Multifandom One Shots.

SPN ~ |Sam Winchester|

Lexi Nelson.

-Por favor. - dijo Sam. - Sólo déjala ir. Mátame y déjala ir. 

Envió al cambia formas en la forma de Dean una mirada desesperada, sin encontrarse con los ojos de Lexi. Estaba atada a la silla, sus muñecas fuertemente atadas con cinta adhesiva a tu espalda y el arma de la criatura presionada a su sien.  

Sam tenía su propia pistola apuntando al cambia formas, apuntando a la criatura con la cara de su hermano. 

-Por favor. - dijo de nuevo. - Déjala ir y no te mataré. No iré detrás de ti y no le diré a nadie de ti. Sólo déjala ir. 

Sam tomó un respiro tembloroso mientras una lenta sonrisa se dibujaba en los labios del cambia formas. 

-¿Por favor? - La copia de Dean imitada perfectamente con un toque de desprecio en su voz.  - Tan caballeroso, Sammy. 

Sam apretó la mandíbula y Lexi mordió su labio, rogando para que no hiciera nada estúpido.  El cambia formas dio unos pasos hacia Sam, sabiendo que no le haría daño mientras el arma permanecía sobre ella. El cañón del arma ya no apuntaba a su cabeza, sino a su pecho. Perfectamente apuntado a su corazón. 

-Tan desesperado por salvar a tu novia. Tal vez te mate en su lugar. 

- Por favor. - Sam asintió. 

-Sam no. - habló bajito. Intentado asegurarse de que Sam tuviera un plan.

Las esquinas de los labios del cambia formas, los labios de Dean, se retorcieron de una forma siniestra. 

-O tal vez no. 

Lexi escuchó el clic. El clic y el disparo. El grito de Sam, la risa de Dean, luego otro disparo y el cuerpo de Dean se derrumbó en el suelo.  Fue entonces cuando Lexi sintió el dolor. El dolor como un alambre de púas al rojo vivo clavándose en su piel. Sus labios fueron forzados a abrirse para soltar un grito mientras trataba de escapar de las ataduras. Lágrimas calientes salían de sus ojos mientras miraba, como en cámara lenta, a Sam correr hacia ella. La tomó la cara y sus labios se movieron pero no pudo oír las palabras. 

-Estarás bien. Lexi, vas a estar bien. 

Sam sacó su cuchillo para cortar la cinta que envolvía las manos de Lexi. Una vez cortadas la sacó y se la puso en su regazo en el suelo. Lexi vio la cara de Sam y supo que no lo iba a logar. 

-Sam, te quiero. - susurró, poniendo su mano manchada de sangre en la cara de Sam. Estaba frio al tacto. Sam levantó su cara para encontrarse con la mirada de Lexi, ella vio como le temblaba el labio. 

-Te amo Lexi. Te amo. No me dejes. No me vas a dejar. - la sostuvo contra su pecho, sus latidos parecían tan fuertes cómo un tambor comparado con su propio ritmo debilitado. 

Lexi logró poner una sonrisa triste mientras su mano caía de la cara de Sam a su propio pecho. El cálido liquido rojo empapaba sus dedos. 

-Lo siento. Todo esto es mi culpa, nunca debí dejarte venir conmigo. Nunca debí haberte dicho que te amaba. Debí haberte mantenido a salvo, mantenerte con vida. Debí... - Sam lo dijo sin rodeos, divagando en su pánico. 

-Sam. - le calló suavemente. 

Se encontró con sus ojos de nuevo y una lágrima corrió por su mejilla. 

-Perdóname. 

-No hay nada que tenga que perdonarte. 

-Por favor, sólo dilo. 

-Te perdono, Sammy. 

Otra lágrima rodó por su mejilla, cayendo sobre la mano de Lexi. 

- Conocerte fue lo mejor que me ha pasado en la vida. - dijo ella. 

-No, no lo fue. - Sam se rio amargamente. 

-Confía en mí, Sam. - Lexi tomó su mano, apretándola suavemente.   

Sam enterró su cara en el pelo de su novia. 

-Te amo, Lexi. 

Cuando se alejó para mirar a Lexi, ella ya se había ido.