46. Las luces

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Narra Samantha

Después de que bajaran todos nos dirigimos al centro de Ceuta.

Al contrario que el día anterior no hacía tanto frío.

Estuvimos paseando un buen rato, y cuando empezó a anochecer las luces de Navidad se encendieron.

Eran muy bonitas, algunas eran pequeñas, grandes, sencillas, complejas...

En una plaza había un gran árbol de Navidad lleno de luces.

- Ala, como mola - dije flipando

- Es muy bonito - dijo Anaju - ¿Nos hacemos fotos?

- Si - dijeron los demás

Nos fuimos turnando para hacernos fotos en el árbol.

- Ven, Fla, quiero una foto contigo delante del árbol

Anaju nos hizo la foto, la verdad es que quedó muy guay.

Luego pedimos a una persona que pasaba por ahí que nos hiciera una a todos.

Después de ver las luces fuimos a cenar por ahí.

Gèrard nos llevó a un restaurante de la zona.

Yo me senté al lado de Flavio y de Anaju.

- ¿Qué quieres comer bebé? - me preguntó cogiendo la carta

- Ay no sé

Finalmente como no teníamos mucha hambre cogimos cosas sencillas para picar entre todos.

- ¿Queréis postre? - nos preguntó el camarero

- Yo si - dijo Nia - un flan porfavor

- ¿Tu quieres Fla? - le pregunté

- Si, pero solo que igual no lo acabo

- ¿Uno para los dos? - le pregunté

- Vale, ¿qué quieres?

- Me da igual lo que quieras

- ¿Tarta de chocolate?

- Perfecto

Nos trajeron los postres y empezamos a comerlos.

- Solo hay una cuchara - le dije

- Da igual, comemos con la misma

- Vale

Nos fuimos turnando la cuchara para comer el trozo de tarta.

- Estoy lleno, voy a explotar - dijo Flavio

- Ya veo - le dije acariciándole la barriga por encima de la camiseta, él automáticamente sonrió

Iba a acariciarle la barriga por dentro de la camiseta pero él me lo impidió.

- Sam - dijo cogiéndome la mano - no

- ¿por qué? - le pregunté

- Porque te estoy viendo la intención y no

- ¿y? - dije poniendo un puchero

- Ahora no, quita la mano o me enfado

- Oye Fla

- No, ni Fla ni nada

- ¿Te has enfadado? - le pregunté pero él me ignoró

Después de pagar volvimos a casa, Flavio fue directo a la habitación, yo lo seguí.

Aunque fuera de los dos piqué igualmente.

- Flavio

- ¿Qué? - en ese momento abrí la puerta

- ¿Qué te pasa? - dije acercándome a él, pero él se alejó

- Déjame

- Flavio, enserio

- No quiero hablar

- Bueno vale, me voy a dormir con Anaju - dije saliendo de la habitación y cerrando la puerta

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Hola,
Espero que os esté gustando la historia.

Muchas gracias por los 16k en lecturas.

Mañana más.

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