LA TRAMPA DEL AMOR

Capítulo 30

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Maratón:

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-¡Tú me olvidaste!... – Repuso el castaño al fin levantando la cabeza que había estado clavada en el suelo. Los ojos penetrantes del castaño miraron al ojiverde de frente permitiendo ver un dejo de rencor que dio justo en el blanco

– Todo lo que pasó entre nosotros antes... en el colegio, después de entonces, la relación que tuvimos, los sueños que compartimos; todo eso de lo cual nunca hemos hablado en estos meses, tú lo olvidaste tan rápido, Jimin, cómo si yo no te hubiese importado nunca ...– Barbotó Jungkook preguntándose si este ejercicio de sinceridad no pondría las cosas aún peor de lo que estaban

- ¿Olvidarte?... – Preguntó Jimin sin poder creer lo que escuchaban sus oídos

- ¿Quieres saber lo que pasó conmigo cuando rompimos?... ¿Quieres saber por qué realmente dejé el trabajo y desaparecí por meses?...- Continuó el joven inglés comenzando a sonar alterado mientras se paseaba nerviosamente de un extremo a otro de la habitación

–Bien, pues déjame decirte que me convertí en un alcohólico, en una piltrafa... ¿Sabes por qué?...

-¡Fue por ti! ....- Gritó finalmente exasperado

- ¡Por un demonio, fue sólo por ti, por mi cobardía, por mi indecisión, por este maldito sentido del deber!... Fue porque no podía olvidarte por más que quería y no sabía qué hacer con este vacío de saberte ajeno...

Jimin se quedó lívido. Sabía muy bien que durante el tiempo que Jungkook había estado alejado del teatro y que  había vivido un período oscuro del cual no se sentía orgulloso

Por las cosas que el castaño había dejado entrever en sus conversaciones, Jimin se imaginaba que en aquellos meses él se había excedido con el alcohol, pero nunca se le había ocurrido que aquel desvarío había sido causado por el dolor de haberlo perdido

Saber que el castaño había sufrido por causa de su rompimiento al punto de degradarse era un golpe para el cual no estaba preparado

- Jungkook, yo...

- No digas nada, Park... – Interrumpió el joven actor arrepintiéndose de la dureza de sus palabras

– No es tu culpa lo que pasó, sino mía, por no saber cómo se le hace para perderte, para dejarte ir y sacarte del corazón...

- Fue por ti, pero aún así no es tu culpa... yo me sentía confundido y pensé que la bebida era la solución... Estaba equivocado. Así me lo hizo saber Yeol...

- ¿Yeol?... – Preguntó Jimin sorprendido

- ¿Qué tiene que ver él en todo esto?...

- Te explicaré... – Prosiguió el joven inglés dándose cuenta de que era necesario ahondar aún más en los recuerdos dolorosos, muy a su pesar

– Dejé Nueva York y viajé a Chicago para verte, pero una vez ahí no supe cómo hacerte frente, intuyendo de ante mano que tú no me aceptarías mientras Seung estuviera de por medio... 

- Comencé a beber más y más sin encontrar valor ni para buscarte, ni para regresar con mi entonces prometido...Ya sabes, así soy de patético...– Añadió Jungkook frunciendo la comisura izquierda de sus labios en un gesto amargo y burlón al mismo tiempo

– Una de esas noches en que bebía sin freno me encontré a Yeol en un bar....Tal parece que la historia de nuestra amistad está hecha de encuentros en esos lugares...