CAPÍTULO 13

2.2K 347 33
                                    


Rick había caído en coma, los doctores no sabían cuándo iba a despertar y si él lo haría.

Walker no se quedó a escuchar todas las explicaciones posteriores, no sentía que tenía el valor suficiente para escucharlo.

Lori los había invitado a Shane y Walker a quedarse un par de días en su casa, para intentar animar a Carl, cosa que ambos amigos aceptaron.

Pero Walker no logró quedarse mucho tiempo, no aguantaba la idea de estar en la casa de Rick sin que él esté allí.

Lo intentó, lo intentó por Carl y por Rick mismo, pero no se sentía correcto.

Necesitaba irse.

Después de una promesa a Shane de que volvería si el estado de Rick cambiaba, cuando Rick despierte, y pasó el resto del día jugando con Carl para marchar por la noche después de unas largas despedidas.

Desde que Rick cayó en coma hasta que Walker finalmente decidió irse del pueblo habían pasado más o menos tres semanas, y en todo momento Walker se encontró sufriendo, cada. maldito. minuto.

Creía que si seguía algún tiempo más allí se volvería loco, es decir, más de lo que ya lo estaba.

No mató a nadie más esas tres semanas pero se aseguró de que el maldito idiota que dijo que eran solo dos tenga una suspención de dos meses porque su informe había puesto en peligro la vida de uno de los policías y que era su deber informar correctamente la situación.

A Walker le habían temblado las manos por saltar y ahorcar al tipo, pero se contuvo, o más bien, Shane logró contenerlo.

Hablando de sus manos, Walker se alegró al menos mínimamente de saber que no tendría daño permanente, su muñeca solo se había torcido y en esas tres semanas había tenido que usar unas maderitas en sus dedos por sus nudillos rotos, pero pronto podría volver a sostener en un arma como un campeón.

Observó por la ventana de su auto el gran campo que se cernía por kilómetros y kilómetros, el único lugar al que podía huir de los tristes recuerdos de Rick Grimes era a casa de sus padres, en Washington DC.

En la radio se escuchaban canciones del momento, Walker se aseguró de ponerlas lo más bajas posible ya que él las detestaba, se sentía viejo, pero no soportaba la música que les gustaba a los adolescentes de hoy en día.

Sin embargo, sirvieron como ruido de fondo, aunque ciertamente Walker habría preferido el jodido ruido blanco de una televisión descompuesta.

Sabía que sus padres le tenían mucho aprecio a Rick, y solo esperaba que no lo atormenten con más preguntas, ya que lo único que Walker necesitaba era un descanso lo más silencioso.

Como la muerte, pero por tiempo limitado, hasta que Rick se despierte.

Tendría que contarle a sus padres lo que le sucedió a Rick, ponerlo en palabras como Walker no lo había logrado en las últimas semanas.

Rick... él... A él le... Un idiota que dijo que eran solo dos...

Solo dos...

Dos sospechosos.

Sí, Walker debía trabajar en qué le diría exactamente a sus padres acerca de Rick.


La excusa de visitar a sus padres como si realmente los extrañara fua una completa mentira que Walker no temía aceptar, bien podría quedarse en silencio durante toda su visita mientras escuchaba a su mamá contándole de la novela de los miércoles por la noche mientras cocinaba algunas galletas.


Pero él jamás fue tan insensible con su familia, al menos no lo fue desde que Alice murió...

Su hermana mayor, no había tenido la mejor de las vidas, y se aseguró de que si ella no podía tener una buena vida, ninguno de los Gray podría.

Walker negó con la cabeza, intentando apartar los dolorosos recuerdos de Alice de su mente, ahora los Gray estaban bien, su familia se estaba recuperando y ni la pequeña Jane recordaría que alguna vez tuvo una hermana mayor.

A lo lejos, divisó el comienzo de la gran ciudad, y se aseguró de prestar atención por las calles ya que no era un camino recto como lo fue en las últimas cinco horas.

Cuando el sol comenzó a esconderse, finalmente Walker había llegado a casa de sus padres.

No era la casa en donde Walker se crío, así que no le tenía ningún real apego, pero era el nuevo hogar de su familia y por tanto también era el suyo cada vez que lo necesite.


Se quedó en el auto unos instantes, ya había estacionado en la puerta pero aún no encontraba el valor para salir y tocar el timbre, como si sus padres le dirían algo porque Walker sólo los visitaría cuando esté mal y necesite ayuda, no por el simple hecho de extrañarlos.

Antes de que Walker pueda pensar en algún método de escape para huir y esconderse en algún hotel de Washington DC por la culpa, la puerta principal de la casa se abrió y su madre lo miraba expectante y sonriente desde la puerta.

Walker tomó una fuerte exhalación y salió de su auto, asegurándose de pasar por el asiento trasero para tomar su bolso y cerrando las puertas con seguro antes de caminar hasta donde su madre ya lo esperaba con los brazos abiertos.

—Hola cariño, Shane nos contó lo que sucedió. —lo recibió su madre, Walker se detuvo en silencio, asintiendo y mirándola con cuidado.

¿Sabes que vine porque todo allí me recuerda a Rick y no porque realmente quería venir a visitarlos?

Su madre se rió y finalmente lo tomó y lo acercó para un abrazo—. Oh, no seas torpe cariño. Sé cómo te sientes acerca de Rick y me alegra de que hayas querido regresar con tus padres a buscar consuelo, sabes que para eso estamos aquí.

Una vez más, Walker se mordió la lengua y asintió, no podía creer que había dicho eso en voz alta, casi como si no tuviera control de qué estaba bien decir y que no.

Culpó a Shane acerca de eso, Shane siempre le decía que no sea un marica que oculte sus sentimientos y le mienta a la gente.

—Te extrañé ma. —murmuró Walker en un susurro, y lo hacía realmente los extrañaba, pero eso no fue lo que lo trajo allí.

—Lo sé, lo sé. Shane nos avisó que vendrías y que no estabas siendo el más hablador del mundo así que con Jane preparamos palomitas y unas películas de esas del espacio que te gustan, vamos vamos, entra.

Walker soltó una risita y entró, la idea de ir a casa de sus padres cada vez le gustó más.

Debía agradecerle a Shane por haberle contado a su madre lo de Rick, Walker aún no se sentía seguro de poder explicarlo sin largarse a llorar.

La sola idea de recordar a Rick hacía que Walker tenga que tragar un duro nudo en su garganta, en su boca el sabor amargo de la sangre del tipo que le disparó a Rick todavía se podía sentir tan presente como si el tiempo no hubiera pasado.

Solo despierta Rick, más te vale que lo hagas.

LET ME GET WHAT I WANT ✧  Rick GrimesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora