NUESTRO SECRETO #1

FINAL

DEBBY

El invierno en Nueva York es increíble, ver a los niños caminar hacía la escuela mientras se divierten amasando la nieve, los panaderos y otros dueños de establecimientos apartar la nieve del camino hacia sus tiendas para la comodidad de los clientes, camino hacía el hospital recordando los increíbles meses junto a Mark sin poder evitarlo se me escapa una lagrima al recordar nuestro primer acercamiento, me hace mas feliz de lo que creía. Se me escapa una risa al recordar lo contento que estaba mi hermano cuando Abby acepto ser su novia, quien iba a decirlo. Llego a mi trabajo y observo la sortija que se encuentra en mi dedo, yo Debby iba a casarme con mi novio. Aún recuerdo hace unas semanas cuando Mark me lo pidió, puedo jurar que casi se desmaya de los nervios.

Después de unas horas de trabajo al fin es mi hora de almorzar cuando suena mi teléfono, descuelgo.

-Buenas tardes, llamo desde el Hospital Manos Unidas. ¿Usted es Debby?

-Si, ¿Sucede algo?

-Es nuestro paciente Mark, lo ha arrollado un coche mientras cruzaba en la calle.

Siento mi corazón golpetear cada vez mas fuerte y las lagrimas agolparse en mis ojos, cuelgo y rápidamente me dirijo hacía mi coche conduciendo como una loca llego al hospital en el que se encuentra, me llevo la sorpresa que allí se encuentra mi hermano y Abby. Siento los brazos de la novia de mi hermano rodearme y susurrarme un todo estará bien, los doctores no quieren dar respuestas y eso me preocupa. Estamos todos en la sala de espera, su hermanita incluida preocupados esperando por noticias cuando sale un doctor y se nos acerca.

-Hemos logrado estabilizar al paciente- Mis ojos comienzan a lagrimear de la felicidad y el doctor nos avisa que puede pasar solo una persona, todos aceptan en que debo pasar yo.

-No llores mi princesa- Pronuncia esas palabras apenas abro la puerta de la habitación.

Después de unos cuantos abrazos y charlar un rato queda profundamente dormido y empiezo a notar como la respiración de Mark se atasca.

-¡Doctor!¡Ayuda! Por favor- Ruego gritando al escuchar los pitidos del aparato, las enfermeras me obligan a salir de la habitación y yo solo comienzo a llorar. Quince minutos exactamente sale un doctor.

-Lo lamento, hicimos todo lo que pudimos, el golpe dio exactamente en el cráneo y no sabemos como no murió inmediatamente.

-¡Hicieron todo lo que pudieron y una mierda!¡Nos íbamos a casar!

Abrazo a la pequeña hermana de Mark mientras observamos como lo entierran, llora desconsoladamente en mis brazos y a mi ni lagrimas me quedan de todo lo que he llorado.

Cuando todas las personas ya se han marchado me siento a un lado de la tumba.

-Me has hecho tan feliz, te amo. Ser fuerte por ti y por tu hermana, nunca te olvidare.

Me levanto y me marcho con el corazón hecho trizas.

FIN.

Gracias por llegar hasta aquí.

Podéis pasaros a leer las demás partes.