Shizuka es estudiante del colegio Mizumi, Abril del Kozakura y Kimiko del Toho. Las tres están en su última hora de clase del viernes, ya mañana podrán descansar y disfrutar del fin de semana.
Bueno, a Kimiko no le gusta mucho esa idea, porque estar en el colegio es un escape de su entorno familiar tan tóxico. Le encanta estar con Hyuga y sus demás compañeros del Toho. Ahí se siente amada, respetada, protegida. Ella piensa seriamente en hacer algo los fines de semana para no estar en su casa, y no limitarse solamente a salir a jugar con su balón al parque. El día de ayer encontró una noticia en Instagram de que un merendero que queda en las afueras de la ciudad necesita a alguien que ayude con la limpieza, la cocina, etcétera, y le gustó la idea. De tan sólo pensar en tomarse un tren para ir hacia allá, que pasa por lugares llenos de naturaleza, y pasar horas ahí, conviviendo con otras personas y lejos de su familia... sería un sueño. Seguramente termine haciéndolo. Sólo espera que alguien no haya tomado su lugar.
Shizuka no odia ir a la escuela, pero le tiene harta la actitud de sus compañeros engreídos, Kanae le contó que cada vez se siente peor en esa clase, que daría lo que sea por irse de esa escuela, solamente quiere a Shizuka, pero si no fuera por ella, le pediría a su madre que la saque de ahí. Varios de sus compañeros le dijeron que harían lo que fuese por echarla de la clase, con tal de no seguir "estropeando los juegos en Educación Física".
─Si se tratara de una situación mucho más grave, no dudaría en hacerle una denuncia a cada uno de ellos─ le dijo a Kanae.
─Shizuka, no sé cómo le hablas a una peste como yo, pero en verdad, agradezco mucho la paciencia que me tienes.
─¡No eres una peste! ¡Ellos son la peste! ¡Peores que la Peste Negra son!
Lo cierto es que Kanae tiene muy poco amor propio, como Abril.
Hablando de ella, sí que desea acabar esa jornada de una vez. Lo peor de todo es que los viernes le toca dos horas de Educación Física al final, ¿y qué creen que está sucediendo?
Sí, la están basureando, como lo hacen habitualmente.
─¡ABRIL, MUÉVETE!
─¡¿POR QUÉ ELEGISTE A ESTA MUJER?!
─¡ERES UN DESASTRE!
─Abril, no sabes jugar.
Pero a diferencia de otras veces, Abril por fin pudo abrir la boca:
─¿Quién te creés que sos? ¿Pelé?
─Ah, sí, Pelé murió─ uno de sus compañeros se encoge de hombros, y el resto se ríe.
Abril se siente mal por esa respuesta. Cuando por fin logra decir algo y creer que por fin les ganó una batalla, le juegan en contra, y cuando se ríen... Es lo peor para ella.
Un detalle de Abril es que ella es tres cuartos uruguaya y un cuarto japonesa. Nació en Uruguay, pero su padre encontró trabajo en Japón, y ella y sus padres se mudaron a ese país. Ella se identifica como japonesa, pero también sabe hablar con el acento de su país de origen, y le gusta, aunque lo usa pocas veces.
Luego de dos horas de sufrimiento, por fin se fueron de la escuela. Abril se escondió detrás de un árbol, luego de alejarse lo suficiente de la escuela, y se puso a llorar. Educación Física es el infierno en persona. No entiende cómo le puede gustar a tanta gente.
─Kimiko, ¿no tienes ganas de ir a McDonald's?
─Shizuka, no tengo dinero.
─Yo tengo. He estado ahorrando lo suficiente, además tengo unos cuantos cupones que fui coleccionando.
─¿No te molesta pagar mi comida?
─Nop, pida todo lo que quiera, señorita.
─Gracias, Shizuka, pero no voy a abusar. Comeré unas tres o cuatro nuggets de pollo y un paquete de papas fritas pequeño.
─Tampoco te quedes con hambre. Mira, yo voy a pedir una Bacon con papas fritas medianas, y tú comerás nuggets y papas fritas, y lo que te sobre me lo como yo, ¿te parece?
─Jaja, bueno.
─¿Sabes? Hace días tengo ganas de comer en McDonald's, ese lugar como que me produce recuerdos felices de mi infancia, como cuando subía a los juegos con mis juguetes de la cajita feliz y me hacía la tremenda exploradora.
─Yo sólo fui cinco veces a McDonald's en mi vida.
─Pues hoy será la sexta, querida. Vamos a pedir la comida, sacarle foto, subirla a Instagram y presumir la plata que apenas tenemos─ le da pulgar arriba y le guiña el ojo─. Es broma, yo no soy una presumida como mis compañe...─ se detiene al ver a Abril llorando─O-oye, ¿y ella?
─¿Será estudiante de ese colegio?
─¿Y si le hablamos?
─Sí. Disculpa.
Abril se quita las manos de la cara, y logra identificar a dos chicas frente a ella, a pesar de tener la vista borrosa por las lágrimas.
─¿Q-quiénes son ustedes?
─Soy Shizuka Minamoto del colegio Mizumi, y ella es Kimiko Nozu, del Toho.
─Mucho gusto. ¿Por qué estás llorando?
─N-no es nada grave, sólo tuve un mal día en la escuela...
─¿Qué pasó exactamente? Claro, si podemos saber.
─Nada, sólo me gritaron en Educación Física, por no saber patear un balón, lanzar o hacer un pase, o sea, lo normal.
─¿Dijiste que te gritaron?
Abril asiente, quitándose las lágrimas de los ojos con el antebrazo.
─¡CÓMO ODIO A ESA GENTE!─ Shizuka da un fuerte pisotón en la acera.
─Me da asco cómo alguien puede criticar a una persona que no es muy experimentada, ni que ser bueno en los deportes sea importante. Yo amo los deportes, pero no busco herir al que no sepa jugar.
─En mi colegio hacen lo mismo con mi compañera Kanae, y ella está cada vez más torturada.
─¿Ustedes me entienden? ¿De verdad?
─Pues claro, no creemos que sea una estupidez el sentirte mal por algo así. Me parece muy injusto, ya que no es tu culpa tener que hacer deporte. Yo sinceramente pondría Educación Física como algo aparte de la escuela, porque me parece absurdo que califiquen por quien juegue mejor, digo...
─Shizuka tiene razón. Amo jugar fútbol, pero me da lástima por los que no les gusta jugar y tienen que pasar por lo mismo que tú.
A Abril le brillan los ojos. Finalmente encontró a alguien que entiende a la perfección por lo que está pasando ella.
─Me dan pánico los deportes.
─Pobrecita, pero si quieres podemos ayudarte a perderle el miedo.
─Me gustaría, pero no sé... Estoy en un debate personal sobre eso.
─No pasa nada, respetaremos tu decisión.
─Pero ¿te gustaría ser nuestra amiga?─ le pregunta Shizuka, mirándola con los típicos ojitos de perro triste.
─Eso sí, me encantaría, jaja.
─Vamos a ser buenas amigas contigo, te lo prometo...
─Abril. Me llamo Abril.
─Qué lindo nombre─ Kimiko sonríe.
─¿Quieres ir a McDonald's? Yo invito.
─Claro, pero primero tengo que decirle a mi madre. Esperen un segundo, voy a escribirle ahora mismo.
─Okis.
Por fin Abril hizo amigas que la ayudarán a aliviar el vacío que siente en la escuela. Kimiko y Shizuka van a ser un gran aporte a su vida.
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𝗛𝗔𝗦𝗧𝗔 𝗟𝗔𝗦 𝗠𝗨𝗝𝗘𝗥𝗘𝗦 𝗣𝗨𝗘𝗗𝗘𝗡 𝗝𝗨𝗚𝗔𝗥 𝗙𝗨𝗧𝗕𝗢𝗟 ❱ 𝗖𝗧 ✔
FanfictionUn grupo de chicas amantes del fútbol buscan a toda costa hacer entender a la gente que el fútbol femenino también puede ser divertido, quizás hasta más que el masculino. Se realizan torneos de fútbol masculino, las ligas de cada país, la Eurocopa...