XV

24 3 0
                                    

Verónica se levantó de la cama con un poco de dolor de cabeza que fue ignorado debido a la llegada de su amiga Angélica, se preparó y bajo lo más rápido que pudo para recibirla, al abrir la puerta sus ojos se abrieron de par en par al notar que no estaba sola, su asombro era tal que quedó pasmada, definitivamente no esperaba esta sorpresa, pero nada la hacía más feliz que ver a sus florecitas en su puerta.

-¡Esther, estás aquí también! - dijo sonriendo. - No me esperaba esta grata sorpresa, de verdad me hace bien verlas, mi felicidad no cabe en mi. - dijo abrazando a sus amigas.
-¡Claro! ¿Creías que dejaría que solo Angélica te viera? Pues no, así no funcionan las cosas. - dijo sin dejar de abrazar a Verónica. - Además sin mi no sería divertido.
-Pero que modesta es usted señorita. - dijo Angélica, en tono de burla. - pero quizás tengas razón, la mejor parte es que no, nos quedaremos sin comer de tus postres.
-Jajaja, al menos podré deleitar mi paladar con esos postres. - dijo Verónica. - Esther, te amo pero tus postres son los mejores y de verdad los quiero.
-Cuando no tu pensando en postres, jajaj, a veces creo que te casare con uno de ellos. - dijo Esther sonriendo. - aunque no creo que a mi amigo Richard, le agrade la idea ¿tu que piensas?.
-Verónica se sonrojo, no paraba de reír, sus amigas si que sabían como levantarle el ánimo y sus ocurrencias bueno, son interesantes, aunque... Quizás tengan razón. - No digan cosas que no son, Richard, es solo mi amigo. Ok, mi amigo. - dijo Verónica.
-Si, lo sabemos, así como Scott es amigo de Esther, y Jacob el mio. - dijo Angélica.
-¿De qué me perdí? ¿Acaso esos dos ya dieron pasión de valentía?. - preguntó Verónica.
-En cierto modo si. - dijo Esther. - Verás, Scott se me declaró camino al aeropuerto, luego se lo dejo saber a Angélica, y terminaron pues, siendo cómplices.
-Jajaj, Admite que te gusta. - dijo Esther. - Al menos el luchará por ti, y te lo hizo saber Esther, te dará tu tiempo pero sin alejarse demasiado, realmente te quiere.
-Se que es así, no se dará por vencido lo sé, y eso me hace sentir especial, pero... ¿Que tal si se cansa en el camino?. Y si, no lo puedo negar, todo de él me agrada, me trata realmente bien, me hace sentir especial, querida, valorada, es bastante conversador, me encanta el modo en el que rompe con los silencios incómodos, durante estos meses compartimos mucho, salimos, leímos, buscamos de papá y eso, definitivamente me encanta.-dijo Esther.
-Querida amiga, te perdimos, he de admitir que estas enamorada, y eso me llena de completa alegría, y lo mejor de todo es que el me agrada y eso ya es bastante terreno ganado para el. - dijo Verónica. - Y bueno, el que hagan cosas juntos es grandioso, eso quiere decir que su lazo de confianza está creciendo y afirmando, Dios sabe lo que hace.
-Creo que las tres fuimos capturadas por dichos caballeros amigas mías. Se que Richard es callado, y poco expresivo, pero se nota a leguas que le importas vero, desde el día que te conoció, su mirada. Se ilumino al verte, y pues Scott, muere por Esther. - dijo Angélica. - Yo no negare que me importa Jacob, pero no existe una posibilidad en esta ocasión, el no demuestra nada, y si, salimos, nos reímos, compartimos y todo fue excelente, pero no creo importarle de ese modo, o eso es lo que ha demostrado.
-No te apresures Angélica, quizás este nervioso, ambos son tímidos y pues creo que él más que tu, pero no debes desanimarte. - dijo Esther. - Por mi parte veré hasta donde es capaz de aguantar Scott.
-Esther, tiene razón Angélica, espera un poco, quizás le cueste demostrar lo que siente. - dijo Verónica. - Eres cruel Esther, jajaja, lo torturaras.
-No lo torturó, solo me seguro de no ilusionarme en vano. - ¿Tu que harás con Richard?.
-Tienen razón, aunque la verdad no quiero creer que hay una posibilidad y luego todo se venga a bajo. - dijo angélica. - Sabemos que Jacob, abrió su corazón a Esther, pero Richard, ¿abrió el suyo contigo?.
-Tranquila todo estará bien ya veras, he... Si, si me dijo lo que siente, aunque la verdad creo que me impresionó tanto que pude rechazarlo. - dijo Verónica.
-¿Qué le dijiste vero?. - Preguntó Esther.
-Qué.. Por favor no lo volviera a decir, es muy pronto y no lo conozco bien, no he salido mucho con el, a diferencia de ustedes con Jacob y Scott. - dijo Verónica. - luego me arrepentí pero no dije nada, el simplemte se puso serio y por esa causa me vine, ya era demasiado incomodo.
-Ay Vero, creo que lo heriste sin darle si quiera la oportunidad de intentarlo. - dijo Angélica. - pero tranquila, si de verdad le importas lo seguirá intentando. ¿El te importa a ti?.
-Si, la verdad es que... Me importa más de lo que creí. - dijo Verónica.
-Solo esperemos, las tres estamos sintiendo cosas por ellos, y no por eso vamos a apresurar todo. - dijo Esther. - el tiempo dirá lo que deba decir, y Dios hará lo correcto.
-Tienes razón Esther. - dijo Angélica.
-Que sabía, por esa razón me gusta hablar con ustedes, son las mejores. - dijo Esther.

Amigas Inseparables. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora