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Comenten porfis. Recuerden que es una época pasada y un tanto estúpida en algunos temas.

Intenten no morir.





















¿Taehyung está siempre por todos lados?

Quiero decir. A cualquier lugar que miro está allí. Aunque bueno, quizá yo le busco sin querer.

Últimamente me causaba mucha curiosidad. Muchas chicas admitian tener un severo enamoramiento por el castañito.

-¡Jungkook! - me llamaron.

Miré a mis compañeros de equipo mientras recibía el balón de americano.

La razón de mi distracción era que Taehyung estaba ahí con las porristas, ellas bromeando con el. Con sus faldas a la altura de la rodilla.

Si. Arriba. Y sin mangas. Quizá eran muy descaradas.

Quizás por eso Taehyung está allí, quiero decir. ¿Quién no querría estar mirando a las chicas?

Rayos. Yo.

No estaba distraído mirándolas.

Rodé los ojos al darme cuenta de que le prestaba demasiada atención a un castañito rebelde y yo seguía sin conseguir pareja.

El entrenamiento no acabó mucho después. Mis amigos fueron con las chicas animadoras.

Yo sólo quería ir a casa, aunque quizá pasaba a algún Diner por algunas patatas fritas o hamburguesas. Suena bien.

Caminó hacia los vestidores. Para dejar mi jersey del equipo y ponerme la mía a rayas negras y blancas.

Me miré en el pequeño espejo que tenía en mi casillero y acomodé mis cabellos hacia atrás.

Dios, soy todo un galán.

Me guiñé el ojo, antes de salir hacia mí motocicleta.

Pero en el camino escuché un par de gritos.

Pude observar en uno de los pasillos de salida a Taehyung, si, de nuevo, recibiendo gritos de ou.

El pelinaranja.

Taehyung le miraba tal como veía a los maestros cuando le llamaban la atención. Con aburrimiento.

Yo seguí mi camino, no voy a meterme en algo como eso.

-¡vete al diablo Park! - escuché. Y luego oí pasos hacia mí apresurados.

-Oh no. - me dije a mi mismo.

-Jeon. - me llamó.

Me giré a verle. - ¿Qué onda? -

- Hola ah... ¿Puedo acompañarte a la salida? - me preguntó abrazándose a si mismo.

Asentí. - si, bueno, voy por mi moto. - dije caminando hacia allá.

El simplemente me siguió en silencio. Mirando de vez en cuando atrás.

Era incómodo porque Kim, estaba callado. Comúnmente habla de cosas raras, o de las chicas. Y yo medio le escucho y medio me pregunto cómo puede tener el cabello en la cara sin que le moleste.

Pero ahora no hablaba sólo miraba al suelo mientras salía.

Llegamos a mi moto y le miré.

-Hey. Me voy. - le dije sin más.

El asintió antes de caminar fuera del estacionamiento.

Siemore lo veía irse con algunas amigas o autos de los de tercero. Y ahora iba caminando.

T.O.W.I.L. Desire Of Freedom.    Donde viven las historias. Descúbrelo ahora