Alma vegetal 2

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Cómo cuando quieres escribir un fanfic bonito y romántico pero tus personajes que obligan a ser dramática. Realmente quería escribir algo romántico pero sexy, sin embargo mi conciencia entro al ataque y salió esto. Bien sabemos que Hashirama sufre de "episodios depresivos", a mí me parece un recurso cómico de Kishimoto. Pero sí quiero que mis personajes no sean tan occ necesito incluirlo y esta es la justificación.
Les prometo que no me gusta el angs ni el drama inecesario así que confíen en mí.
Claro que si tienen una duda, comentario o les gusta háganmelo saber. Los términos me los saque de Wikipedia, no soy experta en plantas, así que sí alguien es biológo o botánico perdón.
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Como ya dije las plantas tiene sus propios mecanismos de defensa. Pero a diferencia de los humanos ellas nunca los usan con el fin de simplemente infringir daños, siempre es para proteger, ya sea a ellas mismas o a sus allegados.

Verán las plantas no son tan egoístas como uno creería. De los seres sensibles pueden contarse entre los más nobles. Por ejemplo el   Datura stramonium  sí es atacado por una plaga no le importa que esté muriendo más allá de la salvación avisará a sus hermanas para que puedan defenderse.
Las angioesoermas trabajan muy duro en su apariencia esperando que alguien se compadezca de ellas y las polinice aúnque tengan que sacrificar todo por ello incluso se belleza como la Amorphophallus titanum.
Las plantas que producen frutos y las coníferas se esmeran tanto en poder llevar más lejos a su descendencia aún sabiendo que nunca las conocerán pero esperando que su destino sea una tierra rica en nutrientes y con abundante agua.

Desde que tengo uso de razón había decidido que este sería mi camino. No esperaba que mi vida estaría tan llena de obstáculos.
Mis hermanas parecían llevarlo con tanta naturalidad...
Mis hermanitos desde siempre me han comparado con un árbol fuerte y robusto en el cual podrían acostarse a disfrutar su sombra.
Mi clan me veía como pasto, solo les parecía bueno para el ganado. Ahora les parecía una abundante cosecha después de una sequía.

Pero yo...Para mi horror me sentía últimamente... una planta parásito. Desde que conocí a Madara descubrí que no soy tan diferente de mi padre. Y ahora que está conmigo...la venda a caído de mis ojos.
No es culpa de nadie, esta es mi naturaleza y tengo que aprender a controlarla. Debo controlar mis instintos si no quiero volver a hacer daño.

Mate a un bosque entero robando sus nutrientes y energía. ¡Hasta la cuscuta se controla! ¡Y yo rebase los límites! ¡Igual que mi padre no me importaron las vidas que tendría que sacrificar con tal de conseguir lo que quería!.
Acosé y casi secuestré a un hombre solo por conseguir una cita. ¿Qué diferencia hay entre una Dionaea muscipula, Drosera glanduligera  o cualquier otra planta carnívora conmigo?. Deseamos a nuestra presa y simplemente la tomamos cuándo está cerca, nos aprovechamos del más leve de sus descuidos.

¡Por el gran sabio ! Casi tiró a la basura un tratado de paz por mis celos.
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Por fin nos habíamos reunido y yo no podía disfrutarlo como pensé. Mi conciencia me mataba. Su peso me asfixiaba. En cuánto ayude a Madara le dejare en paz, me apartaré de él.

Madara estaba más pálido de lo usual y su respiración era errática.
Escane su cuerpo con mi chackra y por fin supe porque me llamaba. La sirena que escuchaba eran un rastro de chakra y hormonas.

Él nunca busco atraerme, era una señal que mandaba su cuerpo para atraer a una pareja compatible. Su omega interno había confabulado contra él. Por eso no me hacía caso, ¡Ni siquiera sabía de mi existencia! ¡¿Qué he hecho?!.

La llamada de auxilio se debía a que estaba apunto de tener un celo pero por alguna razón su útero estaba malformado. Un mal congénito.
Su propia enfermedad debió impedir que entrara en calor y esto mismo hace que su cuerpo ahora trate de forzarlo a aparearse. Si sigue así, solo morirá en el intento.

Por suerte soy un médico experimentado. Mandé una ola de chakra curativo en su vientre para calmar al útero, su cuerpo entendió que el alfa elegido había llegado para calmar sus necesidades. Verifique de nuevo sus signos vitales y al ver que estaban bien, lo cede.

Tomándolo en mis brazos lo llevé a mi pueblo, fui directo al hospital e hice que me prepararan un quirófano. Tal vez no sea suficiente, pero curando a Madara tal vez pueda reparar el daño que le hice (y pude hacer) y así el podrá vivir feliz.

Llevó horas reparar el daño hecho, invertí cantidades enormes de chakra para moldear correctamente el saco uterino y la cervix. Temí los efectos que la anestesia pudiera causarle. Pero al final salió bien de la operación y más sano que nunca.
No desarrollaría quistes y podría dar a luz sin problema.
Al final cerré la herida y la borré, parecería que nunca pasó nada. No dejé rastro.

Luego con ayuda de la velocidad de mi hermano lo dejamos en el hospital. Y en su expediente (Qué las dotes de espionajede mi hermano  encontraron) escribimos la operación a la que fue sometido.
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Lloré durante días pero mi hermano se mantuvo a mi lado en cada momento. Y sin él, probablemente no hubiera salido adelante.
Aún despues de mi resolución, prometió que mantendría el plan para cuidar de los Uchiha.
Con o sin mis sentimientos no era correcto dejar que lo Inuzuka arrasarán con ellos y menos aún sin saber que estaba pasando.
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Madara despertó en el hospital muy cansado pero increíblemente feliz. Su alma cantaba en su pecho satisfecha y muy agradecida. Había un dolor sordo pero no podía dejar de llorar aliviado por algo que no entendía.

Y desde su primer celo pudo oír a su omega. Él le explicó que su alfa los había salvado y arregló lo que estaba mal con ellos.

Ya no tenía que preocuparse por el dolor y la esterilidad, ahora eran libres para disfrutar y callar a todos los que los despreciaron.
Hubo un error, uno que no fue detectado ni reparado y ahora, por fin se había ido para siempre.

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No se preocupen este no es el final. Eso está muy lejos aún.

El celo del bosqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora