Capítulo 10 : "Posesivo"

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— Te lo quitas y te pones otra cosa...— dijo Miles mirando serio a Malena.

Ella se asustó con su actitud.

— Miles, Rose me regaló este vestido, lo iba a estrenar hoy — le explicaba Malena.

— Lo siento, pero no permitiré que salgas así, ¿Qué te pasa? Eres mi novia no quiero que otro hombre te vea, que te vaya a faltar el respeto — dijo Miles molesto.

Malena cedió, se cambió de atuendo, un poco triste y confundida. Ella se puso pantalones y una chaqueta para no mostrar tanto.

— Así está mejor, ahora puedes irte, que te diviertas mi amor, te espero para dormir juntos — dijo Miles dándole un beso.

Malena salió, y se encontró con Rose quien la esperaba en un parque.

— ¿Y el vestido que te regalé? — preguntó Rose.

— Lo siento, Miles no permitió que saliera con el vestido — dijo Malena apenada.

— Y por qué tiene que decirte que usar, ¡No señor! ¡Él no tiene ese derecho! — hablaba Rose molesta.

— Es que es muy celoso, no soporta que otros chicos me vean — decía Malena.

— Amiga, no permitas que te domine, te dije que Miles parece ser un chico diferente... Pero en el fondo es el mismo posesivo y manipulador, no caigas otra vez — le aconsejó Rose.

Pasaron los días, y Malena se daba cuenta de que poco a poco, Miles la controlaba, le calificaba la ropa que iba usar, a dónde iba ir, con quién... Miles la llamaba cuándo estaba en la calle. Y si no respondía se iba a su apartamento a esperarla.

— Mi amor... No creo que debas vigilarme tan seguido — decía Malena.

— ¿Por qué? No estoy haciendo nada malo. A partir de ahora si quieres salir me tienes que avisar inmediatamente, es más... Vas a tener que regresar más temprano, no importa con quien estés — dijo Miles seriamente.

— Amor pero tú nunca me...

— Es mi última palabra... Eres mi novia, ya no es lo mismo, tengo que poner las reglas — dijo Miles.

— ¡No es justo que me prives de mi libertad! — levantó la voz Malena.

— ¡Basta! Ya lo dije — habló Miles retirándose del apartamento.

Malena se sentó en el suelo, comenzó a pensar en lo que vivió con Miles, recordó el pasado... Se había dado cuenta de que Miles la controlaba cada vez más, antes no era así, comenzaba a sentir que Miles en vez de estar enamorado de ella... Estaba obsesionado o se estaba volviendo obsesivo.

— ¿Dios mío que hago? — se preguntaba Malena, frustrada

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— ¿Dios mío que hago? — se preguntaba Malena, frustrada.

Los días pasaron... Miles seguía trabajando con Charlie en la película. Todos unos profesionales ante las cámaras, pero detrás... Casi siempre discutían en el camerino.

The Bad Boy ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora