Cosmos: El chico de las estrellas

Las constelaciones se acaban

Han pasado 700 noches desde que Julieta duerme al lado de Armond, un chico sumamente obsesivo que seguro hoy mísmo le preguntará "¿Recuerdas que festejamos hoy, cierto?.

Ella tiene que apuntar en sus pases de biblioteca cosas que sabe conmemorarán próximamente, si, serán horribles recordatorios que quitarán dolores de cabeza innecesarios... primer beso, primer toqueteo, primera vez que le regaló chocolates, primera vez en una sala de cine, primer peluche que le regaló, primer te amo, PRIMER TODO!!! Esta chica no es lo que el necesita, no es detallista, pero la amarra como si no hubiese un mañana porque es muy fácil de manipular. 

Un día cuando las hojas sin sentido caían el le hizo la provocadora propuesta de irse a vivir juntos, no dudó en aceptar, pues sabía que de lo contrario tendría que comprar más maquillaje o algo por lo común. 

Hace algunos diminutos días su mejor insoportable amiga no vino a verle y pensó que lo mejor sería hacerse una prueba, menos difícil a las del colegio... pero más arriesgada que cualquier cosa en la vida. 

Que triste es pensar cuántos desvelos vivió Julieta por el "amor de su vida" aquel que la engañó 27 veces y golpeó en ocasiones mas infinitas que sus ganas de cantar mientra llora, que idiota es pensar en como se ilusionó cuando apenas tiene la mayoría de edad, per aún más triste es que ésta noche el hada de su vientre dejará de iluminar. 

Hoy es un 21 de septiembre, hoy no es el día...