Manipulador, codicioso, envidioso, posesivo, perverso...
Miles es un chico que está dispuesto a lograr sus objetivos, principalmente llegar a ser una gran estrella de Hollywood... Aunque no de la manera correcta.
Un joven que parece inofensivo... pe...
Malena miró frente a frente a Miles, y le dijo llorando que había escuchado todo lo que él y Alana hablaron.
- ¿Por qué Miles? ¿Por qué me hiciste esto? - preguntó Malena - ¿Acaso nuestro amor no era más que suficiente para ti?
- Malena...
- Dime la verdad Miles, dímelo - decía Malena limpiándose las lágrimas.
- Meses antes de terminar la universidad, yo estaba desesperado por encontrar una solución para salir aprobado, no me quedó de otra que seducir a Alana - dijo Miles serio.
- ¿Esa es tu excusa? ¿Una nota aprobatoria? Pensé que yo era importante para ti Miles... Y lo que hiciste fue muy bajo - decía ella.
- No... Pero tú eres importante para mí Malena, te lo he dicho varias veces - dijo Miles queriendo tomar a Malena de las manos pero ella no se dejaba.
- No puedo creer que me hicieras esto, yo que siempre te defendía, de mi mamá, de Rose, ¡De Adam! Y todos tenían razón al decirme que tú eras peligroso - decía con dolor mientras Miles estaba callado.
- Pensé que podías ser diferente, pero resultaste ser como esos chicos infieles - Malena trataba de irse pero Miles no la dejaba.
- Mi amor, por favor perdóname - decía Miles intentando detener a Malena.
- ¡No Miles! Usaste a la subdirectora, me engañaste a mí, ¿Y todo para qué? Sólo pensaste en ti mismo, ¡Ni siquiera te detuviste a pensar lo que yo iba a sentir! - decía Malena.
- ¡Tan sólo fueron unos cuántos meses!
- ¡Es lo mismo! Un engaño es un engaño... Me cansé Miles... No quiero verte otra vez - dijo Malena saliendo de la casa de Miles.
Miles se quedó mudo, caminó por toda la casa, ya en su cuarto empezó a lanzar las cosas, destrozando cada objeto de la rabia. Y en ese momento agarró su celular y llamó a Matthew, para que viniera a verlo. Y también decidió vengarse de alguien.
- Alana tiene que pagar... Ella es la culpable - decía frustrado.
Miles tenía en sus manos el número de teléfono del esposo de Alana, se preparó para todo. Miles envió el video al esposo, creía que Alana era la culpable de su rompimiento con Malena, así que decidió vengarse.
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Horas más tarde la madre de Malena, Lysa, llegó a su casa y encontró a su hija en su cuarto llorando.
- Hijita por qué lloras, que tienes dime... - decía la madre.
- Mamá... Tenías razón... Descubrí que Miles me engañaba - dijo Malena.
Lysa abrazaba a su hija, en el fondo se le hervía la sangre de rabia hacia Miles.
- Hija tienes que ser fuerte. Tú tienes un futuro por delante, ya verás que más adelante estarás mejor, Miles no se merece que tú llores por él, y ahora si, olvídalo Malena... Olvídalo - dijo Lysa.
