I See Red - Michele Morrone

#46

Canción: "Unsteady" - X Ambassadors

Michele memiraba expectante, esperando mi respuesta. A pesar de estar perdida, mirando al vacío, no estaba pensando en nada. Las lágrimas que una vez quisieron salir, habían desaparecido de la escena, ahora solo ardían mis ojos por aquellas que sí lograron salir.

-Está bien. - dije sin emoción. ¿Eres idiota o algo Cameron? Estaba cansada mental y físicamente que decidí no escuchar lo que decía mi subconsciente. Miré a Michele, quien me miraba extrañado por mi actitud.

-¿Qué? - preguntó confundido.

-Está bien. - repetí mirándolo a los ojos. Cameron, por favor reacciona. Sabía que la emoción que predominaba en mí era la tristeza, pero no podía sentirla. - Iré a recoger mis cosas. - dije levantándome del sillón en el que estaba. Miré a Michele y sonreí lo más real que pude. Mi inconsciente me seguía rogando por hacer algo, pero por alguna razón mi mente lo ignoraba.

-¿Cameron? - dijo confundido, como si él supiera que ya no era la misma. Me giré lentamente a mirarlo; se veía confundido y sus ojos mostraban dolor.

-Estaré bien. - ¿podré algún día estarlo? No lo sabía y no me importaba eso en estos momentos. Quería gritar y llorar pero mi mente no me hacía caso. Subí las escaleras con pesadez, sintiendo la mirada de Michele detrás de mí.

Empaqué todas las cosas que había llevado a casa de Michele a lo largo de nuestra relación y pedí un taxi que me llevara a mi departamento aunque Michele se había ofrecido a hacerlo, pero rechacé su oferta diciéndole que no se preocupara.

-¿Estás segura que no quieres que te lleve? - preguntó dudosos y aún confundido por mi actitud mientras que el taxi esperaba en frente de la entrada.

-Lo estoy, gracias. - contesté intentando sonar lo más normal posible y caminamos hacia el taxi mientras él me ayudaba con las bolsas que había empacado. Metimos las bolsas a la cajuela del coche y nos miramos fijamente. Y me volví a perder de la misma forma que siempre lo hacía cuando nos mirábamos. Todo a mi alrededor desapareció y sólo quedábamos él y yo. Sentí que las emociones que una vez se habían ido, estaban volviendo a aparecer poco a poco. El nudo en mi garganta comenzó a formarse y mi mente solo pensaba en el hecho de que este era el final. Aquí acababa todo lo que una vez pensé que duraría toda la vida.

-Te amo. - dije con lágrimas en los ojos y con la respiración entrecortada. El corazón me latía tan rápido que incluso podía escucharlo. Michele me miró asombrado con los ojos llenos de lágrimas. Me acercó a él y hundí mi cabeza en su pecho, queriendo quedarme ahí por siempre pero sabiendo que no era posible.

-Es por tu bien Cam. - comencé a llorar sin control. No quería aceptarlo, no podía. Michele besó mi cabeza y se alejó rápidamente de mi para entrar a su casa. Dejándome ahí, parada con el corazón en la boca, mirando como entraba a su casa.

...

Entré a mi casa y una oleada de sentimientos me inundó por completo. Al cerrar la puerta, comencé a llorar como una niña pequeña, incluso tuve que sentarme en el piso, en donde me hice bolita. El dolor que sentía me estaba matando y no sabía qué hacer para dejarlo de sentir. No odiaba a Michele, lo amaba para ser exacta. Pero ya no estaba conmigo, lo nuestro se había acabado en un abrir y cerrar de ojos.

Entendía su punto; todo lo "grave" que había pasado en mi vida había sido culpa de su mamá y por una razón que para mí aún es una incógnita. Pero por otro lado, la mayoría de mis buenos momentos habían sido a su lado y él siempre estuvo ahí para mi. Me costaba creer que ya no lo estaría.

Al calmarme, caminé con dolor en el cuerpo a mi habitación para poder recostarme. Ni siquiera me cambié la ropa, simplemente me metí en las sábanas y me quedé profunda. Sintiendo cómo mientras estaba quedándome dormida, las lágrimas salían por su propia cuenta y teniendo la misma pesadilla de los últimos 5 días, pero esta vez había algo diferente. Esta vez, no me importaba que me quitaran la vida.

Está corto, pero subiré la continuación en el trayecto del día!