CAPÍTULO 18

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—¿Cuántas armas tenemos aquí? —Jane preguntó al aire, George soltó un gruñido adolorido y Walker se encogió de hombros—. ¿Mamá?

—Silencio, Jane. —su madre pidió, subiéndole el volumen a la radio en dónde muchos reporteros hablaban de personas caníbales caminando por las calles.

Bueno, eso tenía un poco más de sentido.

¿Personas caníbales e importales? Walker podía acostumbrarse a ello.

Cuándo había una amenaza localizada, fue más fácil para él actuar.

Jane se movía velozmente por toda la sala, murmurando algo de provisiones, ella siempre fue una fanática de las películas de apocalipsis entonces Walker la comprendió.

De todos modos, dudaba que todo esto dure demasiado, solo debían ser un par de enfermos, como había dicho su padre, y pronto los militares vendrían a limpiar la ciudad como era de esperarse.

Walker le dió una última mirada apenada a su padre, había escuchado que su hermana y madre susurraban que esa mordida lo mataría, Walker esperaba que no, pero aún así mucho no podía hacer por él.

Nada en lo absoluto. Dijo una voz en su mente. Nunca puedes hacer nada por nadie, no pudiste proteger a Rick, tampoco a tu padre, eso eres tú Walker.

Se desordenó el cabello en un vano intento de apartar los pensamientos y se movió por la casa hasta las escaleras y directo a su habitación, en ella guardaba una radio policial que se había traído desde King Country para poder hablar con Shane.

Como cuándo eramos adolescentes, el canal siete siempre estará abierto, si necesitas algo, ese es el canal. La voz de Rick llegó a su mente en un agridulce recuerdo, cuando los tres estaban por hacer su primera travesura universitaria.

Esa noche robando pizzas a la fraternidad no habían logrado ser atrapados solo por la distracción que Rick había logrado armar, ya que nadie en toda la universidad desconfiaría nunca del bueno de Rick Grimes.

Lo que los imbéciles de la frat no sabían es que Shane y Walker estaban caminando por sus espaldas y habían logrado robarles todos los comestibles de la fiesta de esa noche.

Fue un gran día... Recordó Walker con melancolía, le hubiese gustado disfrutar mucho más esos efímeros momentos.

Caminó hasta la radio y colocó directamente el canal siete—. Shane, oye Shane, ¿estás ahí?

Walker esperó en silencio, mirando a la que era su habitación, estaba casi intacta, ya que Walker jamás había vivido allí realmente, pero sus padres siempre le habían guardado un lugar en su hogar.

Las paredes pintadas de un celeste bebé y un par de muebles empotrados contra las paredes, la cama justo contra la pared principal, como le gustaba a Walker.

No podía dormir sin una pared a su lado, era como una regla básica de su existencia.

Walker detestaba las habitaciones de telenovelas o películas en dónde la cama estaba en el centro, no tenía sentido, además-

—¿Walker? ¿Eres tú hermano? —se escuchó finalmente la voz de Shane, trayendo a Walker de vuelta a la realidad.

—Shane, dime por favor que no es solo Washington DC volviéndose loco. —dijo Walker, sin saber si debería haber comenzado con una mejor explicación pero sin estar mentalmente preparado para dar una.

—¿Te refieres a los muertos caníbales? Oh sí, aquí también están, es un desastre, estamos en la carretera, están bombardeando Atlanta.

Todo en ese momento se detiene.

¿Bombardeos?

¿En Atlanta?

El hospital de Rick está en Atlanta.

¿Shane? ¿Shane cómo que combardeos? —pidió saber Walker, pero durante unos segundos solo estática le respondió, lo cuál lo impacientó aún más—. ¿Shane, tienes a Rick contigo? ¿Carl? ¿Ellos están contigo?

—Tuvimos que partir- Carl y Lori- bien todos- —la voz de Shane estaba distorsionada y Walker a penas podía comprender unas palabras.

—¿Shane? ¡Shane, repite eso! —gritó Walker frustrado, la ansiedad comenzó a recorrer su cuerpo.

¿Tienen a Rick?

¿Fueron a buscar a Rick, cierto?

¿Está Rick con ustedes? ¿Él está bien?

¿Rick despertó?

—¡Shane, carajo responde! —Walker golpeó la radio con una de sus manos, y parece que era lo que le hacía falta ya que la voz de Shane volvió a escucharse.

—¿Walker? hey hermano, ¿estás ahí?

—Aquí estoy, Shane. ¿Qué sucedió allí? Repite eso de vuelta.

—Los militares llegaron, Lori, Carl y yo, estamos a salvo por ahora, nos encontramos en un embotellamiento en la carretera. Acabamos de ver los bombardeos... Es... No lo creerías, Walker, esto es serio, muy serio.

La voz de Shane se detiene, pero Walker vuelve a insistir porque todavía no ha escuchado la parte más importante.

—¿Shane? ¿Qué hay de Rick, dónde está Rick?

Se escucha un suspiro de parte de Shane y luego—. Dijeron que iban a evacuar Atlanta, eso nos dijeron. Que iban a sacar a todos los del hospital y los iban a trasladar en helicópteros pero... Llegaron los militares también al hospital y comenzaron... A matarlos a todos. Vivos y muertos. Tuve que dejar allí a Rick, Walker, realmente tuve que hacerlo pero escúchame él está-

Pero Walker ya no podía escuchar más.

Shane había dejado atrás a Rick.

***
lamento la demora con la segunda actualización del día, hoy publiqué Iris, un fic de Stiles Stilinski, así que ahí a los fans de teen wolf vayan a ver ~ ♡⁠

buenas noches y no se olviden de votar y comentar !!

LET ME GET WHAT I WANT ✧  Rick GrimesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora