Mélancolie! | メランコリア.

三十一 !

     " Write my own checks like I write what I sing "

Abrí mis ojos con toda la pereza apoderada de mi cuerpo, pestañeé un par de veces para ver aquel cuerpo que estaba a mi lado dormido entre mis brazos, con sus piernas enredadas en las sabanas.

Algo se removió en mi pecho y no supe que era, con cuidado acaricié la espalda del pelirosa preguntándome cómo había llegado hasta aquí voluntariamente, para mi desgracia ya no podía culpar al alcohol cuando era mi impulso el que me había traído y atado mi cuello a la soga.

Recorrí el cuarto con la mirada para recordar cómo lo había tenido entre mis brazos la noche anterior, como había memorizado sus gestos cada vez que tocaba un punto de placer en él, esto era maduro, no fue sexo y me odiaba ahora un poco más al recordar lo delicado que fue el acto.

Recordar cómo sus caderas se movían a la par de las mías y como su sedoso cabello rosa estaba esparcido con gracia mientras su cuerpo se balanceaba a un compás, era una danza de pieles desnudas, era una ligera esperanza en un hoyo negro.

Froté mi ojo con una mano tratando de reorganizar mis ideas, ¿qué se supone que debo hacer ahora? Acabo de cometer un error terrible y ni siquiera sabía porque no podía sentirme mal al respecto.
Un suspiro de parte de jimin me hizo voltear a verlo, aquella voz que me había confesado que aún me amaba mientras fingía dormir se reproducía en mi cabeza cruelmente, pero la verdad es que no sabía si podía corresponder a esos sentimientos, no siento que pueda hacerlo.

Aferré su cuerpo más al mío, quería sentirlo cerca solo un poco más, solo un rato más antes de irme, la música seguía reproduciéndose en una canción tan suave, tan tranquila que me adormilaba, quería echarle la culpa a la música porque su aroma a Chanel y a frutos rojos me estaba cegando, incluso cuando me atrape a mí mismo colocando mi nariz en sus cabellos para aspirar más de él.

Después de unos minutos me separé y coloque una almohada en mi lugar, con una mirada de tristeza volví a vestirme junto con un sentimiento de culpa por tener que regresar a la realidad y darme cuenta que esto no podía pasar.

Arreglé mis prendas y mi cabello, abrí la ventana por la que había llegado y le di un último vistazo, sus pestañas tupidas estaban más preciosas que de costumbre, su piel bien cuidada brillaba a través de esas luces acompañando ese precioso brillo de sus labios rojos. Mi pecho se oprimió de una forma en la que jamás había sentido antes.

—tal vez... —susurré sin dejar de verlo.— Tal vez en otra vida tenga la fuerza y la valentía para hacer que te quedes. —sonreí.— eres increíble Park Jimin. —Y sin más salí por aquella ventana que me había dado paso a mi propia destrucción, una vez más.

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Me levanté con una sonrisa en mi rostro al recordar todo lo que había sucedido la noche anterior, rodé mi cuerpo cuando sentí algo detrás de mí.

—buenos di...—pero me callé al ver que solo era una almohada.

Fruncí el ceño con molestia ante el sentimiento, ahora entendía lo que sentían todos aquellos hombres que se levantaban esperando tenerme a su lado. Condenado yoongi, ¿qué se cree? ¿Qué puede venir aquí a pedirme tener relaciones para que luego se vaya sin ninguna explicación? No, no se lo iba a permitir.

Me levante y cuando estaba decidido a acabar con su vida mi celular soñó con insistencia, suspire y lo tome sabiendo que era importante.

—kitty. —contesté.

—bolita rosa, te hemos estado llamando toda la noche te perdiste de la celebración —me dijo jungkook.

—tuve mi propia fiesta aquí en casa —dije abriendo los ojos minetras fruncía mis labios.