Capítulo Final

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El tiempo transcurría como el viento asotado en las ventanas, se escuchaba y sentía más no dejaba de sorprenderlos. El gozo en sus corazones se volvió canción, las melodías surgían de cada sonrisa, el amor brotaba del corazón, nunca antes podrían haber soñado con una vida tan maravillosa porque solo Dios hace nuestra vida preciosa. 

Al volver a casa, Esther y Verónica acompañaron a Angélica al médico ya que un día antes de volver de Venecia comenzó a sentirse mal, se sentían un poco preocupadas pero aún así terminaron de disfrutar de su viaje, al ser revisada por el médico el cual le práctico algunos exámenes, esperaron unos minutos para la lectura de los resultados, las chicas se sentían nerviosas, no sabían que ocurría y eso las ponía en un estado agridulce, donde no sabían si preocuparse o simplemente desechar las ideas negativas. 

Richard y Scott, intentaban calmar a Jacob, quien caminaba de un lugar a otro, se sentía nervioso, no entendía el porque el estaba fuera del consultorio, o bueno si que sabía porque, su preocupación era tanta que ponía nerviosa a Angélica, y por esa razón Verónica lo obligó a permanecer fuera mientras ellas entraban al consultorio. 

-¿Doctor que sucede?. - preguntó Angélica al notar que el médico la observava, no sabía diferenciar su mirada, se podría decir que estaba preocupado o ansioso por dar la noticia, sea cual sea la razón impacientaba a las chicas. 
-Sr. Angélica, me complace informarle que esta usted embarazada. - respondió al fin el médico. 
-¡Seremos tias!. - gritó entusiasmada Verónica. 
-Que maravilla, al fin podré ser la tía consentidora. - dijo Esther sonriendo. 
-Felicidades chicas, llegó el momento de perder un poco la paciencia, de juguetear, llegarán las noches de insomnio, pero al fin seré madre, al fin serán tías. - dijo Angélica saliendo de su asombro. 

Al salir del consultorio se toparon con los chicos, fueron a la cafetería y fue entonces cuando Angélica le dio la gran noticia a Jacob, quien comenzó a dar brincos de la emoción gritando a todo pulmón que sería papá, aun no terminaban de creerlo, pero Dios los estaba bendiciendo enormemente. 

Los meses transcurrieron con ansiedades, antojos, quejas, y llenos de alegría, el día tan esperado había llegado, por fin hoy angélica tendría en sus brazos a su hija a la pequeña Aurora, quien llegó a revolucionar su mundo, sus días, sus horas, llenando de felicidad cada segundo de sus vidas. 

Esther y Verónica, la consentian, y malcriaban cómo todo buena tía, y Aurora, se sentía feliz, sus primeros pasos y palabras fueron toda una oleada de energía y felicidad. 

Cinco años después, las chicas decidieron viajar a la playa con Aurora. Esther le enseñaba palabras en inglés, mientras Verónica la enseñaba a nadar, ese día fue único y especial, compartieron juntas y en familia. 

-Dicen que los días se vuelven importantes cuando somos nosotros quienes los hacemos importantes, la amistad transciende fronteras y se instala en el corazón, la amistad no viaja en palabras, viaja en el tiempo fijándose en el corazón de las personas a las que damos la potestad de conocernos y de vivir una relación especial llena de hermandad y de amor, gracias por cada momento, por cada abrazo, por cada palabra, por cada cuidado, gracias doy al padre por regalarme una porción de ustedes y poder compartir del cariño y amor que el derrama en nosotros cada día. - dijo Angélica. 
-Lo verdaderamente hermoso de una amistad es ver como a pesar de las distancias la confianza y el amor sigue intacto, y como dice la palabra en Proverbios 17:17 "Un amigo es siempre afectuoso, y en tiempos de angustia es como un hermano." y es que ustedes son mi regalo del cielo, mis florecitas plantadas en tierra firme, mis solecitos de felicidad. - dijo Esther. 
-No existe nada nada en el mundo mejor que el amor, y es que el ser humano es hecho de amor, formado en amor, corregido en amor, somos el amor que enmana del corazón del Padre, el faro que alumbra la más intensa oscuridad. Y es que el amor es gratuito y solo los verdaderos amigos son los que transcienden fronteras, por muy peligrosas que sean, por muy difíciles que estén las cosas, con ayuda del amor recóndito de Dios todo lo podemos. - dijo Verónica abrazandose a sus amigas.
-Hoy agradezco a Abba por traerlas a mi vida, por llenarnos de amor. - dijo Esther. 
-Somos una obra de arte en manos del mayor escultor, en manos de papá. - dijo Verónica. 
-somos una familia, un equipó, el padre nos unió con un propósito, nos hizo Amigas Inseparables. 

Fin.

Gracias por el apoyo brindado durante estos meses, gracias por seguir la historia de principio a fin. Bendiciones ❤️

Nos vemos pronto ❤️ aun seguimos sumergidos en "El recuerdo del Duque" y pronto se viene un nuevo proyecto.

Amigas Inseparables. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora