𝑶𝒇 𝒈𝒐𝒅𝒔 𝒂𝒏𝒅 𝒗𝒊𝒌𝒊𝒏𝒈𝒔 | Ubbe Ragnarsson

1

Despiertas con una molestia en tus ojos causado por la luz del sol.
Escuchas las olas del mar a lo lejos, apenas tus sentidos estaban tomando lugar. Te levantas sacudiendo la arena en tus pantalones.

—¿Qué demonios pasó?– Thor habló en voz alta.

—¡Dioses, cállate!– Gritaste agarrándote la cabeza.

Loki se rio por lo bajo.

—Parece que nuestra querida hermana no es tan dura como le gusta dejarla.

—Loki, es en serio– antes de que pudieras terminar tu oración, notaste que había personas acercándose a su alrededor.

Observaron sus atuendos desde donde estaban parados.

Llevaban capas gastadas que estaban cubiertas de pieles de animales, viejas túnicas sucias y pantalones caídos. La mayoría de ellas tenían el pelo que fluía por el viento y otros tenían la mitad de él cortado en la parte posterior, sus barbas parecían rígidas y enredadas. Tenían hachas, espadas, y escudos pintados en sus manos.

Sintiéndote amenazada, giraste tu mano y la niebla azul cubrió tu cuerpo dejándote con tu armadura de valquiria y una espada colgando de tu cintura.

Al mirar a tus hermanos, te diste cuenta de que ellos también habían decidido cambiar su atuendo por su armadura.

—¿Por qué están vestidos así?– cuestionaste.

—Parece que no se han puesto al día con las tendencias– Loki dijo sonando igual de confundido.

Cuando los hombres se acercaron a ustedes abrieron paso a un hombre con barba blanca junto a cuatro más jóvenes con un parecido detrás de él.

—¿Cuál es su propósito aquí?– El hombre habló en su lengua materna mientras te miraba de arriba abajo. Tal vez era por tu cabello rojo brillante y vestimenta.

Frunces el ceño ante el lenguaje antiguo y te abstienes de alcanzar tu espada ante las miradas vulgares de los cinco hombres.

Miraste a Thor y a Loki mientras te miraban confundidos sobre por qué el hombre estaba hablando en un idioma que ustedes tres no habían escuchado en siglos.

—¿Qué es este lugar?– Preguntaste en nórdico antiguo, con confianza a pesar todo.

—Kattegat– El hombre dijo –¿Cuál es su propósito aquí?

Antes de que pudieras decir algo, Loki habló.

—Somos viajeros. Simplemente nos detenemos para encontrar un lugar para descansar– Él hablaba en el idioma antiguo, y te miraba a ti y a Thor como una forma de decirles a los dos que siguieran el juego.

—Si son viajeros como usted dice, ¿cuál es el propósito de vestirse como guerreros reales?

Ante esto, los tres dudaron, tratando de formar una respuesta razonable.

El hombre simplemente gruñó y en cuestión de segundos ustedes fueron abordados en el suelo en los intentos de los cinco extraños de atar sus muñecas.

—Apártate hermano– Le gruñiste a Loki al notar el brillo furioso en sus ojos.

—¡Estos nórdicos no tienen idea de a quién se enfrentan!– Él gritó.

El hombre que al parecer estaba a cargo simplemente se rió del acto fallido de intimidación de Loki.

—Por cierto, soy Ragnar– Dijo el hombre mientras te ataba las manos.

—No nos importa– Loki murmuró.

Hombres nórdicos, pensaste cuando finalmente todo encajó en su lugar.

El pueblo, la ropa, el idioma, las armas, el cabello y la barba. No te habías dado cuenta antes, pero finalmente todo tenía sentido para ti.

—Esa máquina en la que Tony y Bruce estaban trabajando. Creo que fue un viaje en el tiempo. Debemos habernos interpuesto cuando la activaron.

—¡Y ahora te das cuenta de eso!– Loki gritó cuando comenzaban a ser empujados hacia adelante por los seis hombres.

—¡Son brujos!– gritaron entre la multitud de personas a su alrededor.

—¡Es verdad! Vimos que aparecieron a través de una burbuja azul brillante– la gente del pueblo empezó a opinar pero Ragnar los tranquilizó.

—¡Hey más despacio!– le gritas al hombre que te jalaba. Que tenía un gran parecido a Ragnar.

—Perdóname viajera– se disculpó haciendo énfasis en la última palabra. Rodaste los ojos ignorándolo.

—¿Qué vamos a hacer?– Thor preguntó mientras Mjölnir se sacudía contra su pierna en su cinturón. En lo contrario de ustedes dos a él lo jalaban por dos de los hijos de Ragnar.

—Vemos lo que estas personas hacen con nosotros y esperamos a que Tony y Bruce puedan recuperarnos– Dijiste y te desataron jalándote hacia el gran salón.