Diferentes Pero Iguales - Flamantha

49. Vuelta a casa

Narra Samantha

El viaje de vuelta fue bastante entretenido, me había tocado al lado de Anaju y le estuve contando todo lo que había pasado esos días que habíamos estado en Ceuta entre Flavio y yo.

Después nos pusimos a ver una película que había en el avión.

Una vez bajamos de este me despedí de todos, Flavio incluido, ya que mi hermana venía a buscarme.

- Adiós - dije dándole un abrazo y beso en la boca

- Adiós, te he guardado algo en la maleta

- ¿el qué? - le pregunté

- Ya verás, mira tú hermana ya está ahí - dijo señalando el banco en el que ella se encontraba

Me alejé de ellos y fui hacia mi hermana corriendo para darle un abrazo.

- Tata

- Hola Sam, ¿qué tal lo has pasado? - me preguntó

- Muy bien, luego te tengo que contar cosas

- Vale, trae te llevo la maleta

- Gracias

Salimos del aeropuerto y fuimos hasta su coche.

- Bueno, ¿tienes todo no? - me preguntó antes de arrancar

- Si

En ese momento alguien picó en el cristal.

Me giré y era Flavio, bajé la ventanilla.

- Hola, ¿me podéis llevar a casa porfa?, es que Bea no puede venir

- Claro - dijo Débora - sin problema

- Vale gracias

- Sam - me dijo mi hermana - vete atrás con él si quieres

Me fui a los asientos de atrás con él y mi hermana empezó a conducir.

Él estaba sentado en el asiento de la derecha y yo en el del medio.

El viaje era corto, eran cinco minutos escasos.

Flavio puso su mano en mi rodilla, yo sonreí y cogí su mano entrelazando así mis dedos con los suyos.

- ¿Qué es lo que me dijiste antes? - le pregunté

- Ah, ya lo verás

- Anda dímelo - dije apoyando mi cabeza en su hombro - porfa

En la parte delantera del coche se oyó una pequeña carcajada por parte de mi hermana.

- ¡Débora, de qué te ríes! - dije indignada

Pero ella no me contestó.

Llegamos a la casa de Flavio y se fue.

Finalmente dos minutos después llegamos a casa.

Mi hermana aparcó y las dos bajamos.

- ¡Samantha cariño! - dijo mi madre desde la puerta de casa

- ¡Mamá! - dije corriendo a abrazarla

- ¿Qué tal lo pasaste?

- Muy bien - dije entrando en casa

- ¡Samantha!

- ¡Papá!

Después de estar un rato hablando con mis padres y con mi hermana subí a mi habitación con la maleta.

Abrí la maleta para buscar lo que me había puesto.

Había guardado una sudadera suya, la amarilla, esa sudadera con la que él había ido el primer día de clase, el día que nos conocimos.

Cogí la sudadera y de ella cayó una nota.

La sudadera olía a él, automáticamente me la puse.

Cogí la nota y empecé a leerla.

Hola Sammy,
Para empezar, te lo escribo aquí porque si te lo hubiera dicho en persona los demás me hubieran oído y también querrían venir, y por el móvil me pareció cutre y me hacía ilusión escribirlo así.
¿Quieres venir mañana a la pista de hielo conmigo?
Flavio

___________________________________________

Hola,
Espero que os este gustado el fanfic, ya no queda nada para que se acabe.

Muchísimas gracias por el apoyo de verdad.