Diferentes Pero Iguales - Flamantha

26. Galletas

Narra Samantha

Los dos empezamos a comer la comida que había preparado su hermana, de primero había crema de verduras y de segundo un filete de carne con patatas.

El principio de la comida fue un poco incómodo, los dos estábamos callados.

- Esta muy rico - dije para romper el silencio incómodo

- Si, mi hermana cocina muy bien

- ¿Y tu sabes cocinar? - pregunté

- Si, bueno más o menos, ¿y tú?

- No lo sé, nunca he cocinado, en mi casa me lo tienen prohibido, dicen que les quemaría la cocina, no se fían - Flavio se río - pero yo quiero aprender

- Si quieres te puedo enseñar a hacer unas galletas

- Si, por favor - dije ilusionada

- Vale, pues después de comer te enseño a hacerlas

Terminamos de comer tranquilamente y nos pusimos a ello.

- Primero hay que coger los ingredientes, coge la harina de ese armario de ahí Sam - dijo mientras sacaba el bol de otro

- Vale

Una vez sacamos todos los ingredientes empezamos a preparar las galletas.

- ¿Abro el paquete de harina? - le pregunté

- Si, pero ten cuidado y no te llenes de harina

- Que si, ya verás

Abrí el paquete de harina con todo el cuidado que tuve y lo pude abrir sin tirar nada.

- Vale, ahora echa un poco en este bol - me dijo

- ¿cuánto? - pregunté

- No sé exacto, cuando yo te diga paras

- Vale

Eché la harina en el bol, y se me cayó un poco al suelo.

- ¡Sam!

- Lo siento - dije riendo - luego lo limpio

No me di cuenta de que tenía la mano llena de harina y me la pasé por la cara.

- ¿Qué pasa? - le pregunté porque se estaba riendo

- Tienes la cara llena de harina - se río

Yo cogí un poco de harina y se la puse en la cara.

- ¡Oye! - dijo

- Ahora que - dije riéndome

Me cogió de la cadera y me acercó a él, y me dió un beso en la frente.

- Sabes a harina - me dijo

- Normal es que tengo harina en la cara - me reí

Los dos nos limpiamos la cara y seguimos haciendo las galletas.

- ¿Y no le ponemos miel? - le pregunté

- No hace falta

- Pero es que yo quiero que tengan miel - le dije poniendo un puchero

- Bueno, si tu quieres le ponemos - dijo tocándome la nariz como si fuera un timbre, yo automáticamente sonreí

Terminamos de hacer la masa e hicimos las formas de las galletas.

- Bueno, ahora hay que meterlas al horno - me dijo

- Vale - dije mientras las colocaba y ponía el horno

Mientras tanto yo me senté en la encimera.

- Sam - me llamó

- ¿Qué?

- La encimera no es para sentarse en ella bebé

- ¿me has llamado bebé?

- Si bueno...

- Me encanta - le dije cortándolo

- Ven quiero un abrazo - le dije estirando los brazos

- Bájate primero de la encimera

- No quiero, quiero un abrazo

- Vale pero luego te bajas

- Vale - respondí feliz

Se acercó a mi y lo rodeé con mis brazos, lo abracé durante unos minutos y luego me separé para darle un beso.

Él me separó de la encimera y me cogió en cuello.

- ¡Soy un Koala! - dije

- Si, un Koala precioso - me dijo plantándome otro beso en mis labios

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Hola,
Bueno este es el segundo capítulo de hoy, falta otro.

De los tres de hoy este es mi favorito.