Los mitos del Clan Senju (Anfitrión parte 2)

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Pensé que sería mejor dividir este capítulo en dos partes para que no fuera tan pesado.

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Con la desaparición de Ashura; los desertores de Kaguya dieron por perdidas sus esperanzas y se limitaron a rogar en silencio que la emperatriz no tomara represalias por sus acciones pasadas; pero lo más importante es que sin su rival político y amorosa pudo rebelar que Indra estaba vivo.

Le había dado un fuerte sedante que lo dejó noqueado por días, los suficientes para elaborar una farsa y aprovecharse del declive que provoca la muerte de tu contraparte, misma que había experimentado de primera mano y por lo tanto sabía cómo sacarle ventaja.  Con Ashura fuera de juego pensó que Indra volvería a concentrarse sólo en ella y por fin cedería ante ella. Pero su hermoso nieto estaba renuente a siquiera dirigirle la mirada. Su corazón se rompió un poco pero sabía que sólo debía esperar a que se empezara a despedazar por la muerte de su pareja, nadie podría sobrevivir por su cuenta la dualidad lo es todo, ni ella misma podría hacerlo y sólo ella estaba a la altura para reemplazar Ashura.

Kaguya notó que su vínculo con su esposo estaba tardando en degradarse y podrirlo por dentro cómo era lo esperado. Pronto notaría que se debía a su embarazo y de seguro su bebé estaba en peligro. No podría permitir que ella le hiciera algo, era lo ultimo que le quedaba de su amado y ya le había fallado tanto. A todos, había sido tan crédulo y jamás podría deshacer el daño ya hecho sólo le quedaba su bebé. El preciado último regalo de su  Ashura.

En cuanto pudo Indra huyó del plano celeste y se ocultó en el terrestre, sin embargo, Kaguya implacable mandó a sus tropas a buscarlo. La corrupción que le generó su perdida causó múltiples catástrofes naturales, Indra sabía que no podía huir para siempre, menos cuando el día en que debía dar a luz se acercaba a pasos agigantados. 

Finalmente, durante una tortuosa glaciación su bebé nació, indefenso y hermoso. Indra lloró de frustración pese a que no le dolió el parto se sentía muy débil. Sin la esencia de Ashura dentro suyo la corrupción empezó a degradarlo por dentro y fuera. Pensó que moriría pronto y temió por su pequeño puesto que oía unos pasos aproximarse.

La fortuna había acompañado a su padre y juntos lo encontraron oculto entre unos glaciares, entre los tres decidieron y juraron proteger al pequeño y no dar a conocer su existencia. Fortuna cómo su madrina se encargaría de ocultarlo y ver que viviera bien; lamentablemente por sus orígenes, él y su prole se verían obligados a vagar huyendo siempre de la temible emperatriz;   mientras que para distraer a Kaguya y asegurarse que nunca supiera de la existencia del pequeño Indra tendría que entregarse a ella e intentar formar una dualidad. Antes de separarse de su hijo Indra le dio lo único que podría entregarle a estas altura. El Sharingan lo protegería y tal vez, al ver sus ojos Kaguya desistiría de hacerle daño pues eran su mayor regalo y sí eso no funcionaba eran lo suficientemente poderosos para poder hacerle frente.

Kaguya estaba demasiado podrida para poder salvarse, así que pese a los siglos en que formó una dualidad con Indra, esté acabo pereciendo. Muchos murieron por las catástrofes que el dolor de perder a su amado habían sido producidas inconscientemente por la emperatriz. Empezó desde ese día a descarapelarse y perdió cualquier rastro que conservaba de bondad. Completamente negada a creer que había perdido de nuevo a su pareja, mandó a que le dieran mantenimiento al cadáver de su amado y que se le adornase, lo sentó en su trono y todos se vieron obligados a fingir que Indra seguía vivo y rendirle pleitesía.

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⏰ Última actualización: Feb 28, 2021 ⏰

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