Mentores y Tributos

10. Despedida

Cuando la cena termina  todos juntos vamos a la sala donde vemos el resumen de las entrevistas. No pongo atención y me limito a dar sorbitos a una copa de vino. Cuando pasa la entrevista de Katniss noto que efectivamente llega a ser agradable pero nada más. Peeta por el contrario luce encantador, y ha borrado del mapa al resto. 

Las entrevistas terminan y con ello llegan las despedidas, Effie es la primera en hacerlo y Katniss y Peeta parecen conmovidos. Yo me limito a ver a ambos chicos y Haymitch hace lo mismo, tal vez él también piense lo que yo. Uno de ellos debe salir con vida.

— ¿Un último consejo?— pregunta Peeta mirándonos a ambos con detenimiento. 

Haymitch y yo intercambiamos miradas rápidas y él es quien habla. 

— Cuando suene el gong de inicio corran lo más lejos de la cornucopia, no creo que vayan a sobrevivir el baño de sangre. Busquen agua, ella será su mejor amiga— dice mi antiguo mentor. 

— Fei se metió a la cornucopia en sus juegos— dice Katniss sorprendiéndome un segundo. 

— La diferencia está en que a mi Haymitch jamás me dijo que era muy peligroso entrar ahí — respondo. Cosa que parece bastar a ambos. 

— Alejarse de la cornucopia y buscar agua ¿Y después? — vuelve a preguntar Peeta. 

— Sigan vivos — decimos Haymitch y yo al mismo tiempo. No puedo evitar recordar que eso lo fue lo que él me dijo la noche antes de mis juegos. 

Haymitch se va y katniss también. Me quedo sola con Peeta y no dudó en abrazarlo. 

— No mueras tan pronto, si de verdad quiere ayudar a Katniss debes llegar lejos de lo contrario no ayudaras— digo hundiendome en su pecho. 

— Cuando estés de nuevo en casa quiero que le cuentes a Delly todas las cosas que hemos platicado, y dile que la voy a extrañar — me dice apretandome entre sus brazos. 

— Lo haré. Ambas te queremos, y si ti las cosas serán difíciles. Pero recuerda que siempre seras nuestro mejor amigo, viviremos la vida al máximo en tu memoria — digo llorando.  

— Lo se. Las quiero a las dos. — dice el. 

— Si.. si algo le pasa a Katniss mientras sigues con vida debes hacer lo posible por regresar— le digo mirando sus ojos azules. Si Katniss muere quiero que mi amigo gane, es así de simple.

— Está bien— dice dándome un beso en la frente. 

— Duerme lo más que puedas. Y da lo mejor de ti — le digo mandandolo a su habitación y yo dirigirme a la mía. 

 Ya en mi habitación me doy un baño y me relajo procurando evitar llorar, no puedo evitar tomar un buen puñado de pastillas de colores, y para mi fortuna sirve pues poco a poco concilio el sueño, mañana debo despertar antes de las cinco para ser llevada al edificio de mentores donde podre seguir paso a paso a Peeta y Katniss. 

Cuando despierto a causa de las pesadillas son cerca de medianoche y siento una fuerte presión en mi pecho debido a que esta vez mi pesadilla trato sobre la muerte de Peeta, algo tan aterrador y tan probable que me hace querer salir de ahí. 

Salgo primero a la sala y me asomo por algunas ventanas sin embargo veo a lo lejos a fiesta que hacen los capitalinos para festejar el comienzo de los juegos, es desagradable y en teoría nosotros como vencedores podemos ir en búsqueda de patrocinadores  pero Haymitch y yo no lo hacemos, es demasiado desagradable que siempre hemos preferido quedarnos a dormir. 

Cuando nos preguntaron la razón de eso Haymitch dijo que una niña como yo debía descansar lo más posible antes de recluirse en el edificio de tributos. Cosa que bastó pues jamás me volvieron a insistir.