doce

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Lo único que podía pensar en ese momento era, ¿qué hacía mi futuro esposo en mi casa?, porque yo juraba que no me vendría ayudar en mate, porque no tenía prueba, ¿O sí?

Conchetumare tenía prueba de matematica y no me acordaba.

Mientras le escribía a la Sofi lo más rápido posible diciendole que se tardara en llegar a la puerta, tenía dos problemas, problema uno; mi mamá y problema dos; el nacho.

Recapitulemos distintos escenarios de mi semana, mi ap vino a enseñarme mate y le dijo al Nacho que era mi pololo, y después yo se lo confirmé, una mentirita piadosa por aquí y otra por allá. Ahora el Nacho tira la pelá y yo a nada de pegarle un wate haber si se pega la cacha de lo desubicado.

Tocaron el timbre y yo ya estaba en plena crisis existencial, rezando diez padre nuestros y un angel maría nunca estaba de más.

- ¿Esperas a alguien, mi niña? – preguntó mi mamá después de escuchar el timbre.

- Eh, bueno, yo – comencé a tartamudear mientras el Nacho me miraba divertido, algo sabía este conchesumadre. – Vino la Sofi, mami. Debió venir antes pero estaba acompañando a su mamá en algo. – dije mientras me paraba abrirle la puerta.

- Hueona, se te juntó el ganado. – Me susurró la Sofi mientras pasaba al lado mío, después de que le abrí la puerta.

- Hola, Liss. – Me sonrió mi ap con la manos en los bolsillos, y hasta se veía un poco nervioso.

- ¿Qué haces acá? ¿Tu mina te dejó salir? – M crucé de brazos mientras lo miraba enojada, pero en mi mente estaba saltando, porque me vino a ver.

- ¡Ya pue, hija! ¿Hará pasar al pololo? – conchetumare.

El Felipe me miró extraño y yo toda sonrojada. Levantó una ceja y me preguntó - ¿Pololo?

Lo tomé del brazo mientras lo llevaba a la cocina, donde el Nacho estaba con su celular, y la Sofi con mi mami estaban copuchando, amistad elite. El verdadero podrán.

- Ah, con que tu eres el pololo de mi hija, ¿por qué no te presentaste cuando viniste el otro día?

- ¿De qué-

- Es que me lo pidió hace poco mami. – Dije rápido mientras le pellizcaba el brazo

- Claro, claro. – Sonrió mirándome. – Se lo pedí hace unos días, por eso vine hoy, a presentarme, demás que la Liss no le dijo, mi cabecita de pollo. – Me abrazó por los hombros mientras me daba un beso en la frente.

- En ese caso sientese mi niño.

La once se basó en miradas incomodas por parte del Nacho, la Sofi mirandome feliz, porque sabía que aunque fuera falso, yo estaba saltando internamente en un pie, y obviamente lo estaba, y lo más increible que el Felipe, hablaba con mi mamá y le respondía todo de la mejor manera, tomandose su papel bien enserio.

El Nacho ya se había ido, mi mami se fue a trabajar, la Sofi se fue a mi pieza, porque se iba a quedar a copuchar, así que fui a dejar al amor de mi vida a la puerta.

- Gracias por hacerte pasar por mi pololo. – Sonreí un poco avergonzada, porque, admitamoslo, que pera que de la nada tu ap se vuelva en tu pololo falso, más aun cuando lo viste con la mina que te cae como patá en la guata.

- No si tranca, te la debía. – Sonrió de vuelta.

- ¿Por qué me lo debes? ¿En que wea me metiste Felipe?

- Ya lo descubrirás, me voy. – Le iba a dar un beso en la mejilla pero el maldito conchetumadre me dio un cuneteado .

Fui corriendo a mi pieza después de cerrar la puerta y grité contra mi almohada, mientras la Sofi me miraba como "¿qué wea le pasa?".

- Primero, ¿quién le gusta al Martín? Weona me dejaste senda intrigada, nunca más me respondiste los mensajes.

- No te puedo decir. – Me miró mal-, pero no es porque yo no quiera, solo puedo decirte que no debes preocuparte por nada.

- Me caes pésimo gila asquerosa bastarda, ¿a esto le llamas amistad? Ya ya ya, filo, dime que acaba de pasar y ¿qué cresta hacía el Felipe aquí, o sea, por qué vino?

- Ni idea weona, yo me enteré cuando me mandaste el mensaje, y el Nacho de sapo dijo que era mi pololo, porque cuando el Felipe había venido la otra vez, se encontró con el Nacho y le dijo que era mi pololo así que el mismisimo conchetumare anda webiando pa todos lados.

- Según yo le gustai.

La miré terrible mal, y le lancé una almohada, a ver si la weona reaccionaba.

- Me dio un cuneteado, weona. Mañana nos casamos. – Vi como a la weona le comenzó a crecer una sonrisa, pero me acordé que en la tarde había visto al culiao con la Annely. – No weona, cero, cero, cerisimo, el culiao en la tarde estaba con la Annely en la plaza, me los encontré de pana con el Martin, y antes que pienses mal, me acompañó a comprar pan, porque tu no me pescaste.

- Ah, tonto culiao, olvidate de ese weon, y comete al Nacho.

- Puta, ¿sabí que? En volá lo hago.

- ¡Esa es mi amiga, mierda!

Me sonó el celular y era un mensaje del Felipe diciendo, "Descansa flaca".

- Creo que en volá no lo hago.

****

Nooo, ¿yo actualizando el mismo mes? es que simplemente épico.

Ysip, sigue siendo relleno, como que ya ni se a donde va la historia, pero a ustedes les gusta, así que les traigo una actualización bastante de pana. <3 

No salgan y cuidense harto <3 :)

¿Pa' qué me psicopateai'?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora