Epilogo: Mas allá de la opresión del velo

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-Dame un beso-susurro pícaramente mientras ella me sonríe quitándose la mascarilla de oxigeno, dándome un profundo beso que me causa escalofríos en el estomago.

-Te amo mucho, Said-susurra con su aun voz ronca haciéndome tragar saliva, conmovido.

-¿Qué nombre le pondremos a nuestro hijo?-susurra viendo a esa pequeña cuna donde descansa ese hijo que tanto hemos esperado, sus ojos son verdes, su piel blanca como la mía solo que con los hermosos rizos de su madre.

-Yo elegí como se iba a llamar Khadija, elige esta vez tu-susurro sentándome a su lado tomando su mano y besándola.

-Me gusta Antara-dice sonriéndome, cuanto extrañe ver esa sonrisa.

-A mi también ¿Ustedes que opinan?-pregunto a nuestra familia.

-Antara es un nombre muy bendecido de verdad que sí, es como su hijo heroico al pasar todas las penurias que paso y poder nacer, Sin lugar a dudas el amor de Allah es grande y todos somos indignos de el-dijo el Tío viendo a mi hijo dormir plácidamente en la cuna.

-¿Tu qué opinas Tío Abdul?-pregunto el Tío Ali, mientras yo le daba unas pastillas a Jade para desinflamarle las extremidades, esa cesárea fue ruda.

-Yo también estoy de acuerdo, es un nombre muy bendecido-dice el Tío Abdul sonriendo.

-¡Nunca dejare de agradecerle a Allah que permitió que naciera! Además me hace muy feliz que Aisha ya tendrá con quien jugar, un hermanito para ella-digo viendo la cara desconfiada del Tío Abdul, quien frunce los labios inconformé.

-¿Ahora qué pasa?-pregunto molesto encarando a mi propia familia.

-Me parece una actitud muy egoísta de parte de todos ustedes-me interrumpe Jade hablando despacio y claro, para no cansarse.

-Cuidado amor, no te agites-susurro preocupado.

-Aisha es tan hija nuestra como lo puede ser Samir para Mohamed y Latiffa, además no quiero que la tilden de bastarda, puede que nosotros no la hayamos procreado pero es nuestra de igual manera, padres son los que crían no los que engendran y yo soy madre para todos mis hijos. Estoy criando dos hijos de Rania, la mujer por la que estoy postrada en esta cama desde hace casi seis meses-chilla molesta.

-Dejen esa ridícula doble moral que tienen, porque tuve una aventura con Lucas me catalogaron de mal viviente y puta, siempre minimizándome al lado de Rania y mas puta resulto ser ella, no solo intento matarme, sino que tuvo un hijo aun casada con Said de otro hombre-chillo molesto mientras esa usual punzada de celos volvía a mí.

-Son cosas diferentes, Jade-dice con severidad el Tío Abdul.

-No hay diferencia porque la falsedad sigue siendo la misma de ayer, les encanta satanizar y alimentarse de las criticas y vivir estancados en el pasado de los demás, veo que todos hablan de mi pero no veo que hablen de Said de cómo se revolcaba con Maisa, Rania y conmigo por separado, pero en el los mismo años-responde furiosa dejándome helado.

-¡JADE!-chilla escandaliza Latiffa.

-No seas ridícula Latiffa, tu mejor que es la verdad ahora con esa misma falsedad son incapaces de aceptar a Aisha, ella no es solo sus orígenes-chillo Jade molesta.

-Está bien ya basta Jade tiene razón, es un momento demasiado hermoso como para estar discutiendo, cambiando de tema ¿Entonces ese va ser el nombre de su pequeño?-pregunta sonriente el Tío Ali.

-Si-respondo viendo como asiente sonriente mi esposa.

-Cuando se despierte haremos el llamado de Allah, cambiando de tema ¿Van a venir a mi boda con Zoraide?-pregunta curioso el Tío Ali.

Mas allá de la opresión del velo-(Jade y Said) (Corrigiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora