❤ LET 19 ♠

182 19 7
                                    

Penúltimo capítulo 😍
Felíz Navidad mis amores
🎄❤️😘🙏


César: Victoria - la miré sin creer lo que sentía - amor, no hiciste eso...- me reí llevándola a la cama - ¿estabas con deseo amor? Sin nada... tu amor acabará con esto, ahora mismo - me quité la ropa interior y me acosté en la cama, encima de ella.

Victoria: Si, lo hice...- sonreí traviesa - no sabes lo grande que es mi vida... para nada... solo esperando por ti... tu vida está cogiendo fuego - dijo poniendo mis manos a la altura de mi cabeza - acaba mi amor...- sonrío, jadeando.

César: Entonces deja que tu bombero apague ese fuego - me arrodillé en la cama - será como siempre te gustó... cómo nos volvimos locos juntos - la puse de cuatro en la cama, abrí un poco sus piernas, me acomodé allí mismo y poco a poco fui le tomando con calma y con cuidado.

Descansé mis manos en la cama y sentí que se acomodaba allí. Me miré al espejo de la cama y cerré los ojos, sintiendo que él me penetraba así, torturándonos.

Victoria: Oohwwww... Césaaarr...- dijo jadeando y un poco temblorosa - te extraño mi amor...

César: Yo también mi amo... yo también estaba, pero necesitaba este descanso - jadeé acariciando su trasero - te amo mi vida... te amo...- me agarré a su cintura y comencé a moverme lentamente en su interior.

Victoria: Lo necesitaba... pero ahora no lo necesito...- sonreí, sintiendo su caricia - yo a ti mi amor... huuummm...- lo sentí comenzar a moverse y apoyé mis codos en la cama, dando más acceso a él.

César: Ya no necesitas mi amor... disfrutemos nuestra noche de bodas - apreté su cintura y en ese momento ya no tenía esa calma, comencé a moverme rápido e intenso, como a ella le gustaba y yo también.

Victoria: Aaaaaaaahhhh... mi amooorrr...- apreté las sábanas... gemí con picardía y doblé un poco más mi cuerpo - eso mi amor...

César: Eso Vicky... aaaah mi amor... que caliente - jadeaba moviéndome cada vez más fuerte y rápido en su interior, llevándonos a una completa y compleja locura.

Victoria: No para amor... aaaahhh... bombero ardiente...- gemí sangriento de tanto placer.

César: No pretendo amor... no pretendo amor... aaaaaahhh...- armé sintiendo que ella me apretaba íntimamente, me volviendo cada vez más loco... no paré, al contrario, me moví mucho más fuerte e intenso, escuchando el ruido, la conmoción que nuestros cuerpos emitían cuando se encontraban.

Vuelta y media contrae mi interior con fuerza y precisión. Sabía lo loco que estaba. Sin más soportar, comencé a mover mi cuerpo contra el suyo, lo que me hizo gritar de placer.

Si ya estaba loco de deseo por ella, cuando comencé a sentir que se movía así, me volví loco sin control. Apreté su cintura con fuerza y ​​entré, yendo tan profundo y fuerte como pude. Sentí que nuestros cuerpos se entendían, se unían y luego se entregaban en el mismo instante. Fue tan intenso y tan magnífico. En el mismo segundo nuestros cuerpos sufrieron un espasmo, su interior se contrajo, justo cuando el mío pulsó con fuerza dentro de ella, llevándonos al más perfecto de los orgasmo.

Victoria: Aaaaahhhhhhh...- grité y grité fuerte... apreté las sábanas con tanta fuerza, que me dolían los dedos... ese momento fue tan mágico e intenso, que sentí que de mis ojos caían algunas lágrimas.

César: Victoria - jadeé besando su espalda - mujer ¿qué fue eso? - me reí de buena gana - todavía nos vamos a matar así - salí de ella y me acosté a su lado, empujándola hacia mi pecho.

Victoria: Yo tampoco sé cómo decir mi amor...- le sonreí limpiando mi cara y me acomodé en sus brazos - ni siquiera digas eso.

César: No llores mi amor...- besé su cabello - esto no es un sueño, es nuestra realidad... nuestra dulce y bella realidad, mi bella vida .

Victoria: La realidad mas linda...- lo apreté un poco - te quiero tanto César... tanto...- lo miré.

César: Te amo mi amor... te amo tanto, que nada en este mundo es capaz de explicar lo que siento por ti... es capaz de expresar este amor - besé tu frente - duerme un poquito amor, nuestro día fue agotador, pero con toda certeza del mundo, él valió mucho la pena.

Victoria: ¿Dormir señor Évora? - lo miré y me reí - no puedo creer lo que oigo... ¿quién eres y qué hiciste con mi César? ...- dijo de manera divertida.

César: ¿Dije dormir? - la acerqué a mi cuerpo - pongámonos al día con nuestra conversación - me reí apretando su pezón.

Victoria: Dije...- me reí sintiendo que me apretaba - me muero por ponerla en días...- me subí encima de él, sintiendo su provocación y me posicione... en un descuido de él, nos encajé nuevamente y empecé a moverme sobre él, con fuerza y precisión.

Era la mujer que tanto amaba y tenía no solo en la cama, sino en la vida. Digo que fue la mejor noche de nuestras vidas, nos amamos hasta el punto del agotamiento total. No sé a qué hora dormimos, pero sé que era de día y fue magnífico. Disfrutamos de nuestra luna de miel allí en Acapulco, con nuestros hijos, tanto de Vicky como los míos. Todos se llevaban bien y eso era lo que importaba. Allí estuvimos unas semanas, pero pronto tuvimos que regresar por las clases que se iban a reanudar.

Meses después...

La vida era maravillosamente buena, Victoria y yo vivimos una completa y magnífica luna de miel. Estaba completamente enamorado de los niños, al igual que ellos de mí. Casi todos los fines de semana mi hija venía a quedarse conmigo y durante la semana se quedaba con su madre. Mi madre había vuelto a casa, no estaba acostumbrada a vivir afuera - me reí - pero siempre estábamos en contacto y cuando los niños tuvieran vacaciones, viajaríamos para allá. Ese día había dejado a los niños en la escuela y volvía a casa con un hermoso y delicioso pastel de chocolate con helado. No sé qué pasó, pero las ganas de comer fueron enormes. Llegué a casa y entré llamando a mi amor.

César: Lolita, ¿sabes dónde está Vicky?

Lolita: La Sra no está... se fue poco después de que el Sr...- dijo tranquilamente.

César: ¿Salió? Pero ella no me dijo nada - extrañe - está bien Lolita, guárdalo por favor... estaré en la habitación, si necesitas algo... con permiso - dije y me fui.

Lolita: Decidió irse en el último momento señor... de hecho no se veía muy bien...- suspiré - claro señor... toda.

Escuché lo que dijo Lolita y fui a mi habitación. Saqué mi teléfono celular y llamé a Victoria, pero solo dio correo de voz. Llamé varias y varias veces, pero no conseguí, lo cual ya me extrañaba.

Después de hacer lo que quería, fui a una tienda y compré algunas cosas que necesitaba. Pronto volví a casa y entré. Caminé lentamente hacia la habitación y cuando entré, vi a César allí.

Victoria: Mi amor...- sonreí y me acerqué a él, dándole un beso - ¿hace mucho que llegó?

César: Vicky - le abracé - amor, ¿está todo bien? Lolita me dijo que no estabas muy bien... llegué hace un rato y te estaba llamando, pero estaba cayendo en el buzón de voz.

Victoria: Si, mi amor...- sonreí - solo estaba un poco mareada... pero es porqué no he comido desde anoche... pero ahora estoy bien...- le di un beso en la cara - en la caja postal?...- tomé mi celular y lo miré - creo que alguien se olvidó de ponerlo a cargar - me mordí el labio inferior.

César: Olvidada como siempre, señora Victoria...- saqué su celular - no puedes quedarte sin alimentarte y lo sabes... ¿has comido algo? Aun así salió sola - dije mientras ponía su celular a cargar - debería haberme esperado, o haberse ido conmigo.

Sigue...

Llévame En Ti - Victoria y César (Español) (Concluido)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora