I. ¡𝐒𝐎𝐘 𝐈𝐌𝐏𝐀𝐑𝐀𝐁𝐋𝐄! (Shizuka)

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Si hay algo que me moleste en este mundo, es el hecho de que todo se arruine por culpa de las estupideces que salen de la boca de los imbéciles. Arruinan debates por sus peleas (antes amaba debatir en la clase, pero ahora lo odio porque siempre se arma una pelea entre todos), por ejemplo, pero lo que más me duele, es cuando arruinan los juegos de Educación Física, insultando a los que no saben jugar, que a fin de cuentas, no es culpa de ellos, no les gustan los deportes y listo, y no pasa nada, por más que todos digan que con la práctica se puede hacer todo, simplemente hay personas que no pueden hacer algunas cosas, y es totalmente válido. En mi clase la mayoría juega decente, hay algunos que son excepcionales (principalmente los chicos, que son un asco de persona), cuatro o cinco chicas que juegan bien pero son unas hijas de puta, siempre quieren que todo sea como ellas lo quieren, y son cero pacientes y tolerantes con los que carecen de autoestima, ejemplo, una chica llamada Kanae, que es buena en los estudios, no destacada, pero bastante aplicada, sin embargo, en los deportes no le va muy bien. Es decir, en la materia le va bien, apenas está un poco por arriba del aceptable, pero eso es porque ella, a pesar de que odia jugar, hace las cosas, es aplicada y hace lo mejor que puede, y el profesor eso lo valora bastante. Menos mal, porque ella no merece reprobar la materia por no saber jugar, y realmente le va muy mal jugando, ya que no puede patear bien una pelota, no sabe tirar, no tiene fuerza, es lenta... y eso a mis compañeros no les gusta nada.

De vez en cuando hablo con ella, le caigo bien, soy de las muy pocas personas en el mundo que le caen bien, pobrecita. Cuando tenemos que hacer equipos de a dos, yo siempre la elijo, y cuando el profesor elige a dos personas para que forman los equipos para jugar algo, y me toca a mí elegir, siempre la elijo a ella de primera, me da rabia que siempre la dejen de última, y los del equipo de ella se quejan de que se quedaron con ella.

A mí nunca me importó escoger a los que juegan bien, sino a los que sean buenas personas, y que no les importe ganar. Si juegan bien, mejor, pero no me voy a morir porque en mi equipo no sean los mejores, prefiero jugar con gente que sepa respetar, pero tristemente, la mayoría de esta clase juega para ganar, no para pasarla bien, y si alguien comete un error en el juego, lo tratan como a la mismísima mierda.

Soy afortunada de que a mí casi no me llega el hate, porque juego muy bien, por no decir que soy la mejor de la clase, según el profesor, jaja. Siempre me quieren elegir por mi control perfecto del balón y por la fuerza de mis tiros. Me halagan, pero prefiero ser halagada por gente realmente amable. Kanae siempre me dice que quiere ser como yo, no sólo por mi manera de jugar, sino por mi personalidad, quiere ser alguien fuerte y que sepa defenderse de esos hijos de puta. Ella es muy insegura, tímida y sensible, todo le afecta, a mí me enfurece porque ella es muy amable, y siempre se ofrece a ayudarme en las clases (no me va mal ni nada, pero hay muchas cosas que me cuestan). Yo siento que tengo que protegerla y ayudarla a sobrevivir en esta asignatura, que es amada por toda la clase, incluso por mí, pero temida por ella. 

El otro día estábamos jugando fútbol, y la pelota le pegó en la mano, lo que provocó un penal a favor del otro equipo, y terminó en gol. Todos se enojaron feo con ella, yo me di cuenta de que estaba conteniéndose para no llorar frente a todos, pero yo la defendí, y al final les cerré la boca a todos, porque con mi control del balón saqué a bailar a los del equipo contrario, y metí el gol de la victoria. Parezco Messi, okey no, jaja.

─¿Vieron? En vez de putear a los compañeros deberían hacer como yo, ir a conseguir el gol, putear no sirve de nada, porque gastan mucho tiempo del partido, y cada segundo cuenta─ les dije.

─Sigan el ejemplo de Shizuka, y sean más compañeros con Kanae, que ella está haciendo su mejor esfuerzo por jugar.

─Pssh, no puede ni pasar la pelota─ se rio uno de los idiotas.

─¿Quién te crees que eres? ¿Pelé?─ le pregunté, a la defensiva─No, eres un estúpido que apenas estudia y que apenas juega, el deporte no es lo más importante, ser aplicado sí.

─Shizuka, siendo jugador de fútbol profesional te pagan millones de dólares, siendo aplicado apenas puedes conseguir un trabajo decente. No creas que patear un balón no te da nada, al contrario, te hace rico─ rio otro de ellos, que no era tan imbécil como este otro, pero igual.

En parte tiene razón, pero no por ser bueno tienes que insultar a los que no lo son, puesto que Kanae ni siquiera quería estar ahí.

La pobre miraba para abajo todo el tiempo. Me dio mucha lástima.

Yo amo el fútbol, es muy divertido, te hace sentir tremenda adrenalina. Juego desde muy chiquita. Mi padre, Katsuhiro Minamoto, es un exjugador de un equipo de fútbol, y luego de su retiro, me entrenó, jugaba conmigo en el patio de mi casa a toda hora con mi balón de fútbol, al cual nombraba Baku cuando era pequeña, hasta la fecha lo sigo haciendo. Baku es mi mejor amigo, y para jugar con él, me decidí a aprender las técnicas de fútbol. Fue una bella infancia con Baku y mi papá, y en la escuela todos me querían en el equipo por ser "excepcional".

Actualmente sí juego para divertirme, pero también para poner en su lugar a todos estos hijos de puta, ya que a veces son muy machistas, aunque siempre les cierro la boca con mis habilidades.

─¡Oooh! ¡No puede ser! ¡Una chica los sacó a bailar! ¡UNA CHICA! ¿No es una vergüenza?─ me hacía la sorprendida, y me tapaba la boca para provocarlos.

Sí, señor, yo no me dejo pisotear por estos idiotas, ¡porque soy imparable! ¡Shizuka Minamoto es imparable!

𝗛𝗔𝗦𝗧𝗔 𝗟𝗔𝗦 𝗠𝗨𝗝𝗘𝗥𝗘𝗦 𝗣𝗨𝗘𝗗𝗘𝗡 𝗝𝗨𝗚𝗔𝗥 𝗙𝗨𝗧𝗕𝗢𝗟 ❱ 𝗖𝗧 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora