十 !

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                           " Come here rude boy
                                Can you get it up. "

—¿cómo era tu vida en el orfanato? Sé que odias que pregunte sobre eso pero me da curiosidad. —Suga estaba tomando mi mano y ambos estábamos en el balcón de nuestra casa con dos copas de vino, lindo momento para decir verdades, ¿no?

—una mierda —balbuceé.— pero no puedo quejarme cuando todo lo ha sido, hasta que te conocí. —Él me sonrió.— ¿qué hay de ti? Y de tus padres —pregunte directamente.

—supongo que mi vida no era tan mala pero de alguna forma yo sentía que no encajaba allí —se encogió de hombros.— de alguna forma ahora pienso que fue salir de allí fue una de mis mejores decisiones.

—es lindo como hemos surgido juntos, esto no le pasa a cualquiera —miré mi copa casi vacía, Él se rió un poco y colocó un poco más del vino de su copa a la mía y sentí algo revolverse, mierda lo amaba tanto.

—me estás consintiendo mucho estos días —fruncí los labios.— ¿ya te estoy conquistando?

—tal vez... quiero hacer que te quedes conmigo para siempre —acaricio mi rostro con su mano.

—ya me tienes suga —aseguré con una sonrisa.

—gatito... —bajó la mirada y se acomodó en su asiento.— ¿nunca has estado con alguien? —me preguntó vacilante.— así cómo estás conmigo. — Fruncí mis labios por la repentina pregunta y también dudé en contestar por unos segundos.

—nunca fue nada serio —terminé admitiendo.— solo besos traviesos de vez en cuando con los chicos del orfanato, pero nunca tuve lo que tengo contigo.... alguien que se preocupe realmente por mí. —Él asintió con una de sus muecas, ¿estará celoso? —¿tú has salido con alguien? —pregunté interesado en su respuesta.

—cuando iba al instituto —empezó— solía hacerlo seguido, sin importar quién era, si era hombre o mujer, me era igual —se encogió de hombros.— en el fondo creo que yo... no me sentía capaz de amar, supongo que creí que era estúpido y jamás encontré a alguien que me haga cambiar de opinión.

¿estás enamorado de mí? —pregunté con nerviosismo pero quería saber.

—sí —me miró a los ojos.— creo que eso es lo que es —suspiró.

—¿qué sientes? —entrelacé nuestros dedos.

siento como si quisiera darte todo y hacer hasta lo imposible para hacerte feliz —asintió.— como si mi pecho fuera a estallar cada vez que te veo... y cuando hacemos el amor me dan una malditas ganas de gritar tu nombre para que todo el mundo sepa que eres mío. —uh... posesivo, me gusta, Sonreí mientras mordí mi labio con ternura. —¿tú estás enamorado de mí? —preguntó.

—sí —asentí apenado por la confesión.— claro que lo estoy. —Me acomodé en su regazo sentándome en sus muslos para quedar frente a frente.—quiero darte muchos besitos ahora —dije con un puchero.— eres tan tierno hyung... y me haces tan feliz que siento que no lo merezco.

—soy yo el que siente que no merece tenerte, Jimin.

Me regalo una de esas sonrisas que hacen que sus encías se muestren... hermoso, nos besamos con cariño, la radio que había estado de fondo a nosotros comenzó a dar un flash informativo.

« ya van cuatro robos en tan solo dos semanas, ¿quiénes son estos nuevos personajes?»

Nuestro beso se intensificó, sus manos pararon en mis piernas y mis dedos se enredaron en su cuello.

Mélancolie! | メランコリア.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora