♦ LET 08 ♣

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Victoria: Lo sé Omar...- suspiré duro - el problema es que no... que mi corazón ya pertenece a otro... y no puedo decir que eso va a cambiar, porque sé que no va... lo he intentado otras veces y no he tenido éxito.

La miré y respiré hondo. Solté su mano y tomé mi vino. No iba a decir nada, no en ese momento. Tiempo después de cenar volvimos al condominio. Al entrar nos encontramos con el portero.

Portero: Buenas noches Srs - les sonreí - antes de que me olvide, ese pedido llegó para la señora hace unas semanas y como no le había visto, lo guardé aquí - le hablé entregándole una caja.

Miré a Victoria y sonreí sin querer. Entonces ella estaba con su amante allí, viviendo aquel romance. Pero yo iba a terminar con eso, ah se iba.

Victoria: Gracias...- le sonreí débil y suspiré hondo... estaba perdida... con toda certeza... muerta para ser más exacta... cogí la caja, le agradecí una vez más... caminé con Omar hasta el ascensor y luego entramos en mi apartamento.

Omar: Voy a ducharme y acostarme - besé sus cabellos y salí... la venganza vendría y sería cuando ella menos esperara, sin testigos de nada.

Está... ¿qué fue eso?... él no enloqueció ni nada!?... ahí tiene cosa... lo vi salir, me senté en el sofá pensativa y con miedo. Nunca dejó nada relacionado con César. Omar no es tonto, él ya sabe que no estuve aquí durante ese tiempo, así que será mejor que esté bien alerta.

Entré en la habitación y después de tomar un baño, me vestí y me acosté en la cama. Iría a descansar para estar bien descansado.

Miré esa caja y me maldijo por haber comprado esos libros. Suspiré y abrí la caja. Minutos después allí estaba yo en el cuarto, saliendo del baño. Me vestí y me acosté allí en la cama con calma, luego sentí a Omar abrazarme por la cintura. Era increíble que incluso con tanto tiempo lejos de él, no me perdiera esa manía. No sé bien a qué hora me desperté, pero era muy temprano. Me desperté sintiendo los besos de Omar en gran parte de mi cuerpo, respiré profundamente y gracias a Dios, él sólo quería besarme de verdad. Después de un rato se detuvo y me dejó ir a vestirme, para ir a trabajar. Lo grabé de la mejor manera posible, para que pudiera ser liberada antes y quedarme con mis hijos... lo que pasó. Era media tarde cuando salí de las grabaciones y fui para el apartamento. Llegué, subí y entré toda feliz.

Victoria: Vick... Anuar... mamá ha llegado mis amores...

Omar: Buenas tardes mi amor - sonríe entrando en la habitación - nuestros hijos no están... Lolita volvió a casa con ellos, ahora vamos a aprovechar nuestro tiempo juntos... te estaba esperando, que bueno que llegaste temprano - hablé acercándome a ella.

Victoria: ¿Qué quieres decir con que volvieron a casa con Lolita Omar?... - lo miré perdiendo la sonrisa - ellos llegaron ayer...- hablé sintiendo ganas de llorar - ¿por qué lo hizo?...- pregunté con la voz temblorosa y solté el aire de tristeza - ¿sabes que cuando estoy trabajando lejos, casi no los veo y los envías de vuelta a casa?... ¿Cuál es tu problema... grabé como loca hoy para terminar antes y vine a quedarme con ellos Omar... usted no tenía ese derecho...- hablé con rabia y levanté pegando el teléfono.

Omar: Nada de esto, mi amor - le quité el teléfono de la mano - no sólo lo tenía, como lo hice... si tienes tiempo para tu amante, tienes tiempo para tu marido - le agarré de la barbilla con rabia - como puede su maldita - la empujé en el sofá con rabia - te estás divirtiendo con tu amante, pero eso va a terminar mi amor... todo ese paraíso se va a transformar en un infierno, nuestro infierno - ríe sin voluntad.

Lo miré sacar el teléfono de mi mano y luego sostener mi barbilla. Saqué su mano de allí, pero al mismo tiempo, sentí que me empujaba en el sofá.

Victoria: ¿Estás loco Omar?...- le dije me arreglando... sabía que toda esa calma, era demasiado buena para ser verdad - para de decir tonterías Omar... puedes parar... si empiezas a lastimarme, voy a gritar y los guardias van a entrar aquí muy rápido... así que puedes parar...- dije levantando rápido y me alejando de él.

Me acerqué a ella otra vez y la sostuve en su brazo, tirándola junto a mi cuerpo.

Omar: ¿De qué tienes miedo, mi amor? - me reí mirándola - nadie se interpondrá en nuestro camino, ya me he ocupado de todo... hoy seremos tú y yo... nadie más - la besé con rabia.

Victoria: Omar... no...- dije tratando de soltarme de él - para... para por favor no lo hagas... me va a lastimar de nuevo... no tengo medicinas aquí... por favor para...- me solté de él y caí al suelo... cuando me di vuelta para levantarme, sentí él me agarra por la cintura - no Omar...- le pegué en las manos - suéltame...- grité.

Omar: Cuanto más grites, pero peor será... yo no voy a parar mi amor... sólo cuando termine - le he arrastrado al sofá, donde la he tumbado y me quedé sobre ella - me encanta cuando está así, agresiva conmigo...- sonríe travieso - vamos mi amor, mi tigresa... soy tu marido, no un desconocido - mordiscava su cuello - no te preocupes, no te dejaré marcas en la cara, pero eso no quiere decir, que no te las dejaré en el cuerpo.

Victoria: Estás loco Omar... suéltame... aaii... no lo hagas por favor... Omar... para...- lo golpeaba como podía, tratando de detenerlo - no me lastima así.

Omar: Cállate la boca - le di una bofetada en la cara - va a ser peor de lo que imaginas si no te callas... todavía no me has visto loco Victoria, pero vas a ver mi amor - le agarré de los brazos, por encima de la cabeza y le bese con gusto, sin molestarme en hacerla daño.

Victoria: Huum... hum...- me debatía de abajo de él - para...- intentaba soltarme de él - paraaaaaaaa...- intenté empujarle, pero fue sin éxito.

Cuanto más ella se desesperaba, más me divertía con aquella situación. Ella me iba a pagar, por todo lo que me estaba haciendo pasar.

Victoria: Omar...- lo miré ya sin fuerzas - para... por favor...- hablé jadeando de cansancio - no me duele Omar... para...

Estaba llegando a la puerta del apartamento de mi hermana, cuando oí sus gritos y me quedé allí escuchando por un rato. Me di cuenta de que algo no estaba bien, ella gritaba desesperada por ayuda y parecía que era por mi cuñado. Yo ya había oído a Lolita decir algo al respecto, así como ya había oído a Vick pedir ayuda. Ya sabía lo que pasaba. Agarré el picaporte, abrí la puerta, y vi a Omar sujetando a mi hermana así.

Victoria: Suéltame por favor...- hablé casi suplicando.

Omar: ¿Tienes idea de todo lo que me está causando Victoria? ¿Tienes noción de tu inconsecuencia? Me estás convirtiendo en este monstruo... destruyendo la familia que tanto amo y todo por culpa de tu maldito amante - hablaba con rabia.

Marcela: ¿Qué está pasando aquí?...- cuestioné los mirando - suelta a mi hermana Omar...- hablé quitándole de encima de Vick.

Omar: Suéltame Marcela - me alejé de ella - la culpa de todo esto es de tu hermana... habla Victoria, le dice a tu hermana la santa que eres - estaba enojado.

Me senté en el sofá y me levanté rápido, alejándome de él.

Victoria: Eres un loco...- grité apoyándome en el sofá.

Omar: Y tú una adúltera - grité con rabia - predica tanto a la familia y vive por ahí, frotándose con su amante... sus hijos están en casa necesitándote... mientras estás aquí, con tu amante, jugando a la familia feliz - hablé rojo.

Marcela: Victoria...- la miré - ¿eso es verdad?... - La miré seria... yo ya lo sabía... escuché una conversación de ella con Gaby una vez... pero iba a entrar en el jueguito de mi cuñado - lo que Omar está hablando, es verdad Victoria?... - la estaba mirando.

Victoria: Espera... ¿Vas a ponerte de su lado?... mira cómo estoy Marcela... él me estaba golpeando.

Marcela: Dime Victoria... ¿estás engañando a tu marido? - la mirada.

Sigue...

Llévame En Ti - Victoria y César (Español) (Concluido)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora