Capítulo 2

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Llegamos a la capital de Viena donde viven príncipes, princesas, duques y duquesas, en general todos los que son de la realeza y gente con empresas muy importantes, la mayoría creyéndose superiores a los que son de clases inferiores a ellos.

El castillo es tan grande y majestuoso con un aire antiguo, pero muy moderno a la vez, un jardín espectacular decorado con varias flores y estatuas. Entramos y llegamos a una sala adornada con jarrones, cuadros y muchas cosas caras absolutamente innecesarias, dibujos antiguos adornando las paredes dándole más vida y candelabros hermosos muy grandes colgando del techo. Las paredes pintadas de un color creman y unos sillones blancos.

En los sillones sentadas vi a cuatro chicas todas derechas y elegantes con vestidos y tacones más un montón de joyas encima. Arreglándose y peinándose.

Comparadas a ellas yo tengo puesto una licra negra un poco degastada con pequeños rotos, por todo lo que la uso y una camisa gris con mis zapatos deportivos y nada de maquillaje en mi cara ni un peinado extravagante.

-Señoritas acérquense por favor-dijo el rey captando su atención ya que dejaron de hacer lo que estaban haciendo y se acercaron, al llegar todas me empezaron a mirar de arriba abajo por mi atuendo, lo único que hice fue rodar los ojos.

- Formen en una fila para que conozcan al Príncipe Thiago -dijo la reina ocasionando que todas soltaran un chillido muy agudo, que me hizo tapar mis orejas, quieren dejarme sorda. Mientras ellas seguían en eso empecé a mirar hacia un cuadro en especificó que es abstracto y puedo jurar que es igual de caro como lo es de feo, pero lo observe como si fuera lo más interesante de este mundo.

Empiezo a escuchar pasos desde una parte de la sala cuando volteó para ver de donde provienen los pasos, veo al príncipe bajar las escaleras con su porte imponente, lo primero que detallo es que tiene mismos ojos azules de su padre al igual que la misma mirada fría, su cabello azabache como el de su madre y el traje que lleva hace resaltar más sus atributos. Llego y se situó al lado de su madre quedando ella en medio.

-Bien van a decir sus nombres y de donde provienen-dijo el príncipe con un tono de voz frío sin emoción alguna.

Vaya al parecer no soy la única disgustada con esta absurda competencia, echa para joderme la vida.

-Soy Danielle Mayer y provengo de Viena alteza-dijo una castaña de ojos color avellana haciendo una reverencia, el príncipe solo asintió con la cabeza.

-Soy Tessa Jackson y provengo de Castilla- dijo una pelinegra de ojos claros haciendo una reverencia él solo asintió sin darle mucha importancia y una expresión de aburrimiento.

-Soy Amalia Laurie y provengo de Cristal-Dijo otra castaña con unos ojos verdes haciendo lo mismo que las anteriores la reverencia y él respondiendo con un asentimiento de cabeza.

-Soy Maya Jobs y provengo de Coral-dijo una rubia ojos verdes haciendo igual una reverencia y el príncipe contestando con un asentimiento.

Nombres raros es lo que tiene este reino para las ciudades y la capital, el problema fue que no tuvieron imaginación y los fundadores de cada ciudad les pusieron su nombre o apellido, fue lo más fácil para ellos.

-Soy Kolette Montrose y provengo de Mina-dije cruzándome de brazos, no pienso hacer una reverencia.

-¿Y?-pregunto

-¿Que?

-La reverencia señorita, tiene que tener respeto por sus superiores-dijo con su mirada fría para intimidarme.

-Pues no la va a tener, no pienso hacer una reverencia ante una persona como tú-dije con una sonrisa burlona en los labios- Y por cierto quita esa mirada fría porque conmigo no funciona.

Seleccionada para la corona (#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora