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Maratón 1/3
Valentín

—Kiara. —suspiré y caminé atrás de ella. Entré a su pieza y estaba sentada en su cama jugando con sus manos —Eu, amor. —me agaché quedando a su altura, y tomé su cara entre mis manos —¿Me mirás?. —se mordió los labios evitando llorar, odia que la vean llorar, ya sea la persona más cercana a ella.

Me miró.

—Bebé. —volví a hablar, ella se dedicaba a mirar hacia atrás —Ey, Kiari. —me miró y alzó las cejas para que hable —¿Estás bien?. —media estúpida la pregunta. Asintió.

—Sí, Valen. —se paró, dejándome colgado, se quedó mirando el acolchado que cubría su cama. Suspiré.

—¿Podés hablar conmigo?. Siempre te escapás, necesito que me digas que te pasa y que haya comunicación, sino nuestra relación no avanza. —se dio vuelta y me miró, estaba roja, no sé si era porque tenía ganas de llorar o estaba enojada. Puede ser una combinación de las dos.

—¿Qué querés que te diga?. —alcé los hombros y ella giró los ojos.

—Quiero que me digas cómo te sentís, o qué te pasa, te hace peor si te guardás todo lo que sentís, algún día vas a explotar por guardarte tantas cosas adentro, amor.

Suspiró.

—Valen, te juro que trato de entenderte, o sea, te chapaste a Dani y algo me incomodó, no te voy a decir que no, porque fue raro, como siempre los jodo con que podrían ser algo, y no solamente yo, sino que también los chicos, pero de todas maneras ignoré esa sensación. Y además como me dijiste que estaban en pedo, supuse que sí había sido un error, pero recién te fui a buscar y te encuentro diciéndole "hermoso" o "lindo"... —habló haciendo movimientos exagerados con las manos —...Y te juro que no me molestaría porque yo también hablo así con mis amigas, pero si te lo chapás, ¿Qué me queda pensar a mí que no me vas a dejar?, pero si sentís algo por Dani, decímelo no me estés con vueltas, porque me siento como el orto. Porque si no estás conmigo, siempre me va a gustar verte feliz y más con mi amigo, Valen. —suspiró, juntó sus manos y las dejó colgando. Nunca había hablado tanto sobre un tema.

Básicamente estamos escasos de palabras en nuestro noviazgo.

—Yo...—no sabía qué responderle, siempre el que más hablaba de un tema serio, era yo.

—¿No me vas a decir nada?. —estiró las manos, y alzó las cejas esperando mi respuesta.

—Bueno, es que... Nada, no sé que interpretaste cuando escuchaste la conversación, pero no es lo que parece. —frunció los labios —Yo te quiero a vos, Kiari, ¿sí?. —asintió.

—Yo también te quiero, Valen. —me sonrió levemente y miró el piso.

—Amor. —la llamé, pero no capté su atención —Bebé, eu. —le agarré las mejillas, como se me había hecho costumbre cada vez que quería que me mire —Yo te quiero a vos, solamente estoy interesado en vos, vos tenés mi corazoncito. —traté de sincerarme y aunque hasta a mí me sonó convincente, sentí que algo no me cerraba. —Y lo que le decía a Dani era para incomodarlo, si sabés lo jodón que soy, y a Dani le incomoda que le diga esas cosas. Amor, yo te amo a vos. —asintió y me abrazó por la cintura.

—Perdón, Valen. No sé porqué desconfié de vos, pero a veces me agarran esas inseguridades espantosas, y siento que me vas a dejar y te vas a ir con la primer persona que se cruce. —largó un suspiro entrecortado, aguantando el llanto.

—No tenés competencia, no hay nadie que te compare. Nadie te llega a los talones. —me corregí, y sentí como me presionó más hacia ella.

—Te amo mucho, Valen. Te lo digo de corazón. —alejó su cabeza de mi pecho para mirarme a los ojos. Los tenía brillosos, tenía ganas de llorar. Se me estrujó el pecho.

Dejé un pico en sus labios, no le pude responder, no sentía que tenía que devolverle el "te amo", porque sentía que me estaba obligando, y eso me tiene que salir natural.

Suspiré.

Ni yo me entiendo a veces, trato de saber que pasa pero hay momentos que no puedo dominarme.

—¿Tomamos unos mates?. Así ya me empiezo a arreglar después. —fruncí el ceño —¿Vas no? —se dirigió a la cocina y la seguí —Los chicos ya confirmaron que van. —asentí.

—Voy, voy. —preparé el mate, mientras ella ponía el agua —¿Tengo ropa acá? —la miré —Para cambiarme. —aclaré. Asintió.

—Sí, creo.—se paró y fue directo al bajo mesada y sacó pan, dejando atrás su hipótesis sobre mi ropa —¿Pintan unas tostadas?. —me señaló el pan. Asentí.

Se puso a hacer las tostadas y sacó el agua, puse el apoya pava sobre la mesa, para que no se queme y empecé a cebar mates, mientras ella terminaba de hacer las tostadas.

Pusimos música y pasamos media hora cantando, comiendo y tomando mates.

—Me voy a bañar. —avisó y dejó un beso en mi frente —¿Podés levantar?. —señaló las cosas sobre la mesa.

—Sí, de ahí me entro yo a bañar. —me respondió un "bueno" y se fue tarareando una canción que no conocía.

Levanté el plato donde estaban las tostadas, tiré las migas y lo dejé en la bacha, tiré la yerba del mate y lo dejé en la mesada, no me gusta lavar el mate. Después de lavar el plato, le pasé un trapo a la mesa. Saqué la música.

Me fui a la pieza de Kiara y me acosté en su cama hasta que sentí que el agua de la ducha dejó de sonar, a los minutos apareció con una toalla con el cabeza y otra que le cubría el cuerpo, traía el celular en la mano y con las mismas hacía un baile siguiendo el ritmo de la canción.

—Pero que linda que sos. —le tiré un beso y me sonrió.

—Andá a bañarte sucio. —me levanté y me dirigí al baño, pero antes de que saliera de su pieza habló —Ahora te llevo un toallón. —asentí aunque no me vio.

Me desvestí y entré a la ducha, estaba un poco tibia el agua, tendría que haber esperado un poco más para que se calentara. Traté de bañarme rápido y cuando ya estaba por terminar, sentí como se abrió la puerta y después de unos segundos se cerró.

Me enredé la toalla en la cadera y salí para la pieza de Kiara.

—¿Tengo algún bóxer?. —la miré y se estaba poniendo una pollera, estaba en corpiño.

—Fijate en el placard, amor. —asentí y me dirigí hacia este. Encontré tres boxers que no veía hace mucho y después saqué un pantalón y una remera.

—Tengo casi toda mi ropa acá. —jodí, me fui a su cama y ahí dejé la ropa. Me saqué la toalla y me empecé a secar el cuerpo, para después vestirme.

—¿Queda bien ésta remera o te gusta más la otra?. —las miré, eran parecidas pero de distinto color, una era roja y otra era blanca.

—Esa. —señalé la blanca. Asintió y se la puso, después de eso se fue al espejo a maquillarse, se puso rímel —¿Te puedo poner el labial?. —asintió y me dio uno rojo, intenté ser lo más prolijo que pude, antes ya la había pintado, pero me sigue costando —¿Ahí?. —le pregunté cuando terminé. Se miró al espejo y asintió.

—Te quedó perfecto, bebé. —se acercó y dejó un pico chiquito, y después me limpió el labial que me había dejado —¿Vamos?. —asentí














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BUENASSSS, ¿todo bien?

Che, disculpen por no subir nada, pero se me terminaron las vacaciones y me empezaron a mandar trabajos je

¿Sale maratón?👀👀

Siento que estoy haciendo puro relleno, ya

𝖈𝖍𝖆𝖏á🦅 𝖜𝖔𝖘𝖆𝖓𝖎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora