momentos más en la habitación"-. Pidió mientras invitaba a salir a los familiares para posteriormente cerrar la puerta con seguro. Min Yoongi no era tonto, sino todo lo contrario, a su parecer los señores Park se contradecían en muchos aspectos o solamente tal vez estaban nerviosos.

Reviso una vez más la habitación en busca de lo que fuere, una fotografía, un diario, una carta, algo; Su inquietud lo llevo hacia la cama, debajo no había nada, medito un momento más y su raciocinio lo llevo a pensar como un adolescente que buscaba esconder algo.

-"Maldita sea"-. Se dijo mientras al buscar debajo del colchón encontró fotos manipuladas, cortadas y pintadas en donde estaba el con otro chico, su cabello era negro, tenía labios abultados, cejas perfectas y dientes blancos, tenía una preciosa sonrisa y que al lado de Jimin parecían ángeles, pero extrañamente la fotografía estaba cortada justo a la mitad en donde los cuerpos se unían en un abrazo, siguió buscando hasta horrorizarse, notas de odio pintadas de color rojo estaban por doquier hechas trizas, fotos seguidas del chico de labios abultados arrugadas y otras borrosas como si gotas de agua hubiesen caído por ellas, también habían notas repetidas en donde pedía clemencia y perdón –"Todo esto es muy extraño" se dijo- tomo el colchón y arrastras lo quito, en la cabecera lejos de las demás fotos y notas había una gran foto de un chico moreno de cabello castaño, tenía una sonrisa enorme y parecía que la foto había sido tomada a escondidas.

Saco una cámara réflex de su maletín y documento todo lo encontrado en la habitación, tomo algunas fotos de los chicos que se encontraban bajo el colchón y las metió en su maletín como pruebas, metió el iPad de igual manera y volvió a colocar la colcha, no confiaba en los padres y con ese pensamiento en mente salió de la habitación.

Deseo Para Un Corazón RotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora