𝙼é𝚝𝚘𝚍𝚘 𝚄𝚌𝚑𝚒𝚑𝚊 . |𝑆𝑎𝑠𝑢𝑘𝑒 𝑈𝑐ℎ𝑖ℎ𝑎|

♛11♛

—¿Qué te hace pensar que eres mejor que yo? —se burla Suzuna. Shisui le regala una sonrisa encantadora.

—Porque conozco tu punto débil, y eso, Suzu, es suficiente para ganar.

—¿Ajá? ¿Y cuál es mi punto débil según tú?

Shisui la abraza a su persona.

—Nosotros los Uchihas.

Una punzada de dolor se instaló en su cabeza, no quería abrir los ojos pero escuchaba a mucha gente por ahí, se vio obligada a despertar. Al inicio su mirada no enfocó nada, veía borroso, parpadeó un par de veces hasta lograr la claridad. Entonces reconoció al trío famoso, alumnos de Kakashi.

—¡Ya cállate Naruto, estás en un hospital! —Sakura golpea a Naruto y éste sale volando. Sasuke estaba apartado de ellos, junto a la cama tomando la mano de Suzuna. Ella no pudo evitar sentirse feliz por eso.

—¿Estás bien, Sasuke? —su voz sale ronca. Sasuke voltea a verla al instante, sorprendido.

—Zuna... estás bien. —suelta el aire acumulado y presiona el agarre de sus manos.

—Claro que estoy bien... estás hablando con un Senju. —trata de burlarse cuando en verdad le dolía todo el cuerpo.

—¡Suzuna! ¡Qué genial que estés bien! —Naruto se mete casi saltando sobre la cama. —¡Eres espectacular! ¡Súper genial! ¡Sasuke nunca nos dijo que eras tan poderosa!

—No recuerdo muy bien lo que sucedió. —explica ella con timidez. Sasuke negó.

—Descansa un poco más, me quedaré aquí contigo.

—¡Pero Sasuke! Hoy es el funeral del Hokage, no puedes faltar. —insiste Sakura. Suzuna se sorprende.

—¿El Hokage...murió?

—Sí, Orochimaru lo mató. —explica Sasuke en voz baja.

Vaya, ese hombre al que toda la vida consideró nada apto para el puesto de Hokage, ahora estaba muerto y por culpa de una serpiente.

Suzuna habla. —Eh... Sasuke, puedes ir al funeral. Yo descansaré aquí.

—Me quedo contigo. —sentencia. Sakura salta al instante.

—¡Pero Sasuke, no puedes...!

—He dicho que me quedaré aquí. —interrumpe, molesto. Sakura quería decir algo más pero al final no se atrevió.

Minutos después estaban Sasuke y Suzuna solos en la enfermería sin contar a todos los heridos que estaban apartados por varias cortinas. Sasuke en ningún momento soltó su mano, todavía tenía miedo de esa vez que la vio caer desde el enorme sapo que Naruto invocó.

—¿Estás bien? —pregunta la Senju. —Te veo preocupado.

—Estoy preocupado. —afirma. —Caíste desde muy alto y para colmo, gastaste mucho chakra en ese jutsu que hiciste.

—¿No estuve genial? —sonríe burlona. Sasuke chasquea la lengua.

—No es gracioso. Estaba preocupado, ni siquiera podía moverme para salvarte. —cierra los ojos con pesar. —Sigo siendo débil... muy débil...

—No digas eso, ven. —procurando no hacer muecas que demuestren su dolor, Suzuna se movió en la camilla dejando un espacio. Sasuke no lo pensó dos veces y se subió junto a ella, abrazándola. Suzuna sonrió contra su pecho.