¡Huye Neji!: Kakashi y Sasuke te tienen en la mira

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Hincada sobre un cojín esta Kaori sosteniendo con su mano izquierda su cuenco con arroz y con la derecha sus palillos, frente a ella esta Kiba, comiendo como si no lo hubiera hecho en años, y lo único que los separa a ambos es la mesa.

(Ya pasaron cinco días desde que descubrí ese anillo y Kiba-kun no me ha dicho nada, ni siquiera insinuado nada) –la castaña frunce el entrecejo, lo que más odia es esperar. –Kiba-kun. –el mencionado deja de comer y alza la mirada dejándole ver que tiene su atención y Kaori sonrío divertida al verle varios granos de arroz en la comisura de sus labios. – ¿No tienes algo que decirme? –dice como quien no quiere la cosa.

- Mmm… —el castaño se soba la barbilla pensativo a la vez que mueve su pupila hacia arriba. –La verdad no. –el castaño baja la mirada y le dedica una enorme sonrisa, de esas que la hacen suspirar desde que tiene memoria.

- ¿Seguro? –pregunta dudosa.

- ¡Ah! –Kaori lo miro ansiosa. –Shino se casa a finales de primavera. –dice con alegría.

(Estás mejorando Kiba-kun, seguro me dices eso para despistarme. No me creo eso que el raro de tu amigo se case antes que tu… aunque conociendo la novia rara que tiene todo es posible) –Kaori suelta un profundo suspiro. –Me alegro por él. –una leve sonrisa adorna su rostro.

- Se le ve feliz, eso es lo importante. –dice amigable, para después regresar su atención a su comida.

(Tal vez esta esperando el momento oportuno para que sea más especial, así que no debo presionarlo para no arruinarlo) –Kaori puso una mirada soñadora, cuando niña su sueño siempre fue ser la esposa de Kiba, y ahora que ve su sueño cerca la emociona y la hace tener mas ansiar porque el castaño le haga la pregunta.

Sakura va caminando por unas de las calles de la aldea, cargando en cada una de sus manos una bolsa de plástico que se ve llena de verduras y frutos, pero la peli-rosa detuvo su paso y un tic nervioso apareció en su ceja derecha cuando una de las bolsas se rompió de abajo dejando caer todas las frutas que llevaba en esta.

Una naranja fue rodando hasta topar con la punta del pie de Neji que iba a camino contrario que ella. El castaño se detuvo y se agacho tomando la naranja, para después enderezarse y mirar divertido a Sakura que esta de rodillas recogiendo las frutas mientras murmura maldiciones que traumarían a cualquier persona con oídos castos.

Cuando una gruesa y grande mano sosteniendo una naranja se poso frente a su rostro levanto la mirada viendo a Neji que la mira burlón.

- Deberías ayudarme en vez de burlarte. –dice con molestia.

- Eso hago. Recogí una naranja. –dice con burla y Sakura lo fulmina con la mirada.

- Síguete burlando Hyuga y te pateo las bolas usando chakra en los pies. –dice amenazante y Neji se tenso sabiendo que es capaz de hacerlo.

- Tan delicada como siempre. –dice con sarcasmo. –Eso de juntarte con Anko te hizo más tétrica de lo que eras antes. –Sakura rodo los ojos viendo como Neji se ponía en cuclillas para ayudarla.

- No te veo en un tiempo y cuando lo hago me molestas.

- ¿Qué puedo hacer? Me sigues pareciendo sexy cuando te enojas. –Neji la mira coqueto y le sonríe de forma torcida.

Aprendiendo de nuestros erroresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora