Una chica de profesión artística en pintura está regreso a su pueblo donde vivió de niña, en vista a su abuelita. Después de ayudar en la casa sale a la cancha con césped del pequeño pueblo, estaba dibujado a unos niños entonces uno de ellos le dice...
Mi padre fue un agrícola japonés y mi madre una coreana del sur, se conocieron en Seúl-Corea del sur, y decidieron vivir justos en el pueblo donde había nacido y crecido mi madre "Trinidad".
Debido a que su ambos se conocieron en primavera mi padre decido llamarme Haru que significa en Japonés "primavera, flor de la esperanza".
Después de su matrimonio creyeron que sería mejor crecer en la ciudad para darme más oportunidades a mi y adaptarme a esa vida, así que a los 5 años me mudé a la ciudad donde crecí hasta los 19 años.
Hoy me dirijo en tren a la casa de mis abuelos y tíos, el campo me hará bien, mis padres no pudieron venir por el trabajo y porque habían venido ya antes así que por eso me vine sola.
Solo estudié en un instituto dibujos y pintura, teniendo esa carrera me ha sido difícil buscar trabajo pero después de mucho lo encontré, hago muestras en cuadros y se los doy al encargado quien paga muy bien y otra persona ya lo hace en un edificio o en lo que sea requerido, lo bueno esque no soy solo yo sino un equipo de jóvenes casi de la misma edad.
-- Seguro que estás casada... deberías de ir a dormir...
Al llegar al pequeño pueblo, fui a la casa de mi abuela donde la anciana me recibió con un abrazo, me quedé en la habitación de mis padres, después de comer el almuerzo salí de la casa, con mi cuaderno de dibujo de tamaño 60x40 , hacia la pequeña cancha que había al frente de la casa donde habían unos niños y también mis sobrinos y primos.
Me senté sobre el césped frente a ellos mientras corrían entre risas, con una sonrisa empezaba a retratar a un niño que jugaba, se veía feliz por eso lo hice en cuestión de minutos.
-- Prima... ¿enserio te pagan por dibujar?
Mi primo de 7 años se detuvo a mi lado para hacer su pregunta, reí por lo inocente que era, sus amigos también se detuvieron para ver.
-- Si, quisiera dibujar más, el pueblo quizá, lo necesario para mi trabajo y mejorar...
Comente con una sonrisa al grupo de niños y niñas que miraban y contemplaban el dibuja ya acabado.
-- ¿Por qué lo subes a la colina? No es muy alta puedes dibujar el pueblo... quisiera ver el pueblo en un dibujo...
Sugerido por una niña pequeña de 10 años con trenzas largas sonreí y me puse de pie con mi cuaderno de dibujos y el lápiz.
-- no es mala idea... tengo tiempo apenas son las 2 de la tarde... no se ve lejos...
Los niños se miraron unos a otros, desórdene el cabello de mi sobrino pequeño empezando a caminar.
-- espera... si vas debe tener cuidado...
-- Si lo vez no grites y no corras, si lo llegas a asustar o descotrolar podría matarte...
-- Es su casa , las montañas le pertenecen... ya hemos ido antes así que ya nos acostumbramos a él.
Sus advertencias hicieron que me detuviera para ver las colinas, no pesaba ir tan lejos, los mire y me reí eran pequeños en ¿verdad querían asustarme?
Empecé a caminar hacia la colina cercana, crucé primero un puente de madera por el cual abajo había un pequeño río, la colina no era muy alta así que segura empecé a caminar.
Después de varios minutos llegué a una parte alta lo suficiente donde podía ver el pueblo, me senté, puse una blanca en mi cuaderno, empecé a retratar con detalle a todo lo que veía, decidí hacerlo despacio así no volvería y ya lo tendría terminado.
Debido a que el cielo del campo siempre era nublado miraba mi reloj para saber el tiempo, ya eran 5:21 pm, en este tiempo ya había dando los últimos detalles al dibujo, pero aún así sentía que algo faltaba así que seguí.
De pronto empecé a escuchar crujidos en las hojas secas y ramas, me detuve pero no gire a ver, pensé que a lo mejor era un animal o algo pequeño pero de alguna manera me sentia con temor, por lo cual disimulando recogi mi cuaderno y lápiz en mis manos empecé a bajar la colina con pasos acelerados aún así sentía que me seguían, ya no pude y empecé a correr sin soltar el libro de dibujos por tonta gire a ver atrás dando así un paso mal haciendo que ruede en las hojas cercas.
Al no ver a nadie a mi al rededor empecé a calmarme, seguro todo estaba en mi mente, mire el piso en ellos mis dibujos desparramados.
-- esos niños lograron asustarme... que tonta --murmure.
Empece a recoger los dibujos protestando, en una de esas tome uno entonces vi en el mismo momento que lo tomo otra mano, lentamente levanté mi mirada hacia esa persona viendo a un chico, no vi bien su rostro porque veía atraído al dibujo.
-- Me lo puedes dar... porfavor... es mío...
Aún sujetaba el dibujo como él, de inmediato levantó su rostro dándome un gran susto, sus ojos eran completamente blancos, solté de inmediato el dibujo y me puse de pie como él.
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-- Tu... tus ojos...
No podía hablar, mi cuerpo no creía lo que veía, retrocedi unos pasos hacia atrás, entonces sin mirar atrás empecé a correr, las ramas golpeaban mi rostro y cuerpo, el camino lo bajaba a una fuerte velocidad no se como pude llegar hasta el pie de la colina, estaba por llegar al puente hasta que pise mal otra vez goleando fuerte mi cabeza en un tronco seco que estaba a unos metros donde había rodado.
Mi mente empezó a ver borroso antes que pase eso el chico o ese ser reapareció de pie, me miró fijamente su rostro estaba claramente en mi, esos ojos blancos me miraba y yo empezaba a perder el conocimiento, mi ojos empezaban a cerrarse cuando estiró su mano hacia mi rostro.
-- Debí escuchar a los niños... Ahora terminará con mi vida...
Fue el último pensamiento que tuve antes de perderme en la oscuridad de mi cabeza.
C O N T I N U A R A | | |
¿Les gusto?
Espero que sí, esperaré su apoyo en esta historia, el nombre es original hecho por mi.
