Seduciendo a mi espía secreto. +21 [Completa]

Duro Y Con Ganas.

Después de ese día, no supe con certeza que sucedió, no sabía si dije algo que no le agrado o alguna acción que le incomodara, Javi no me miraba, ni siquiera me hablaba, a mi mente solo llegaba el pensamiento de que no le gusto todo lo que hice ese día o al parecer la culpa no lo dejaba pensar claramente, al parecer no lo pude complacer completamente pero... bueno lo hecho, hecho estaba y no había nada más que pudiera hacer para que arreglar eso que sucedió.

Normalmente solía verme con mi novio y teníamos sexo además de hablar y contar que ha ocurrido en el tiempo que duramos sin hablar o sin vernos, sinceramente suele ser una relación algo complicada por su flujo de viajes y mis ganas no cesan por mas relaciones que tengo, no sé con certeza como él se las quitaba, pero a mí me encantaba tener sexo para sentirme liberada, cada vez que me corría el estrés se iba de mi cuerpo. Era genial sentir como la piel de tu compañer@ sexual roza con la tuya y te hace sentir únic@ mientras se vuelven una y se quedan adheridas hasta saciar sus ganas.

Pocos días después me vi con mi novio nuevamente, salimos un rato a nuestra plaza favorita para pasar el rato y despejar la mente, mi novio estaba hermoso (como siempre), vestía un traje de tela muy fina, como era de esperarse de alguien con buen estatus social, teníamos un tiempo sin vernos por lo tanto cuando nos vimos fue genial, no podía parar de besarlo, en tales momentos ni pensaba en Javi, al final de cuentas note que con el solo eran ganas, con mi novio era mucho más que eso, sentía algo un poco más allá.

Luego de la plaza fuimos a su casa, tenía ganas de amanecer allí pero creo que el tenia asuntos del trabajo por lo tanto nunca toque el tema. Le comente que tenía calor y el me ofreció bañarnos juntos, ya sabía por dónde iba su intención pero claro que acepte rápidamente, no tenía que ocultar lo que deseaba y muchos menos si me lo ofrecían, el procedió a quitar mi ropa lentamente mientras caminábamos al baño, poco a poco me quitaba prendas de vestir y dejaba la ropa tirada en todo el pasillo, al llegar solamente tenía las panties, todo marchaba bien, para mí era una escena perfecta.

Antes de que entremos a la bañera comenzó a besarme y colocar sus manos sobre mis nalgas, luego me levanto y me arrincono contra una pared y comenzó a pasar sus dedos por fuera de mis panties, yo empecé a excitarme de una forma única y mordí sus labios mientras el jugueteaba, todo se tornó muy intenso y yo le pedí que me bajara para poder quitar mis panties ya que estaba mojando como loca.

Luego entre a la bañera y el me siguió el paso y también entro a la bañera, llevábamos un rato solo de besos, hasta que el sin preguntar ni consultar solo me levanto y me puso de espaldas para penetrarme ásperamente ya que teníamos un buen tiempo sin hacer nada, me imagino que se sentía lleno de ganas hacia mí, procedió a agarrar mi cintura mientras me penetraba cada vez más fuerte, cada vez mis gemidos eran más fuertes y al parecer eso lo excitaba aún más.

Luego de esa escena le dije que vayamos a su habitación porque quería estar encima de el un buen rato, le bajamos un poco a las ganas y salimos de la bañera y nos fuimos a su habitación, no perdimos tiempo, comenzamos a besarnos de una forma desenfrenada, el solo me tiro en la cama, abrió mis piernas y sin dar más contratiempos comenzó a pasar su lengua sobre mi clítoris, pasaba su legua desde arriba hacia abajo luego ponía presión para besar mi vagina, mis piernas temblaban por lo excitada que estaba yo agarre su cabeza e hice que se quedara un buen rato solo besuqueando mi vagina, mientras mis ojos se desorientaban al excitarme.

Cuando termino me dejo toda mojada, lo empuje hacia la cama y comencé a juguetear con su erección, él me decía que lo besara pero prefería torturarlo solo para ver cómo se ponía, cuando vi que ya estaba excitado a tope me le subí encima y comencé a pasar mi vagina sobre su pene eréctil (sin enterarlo), veía que le encantaba, le gustaba mi forma de torturarlo hasta que lo entre completamente, se sintió genial estar encima de él, cada vez me mojaba más y era más suave a la hora de yo hacer movimientos lentos.

Mientras yo estaba encima se me escapaban unos gemidos leves y el agarraba mis senos de una forma desesperante para hacer que mis gemidos se vuelvan aun mayores, seguí moviendo mi cuerpo haciendo presión sobre su erección, hasta que dijo que se iba a correr, cuando escuche que lo menciono, me baje de encima y comencé a besar su erección de una forma intensa y brusca hasta que se corrió en mi boca, fue súper placentero tener el miembro de mi novio dentro de mí y en mi boca tener todo lo que tenía para darme, esta vez le pusimos más ganas que nunca.

Aunque después de terminar todo comencé a compararlo con todo lo que también hice con Javi, con el solo me interesa el sexo, quizás si lo haga mejor ¿Acaso soy una depravada sexual?, siempre creí que tuve que visitar un psicólogo para esa situación, aunque después de todo me gustaba todo en realidad.

Ese día cuando volví a casa me di cuenta que estaba haciendo mi vida un desastre y necesitaba hacer algo con todo lo que sucedía, así que intente poner algunas cosas en práctica, como distraer mi mente en otras cosas y buscar una forma de no pensar tanto en coger, quizás también menos contacto con Javi y demás, tenía que pensar más en mí y en mi vida.