Mentores y Tributos

22. Viaje

Cuando despierto noto que la nieve ha empezado a caer como sinónimo de que estamos iniciando el invierno, de buena gana me quedaría acostada viendo como los pequeños copos bailan fuera de la ventana, sin embargo no es algo que pueda permitirme debido a que hoy inicia la gira de la victoria de Katniss y Peeta.

Con esfuerzo me levanto de mi cama en búsqueda de ropa calentita que sirva para mi pequeña visita por el distrito, debo despedirme de la gente que conozco pues el viaje dura más de dos semanas y muchas cosas pueden suceder en ese tiempo.

Al salir de casa la nevada ha cesado pero el frío persiste, salgo de la aldea de los vencedores y camino rumbo al quemador, no suelo frecuentarlo como antes desde el problema con Katniss pero es el único lugar donde puedo encontrar a Darius.

—Hola rojito — lo saludo en cuanto lo veo.

Me costó trabajo volver a dirigirle la palabra después de toda la escena que hice hace meses, por suerte poco a poco las cosas volvieron relativamente a la normalidad, Darius no ha vuelto a sacar el tema mi falso enamorado así que volvemos a ser tan amigos como antes, o algo así apenas si pues apenas si he visitado el quemador en estos meses.

—¿No deberías estar en el tren rumbo a los otros distritos? —Pregunta sacudiendo mi cabello cuando estoy junto a él.

—No hasta medio día, de ahí me desaparezco por tres semanas así que no me extrañes — digo entre risas.

— Es imposible no extrañarte lindura — contesta el pelirrojo con un tono muy similar al de Haymitch.

—¿Desde cuando sabes cómo habla Haymitch?— pregunto sin poder dejar de reir.

—Que puedo decir, Abernathy se ha paseado por aquí bastante seguido quejandose de cuan difícil es vivir cerca del chico, la preciosa y la lindura —explica el.

—O claro, y asumiste que la preciosa era Katniss. No hagas tan obvio que ella te gusta — digo con tono acusatorio que procuro ocultar con risas.

—Ella no me gusta!! Aparte tu eres la enamorada no yo — responde el empezando a molestarse, al parecer lo que dijo Peeta en sus juegos ha hecho mi vida un tanto peliaguda.

—Ya! Ya!! Tanquilo... como sea, mejor dejemos de hablar de eso. —contesto intentando parecer divertida. Después de eso ambos nos limitamos hablar de otros temas.

Desayuno en el puesto de Sae mientras hablo con el agente de la paz y otras cuantas personas, al terminar me despido de todos y me voy rumbo a la zona comercial. Visitó a Delly y su familia, me despido de los cuatro y les prometo traerles regalos. Después me dirigo a la panadería para comprar alguna barra de pan para Haymitch y despedirme de los Mellark.

—Buenos días!!—digo con voz cantarina entrando a la panadería, para mi sorpresa me topo con Peeta y su padre —Oh!! Premio doble!! Los dos Mellark que quería ver.

—Buenos días Fei ¿como has estado?—me dice el señor Mellark dándome un abrazo.

—Bastate bien, nerviosa por lo de hoy, pero bien —digo riéndome — Venía a despedirme y asegurarle que le traeré a Peeta de regreso en tres semanas.

—Mejor dicho, yo te traeré de regreso a ti, ya te gusto ir muy seguido al capitolio — me reprende Peeta haciéndose el digno provocando que incluso su padre ría un poco

—Estoy seguro de eso, los dos regresen a salvo y disfruten la comida —dice el hombre mientras nos da palmadas en la espalda.

Veo como Peeta y su padre se despiden, en sus miradas hay tristeza pues los tres sabemos que una vez que lleguen las cámaras Katniss y Peeta deberán fingir estar enamorados con locura, apuesto que al señor Mellark le duele ver sufrir a su hijo.