Daylight [H.S]

Capítulo 14

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Maia

La primer pelea de Harry había sido toda una  victoria para él, sin embargo, no lo veía tan feliz como esperaba. La idea de que Harry se gane la vida a través de peleas clandestinas no era la que más me convencía y me asustaba el hecho de haberlo visto tan cómodo arriba del cuadrilátero, no sólo estaba cómodo, sino que en su rostro se veía satisfacción y agrado por lo que estaba haciendo. Aún faltaban unas manzanas para llegar al apartamento y Harry no había soltado una palabra, ni siquiera me estaba tomando de la mano. Sabía que antes de llegar a la pelea estaba algo cabreado, sin embargo supuse que luego del beso se había relajado, pero parece ser que no. Las calles continuaban iluminadas pero la gente que caminaba sobre ellas se había reducido al mínimo de Harry y yo, dejándonos solos en la avenida. El silencio con Harry solía ser algo que disfrutaba, en realidad disfrutaba el silencio que me permitía apreciar el momento en que estaba con él, pero este silencio no era ese silencio, comenzaba a sentirme incómoda, "¿Que pasa?" Cuando comenzó a hacerse visible el edificio a mitad de calle llevé mi mano a los bolsillos de mi abrigo en busca de las llaves.

"No quiero hablar." Alcé mis cejas sorprendida ante su frialdad.

Paré en seco, en el medio de la acera, "¿Y eso por qué?"

Me crucé de brazos y Harry volteó su cuerpo, dándose cuenta de que había detenido mis pasos, "Porque no quiero y ya, ¿Te mueves?" Señaló con su cabeza en dirección al apartamento pero no me moví, impresionada ante su trato, "Son las cuatro de la madrugada, mañana debes trabajar," Su intento de apresurarme falló.

Me encogí de hombros, "Esta semana aún trabajaré por la tarde," Era verdad, ésta era mi última semana trabajando por la tarde, como ya no debía asistir a la universidad por la mañana, comenzaría a trabajar en ese horario, sin embargo eso pasaría recién en la próxima semana, Harry resopló y levanté una de mis cejas, "¿Que te pasa Harry? Has ganado tu primer pelea y llevas un humor de perro," Susurré la última parte cuando observé que el verde de sus ojos comenzaba a oscurecerse.

"¡He ganado la pelea pero observa mi rostro!" Exclamó, provocando que su voz haga eco en cada rincón de los edificios que nos rodeaban, mientras señalaba su rostro con su dedo índice, "¿Debería tener golpes en él? Si, ¿Debería tener la cantidad que tengo? ¡No!" Exclamó nuevamente y tragué con fuerza notando que comenzaba a dificultarse, "Sabías que era mi primer pelea," En unas pocas zancadas se acercó a mi quedándose a escasos milímetros de mi cuerpo, "Sabías que quería rendir lo mejor que pudiera y sin embargo decidiste ir," Fruncí el ceño, poniendo mis brazos en jarra y abriendo la boca lista para quejarme pero Harry no me lo permitió, "Decidiste ir, teniendo que caminar por la calle en plena madrugada, metiéndote en un callejón y en el círculo completamente colapsado de gente, mejor dicho de borrachos,"

"Pero estabas tu, además de Alex," Susurré y el negó con la cabeza.

"¡Ese es el problema!" Soltó ambas manos en el aire, "No te detuviste a pensar que yo ya tenía suficiente en mi cabeza, ¡Por el amor de dios!" Exclamó, "¡Debía ganarle a alguien que tiene dos años más de experiencia que yo! Ya estaba lo suficientemente preocupado como para que tú no te detengas a pensar en eso y decidas ir, entregándome una responsabilidad más," Mis labios se separaron provocando que abra mi boca mientras alzaba mis cejas.

"¿Una responsabilidad más?" Harry cerro los ojos respirando profundamente, "Soy muy capaz de cuidarme sola."

Volvió a abrir sus ojos inmediatamente, "¿Estás segura?" Podía notar en sus ojos que tan cabreado estaba, "Te di toda la explicación de por qué no deberías haber ido y lo primero que dijiste fue 'estabas tú'" Imitó mis palabras y no dije nada, sabía que tenía razón, no me detuve a pensar en él, en si estaría preocupado por mí o no, sólo pensé en que yo estaría preocupada si me quedaba sola en el apartamento así que decidí acompañarlo, calmando mi preocupación pero avivando la de él, relajé mis brazos y abrí mi boca para disculparme pero fue tarde cuando Harry volteó y comenzó a caminar nuevamente en dirección al apartamento de manera rápida.

Resoplé luego de cerrar la puerta del apartamento detrás de mí, me quité el abrigo y observé a Harry hacer lo mismo, mostrándome su espalda, puse mis ojos en blanco cuando noté que comenzó a caminar en dirección a la habitación, "¿Mañana haremos como si nada, como si nunca te hubieras cabreado?" Me preguntaba si era el dolor de cabeza o mi lado estúpido al que se le ocurría seguir hablando.

Abrí los ojos como platos al darme cuenta de que no sólo hice que Harry detuviera el paso sino que provoqué que volteé y de pasos rápidos y agigantados en mi dirección. Antes de poder darme cuenta mi espalda chocó contra la puerta del apartamento y Harry sostuvo con ambas manos mis muñecas por encima de mi cabeza, "¿Qué es lo que quieres? ¿Seguir discutiendo ahora?" La vena de su frente parecía estar por explotar y sus ojos seguían igual de oscuros que cuando estábamos en la calle, negué con la cabeza y observé como en segundos su mirada cayó a mis labios, "Siento que si quieres eso," Susurró sin mover sus ojos y tragué fuertemente. Creo que en mi cabeza parecieron más segundos de los que en realidad pasaron entre que Harry susurró esas palabras y yo, aún con mis muñecas apretadas por él, estiré mi cabeza en busca de sus labios. Su lengua abrió paso entre mis labios en busca de la mía, sentí que mis muñecas se liberaron de su agarre y que sus manos pasaron de ellas a mis muslos, agachándose lo necesario para levantarme en el aire y pegarme contra él, mis mulsos como de costumbre se enroscaron en su cadera y mis brazos en su cuello, pude sentir que comenzaba a caminar pero no tuve la necesidad de abrir los ojos ni de separar mi boca de la suya, "Mierda," Gimió él produciendo una vibración en mi boca antes de dejarme caer en el colchón. Harry se encargó de desvestirnos por completo a ambos en menos de diez segundos, me entregó una sonrisa algo pícara y sin preguntarme ni dudar sus manos cálidas se posaron en mis pechos comenzando a jugar con mis pezones, inevitablemente jadeé y Harry inclinó su cabeza escondiéndola en la curva de mi cuello. Sus manos comenzaron a bajar y parecía como si la yema de sus dedos estuvieran cargadas con corriente, dejando una sensación de electricidad en el trazo desde mis pechos hasta mi cintura, presionó mi cuerpo, provocando que lo pegue por completo contra el colchón. Sentía que aún estaba enfadado conmigo pero no iba a decir ni una sola palabra sobre el tema, mucho menos luego de sentir como tiró de mi con brusquedad, provocando que mi espalda se arrastre hasta el borde contra el colchón dejando mis muslos colgando de el, se incorporó y separó mis piernas con su rodilla, mi pulso comenzaba a acelerarse y aún desde aquí podía escuchar la fuerte y profunda respiración de Harry.

No pude soportar y dejé caer mi cabeza contra el colchón cuando sentí la yema de los dedos de Harry acariciar mi centro, "Harry," Gemí y se acercó a mi sonriéndo y besó mis labios. Aún con sus dedos en mi centro despegó su boca de la mía para comenzar a crear un trazo recto con su lengua por mi cuerpo, comenzando por mi cuello, de manera inconsciente levanté mis caderas con la necesidad de que haga algo más que solo rozar sus dedos, sentí su risa vibrar en mi piel y como empezó a bajar por mi cuerpo, hasta hundir su cabeza entre mis muslos. Como por instinto lleve mis manos a su cabello, atrapándolo entre mis dedos y tirando de él, ganándome un gruñido de Harry, frunció sus labios y succionó una y otra vez, moviendo su cálida lengua a un rítmo perfecto, mi vista empezaba a nublarse y cuando comencé a sentir que el nudo en mi abdomen era cada vez más fuerte Harry se detuvo por completo, separando la totalidad de su cuerpo del mío, "¿Que haces?" Exclamé con mis ojos sumamente abiertos, sintiendo una ola de frustración invadir mi cuerpo.

"Te devuelvo lo que hiciste conmigo," Fruncí el ceño.

"Harry, no es lo mismo," Me quejé, no podía estar metiendo nuestra discusión en esto.

Trague fuertemente, "Es una pena," Susurró y no podía creer que estaba haciendo esto. Tuve la necesidad de contener la respiración ante la sorpresa que me dieron sus dedos bruscos trazando una linea hacia arriba y hacia abajo entre mis pliegues, gemí y apreté mis manos, "Estás tan mojada, verdaderamente es una pena no aprovechar esto," Aunque sus dedos eran maravillosos no pude evitar resoplar ante la frustración, sin embargo mi ceño fruncido desapareció cuando Harry sonrió.

En un movimiento demasiado rápido levantó mi cuerpo por mi cintura, logrando que vuelva a enroscar mis muslos en su cadera nuevamente, se inclinó hacia delante y entró en mi sin previo aviso. Apoyó una de sus manos en mi muslo y la otra junto a mi cabeza, haciendo fuerza para no dejar caer todo su peso en mi, me penetró una y otra vez, para mi sorpresa mis piernas comenzaron a temblar mucho antes de lo previsto y culpaba a sus movimientos, que eran firmes, duros y secos, confirmando la teoría de que estaba descargando todo su enojo en este preciso momento, sin embargo sonreí en su cuello cuando él susurró en mi oído, "Te amo."