River:
-¿Por que no me dijiste que el fútbol era tan jodidamente difícil?-digo poniendo las manos en las rodillas e intentando recuperar el aliento
-Por que si no dudo mucho que te hubieras unido al equipo-Jonathan se pone a mi lado y me mira divertido.
-Esto de correr de lado a lado me marea-me limpio el sudor que me cae por la cara-Si el entrenador aún no se ha decidido sobre meterme en el equipo o no estoy bastante seguro de que no lo he impresionado-Jonathan se ríen.
-Créeme en cuanto te vea lanzar el balón flipara.
-Espero que tengas razón por que como me haga correr más me voy-digo lo más serio que puedo.
Por que no estoy bromeando, llevo corriendo de lado a lado de la pista de fútbol más de media hora y yo ya no doy más a basto.
No es que no haga ejercicio de normal, es solo que lo de correr no me va mucho, yo soy más de pesas o abdominales que de correr como un gilipollas de un lado a otro.
-Venga vamos-sigo a Jonathan hasta donde está el resto del equipo, no he hablado con muchos de los jugadores pero con los que he hablado me llevo bien por que resulta que ninguno es tan gilipollas con Thomas.
-Que me ha superado y una mierda-oigo que le dice Thomas a otro jugador mirando a las gradas-Si viene a verme entrenar es por que aún sigue queriendo algo conmigo-miro a las gradas y veo a Grace leyendo un libro.
Cuando la miro no puedo evitar sonreir, Abby está a su lado hablando con Kim y está claro que Grace no está prestando ninguna atención a la conversación que esas dos están teniendo.
-Siento romperte el corazón niño bonito pero no está aquí por ti-digo mirando a Thomas con una sonrisa.
Thomas se gira y me dedica una de sus caras de desprecio que tan poco me afectan.
-¿A si y por que ha venido?
-Por Jonathan-digo sin ni siquiera pensarlo-Por si no lo sabes son amigos.
-Jonathan lleva en el equipo años y Grace solo venía a los entrenamientos cuando estaba conmigo, así que permiteme que lo dude-Thomas se cruza de brazos.
-Es verdad River, Grace no ha venido a verme a mi-Jonathan se pone a mi lado y Thomas sonríe con chulería-Está aquí para verte a ti.
-¿Como?-dice Thomas confuso-¿Por él?
-Sip-dice Jonathan-Por fin has pasado a segundo plano Thomas, y sinceramente ya era hora por que Grace se merece algo mucho mejor.
Thomas se nos queda mirando serio, creo que es la primera vez que lo veo quedarse sin palabras y no voy a mentir me encanta.
-¡Vamos a ver que tal lanzáis el balón!-grita el entrenador, no voy a mentir no lo conozco de nada pero en solo una hora se ha ganado mi respeto, y eso es mucho decir-¡Tú, Torres!-el entrenador me lanza el balón-Demuéstrame que has mereces mi tiempo-asiento y miro a Jonathan.
-Si lanzas el balón como la última vez te prometo que lo cogeré-sonrío y asiento.
Me alejo un poco de grupo y antes de lanzar el balón miro a las gradas, veo como Grace ha dejado el libro a un lado y me está dedicando toda su atención.
Cuando nota que la estoy mirando me sonríe y por alguna razón que desconozco es toda la confianza que necesito.
Centro la vista en la pista, y cuando miro a Jonathan este asiente. Agarro el balón con fuerza y lo lanzo con todas mis fuerzas.
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Eres todo lo que no quiero, y por eso te quiero
JugendliteraturGrace Morrys siempre ha sido la niña de los ojos de papa, y la niña buena de la familia. Grace tiene 17 años y su vida es prácticamente perfecta, tiene una familia que la quiere, amigos y buenas notas ¿que mas puede pedir? ¿Amor? Puede que Grace fal...