Eclipse #1 De La Saga Eclipsados

Capitulo 6 - ¿Por fin mi vida es normal? (Reescribido)

Tal como dijo mi padre, a la mañana siguiente dejamos a mi madre en un centro psiquiátrico, al parecer el alcoholismo se debía a una fuerte depresión y los gritos y pesadillas era una gran paranoia que no tenía que ver con que mi padre se fuera. Luego nos dirigimos al aeropuerto y viajamos en primera clase, nunca me había montado en un avión, no tenía miedo solo se sentía algo raro, yo me senté con Mathías y mi padre con Isaura, la cual era la mamá de Mathías. Yo en todo el viaje solo pensé en Damián ya que era mi único amigo y él era lo único que yo dejaba atrás aparte de mi madre. Mathías a veces me hablaba de cosas irrelevantes, boberías de niños pequeños.

Todo iba bien, cuando llegamos fuimos a dejar todo en la casa, era grande y mi cuarto era muy espacioso había una gran ventana que daba a un pequeño balcón y las paredes eran de un maldito azul celeste que me hacían acordarme de Damián, después fuimos a ver a Aleysha.

Todas las vacaciones me las pase encerrada en mi habitación excepto cuando íbamos a ver a Aleysha o cuando mi padre insistía en salir en familia. Las vacaciones se me pasaron rápido sólo pensaba en que en las próximas vacaciones iría de vuelta a mi casa y vería a mi madre y buscaría a Damián.

Al parecer todo iba normal, no me llevaba tan mal con Isaura y aunque mi padre siempre trabajaba trataba de recuperar el tiempo perdido o algo así. Sinceramente sabía que no pertenecía aquí algo me decía que todo esto era una gran farsa.

Un martes mi padre salió a trabajar como ya era costumbre y Isaura me dijo que saldría con Mathías, me ofreció ir pero no quise, amaba estar sola en casa. Bajé a desayunar cuando llega el correo y salí a recogerlo, habían cartas para mi padre, una para Isaura de sus padres y un paquete con un sobre que decía mi nombre, esos había logrado picar mi curiosidad y deje todo en la mesa excepto el paquete y el sobre, tome mi desayuno y subí a mi habitación.

Ya adentro abrí el sobre y empecé a leerlo detenidamente.

Querida Eclipse

Tal vez no me recuerdes, claro que no lo harás estabas muy cría cuando nos vimos por última vez, fue muy difícil ubicarte pero después de visitar a tu madre en aquel centro me dijo todo lo que necesitaba saber, me dijo que te fuiste con el idiota de Eduardo, me rogó que te recuperara a todo costo y eso pienso hacer creo que ya es hora de que afrontes tu realidad, tu verdadera realidad y te vengas a vivir conmigo de otro modo correrás grave peligro. Tú nunca debiste irte.

- Tu padre -

Mi mente no creía lo que leía, «¿Qué clase de broma pesada era esto?» y ví algo más en el sobre.

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Avenida Mithaud, hotel Las cascadas, suite presidencial.