Wait, What?.

. Entreten mi fe .

( A ver si guapad no se pone de jotr0n como hace unos días :) )

Philadelphia.

Las horas pasaban lentamente.
Al igual que los días.
Tan fríos.

Freddy Freeman, aquel castaño simpático, con pecas interminables que podrías contar todos los días sin cansarte. Con aquellos ojos cafés, tan lindos que podrías perderte en ellos por una eternidad.

Aquellos ojos cafés que poco a poco perdían el brillo.

Sentado viendo hacia la puerta, con la respiración calmada y la mirada perdida esperaba a que Billy regresará.

Aunque el no lo haría.

Rosa y Víctor se miraban preocupados, caminando de un lado a otro con el teléfono en mano, preguntando por el chico.

Nada.

Pareciera como si el hubiera desaparecido.
Sin dejar huella.

Freddy suspiro y algo cansado dió la vuelta para subir a su habitación, al llegar entró, con la mirada baja.

______: Aún nada?

Freddy negó, se sento en su cama y vio a la chica.

Freddy: Tu tienes algo?

______: no, no hay ningún registro en la cámaras de seguridad, sabe esconderse .

La chica suspiró cerrando su computadora.

Freddy: será mejor que te vayas... Ya es algo tarde...

- el pelinegro pronunció en voz baja aquello, aunque le dolía haberlo dicho había bastantes cosas en su cabeza, dando vueltas sin parar.

La chica entendió, y asintio guardando las cosas en su mochila.

______: si está bien, yo me iré.

Dió un suspiro , rendida. En los últimos días había tratado de hablar con el chico, tal vez de recuperar su confianza, pero era inútil.

¿Algún día lo haría?

¿O simplemente todo cambiaría entre ellos dos?

Demasiadas preguntas, pocas respuestas.

Se despidió del chico con un simple adiós , salió de la habitación. En la planta baja hizo lo mismo con Rosa, Victor y los niños.

Sumida en sus pensamientos, caminaba por las calles de aquella ciudad, tomando la correa de su mochila, al llegar al lugar acordado dónde Alfred la recibiría, vió a su padre.

Bruce Wayne recargado en la puerta de lujoso auto esperaba a verla.

Ambos subieron al auto cuando se encontraron, ninguno se dirigió la mirada, pero Bruce sabía que la chica no estaba bien.